Atrapada en el juego del amor

No me das miedo

-Briseida...¿Que haces aquí?

 

-Es mi casa estúpido, la pregunta es, ¿Que haces tú aquí en mis tierras?

 

-¡Ja!, Eres tonta o estúpida, explicame la diferencia porque en ti veo las dos cosas

 

-Te las puedo explicar si quieres, no sabía que eras tan descerebrado para pedir que te explique algunos términos a la persona que lastimaste sin razón

 

-¿Sin razón?, ¿Eso crees?, Pues ve explicándome esos dos términos porque veo que el descaro te queda grande

 

-¿A que te refieres?

 

-No te hagas la pobre perita en dulce, sabes lo ruin que es tú familia, todos son una bola de mierda, empezando por tu zorra madre

 

Mi ira se hizo presente,le di a Axel un puño en toda la cara, y aunque logré mi cometido, el alcanzo a tomar mi brazo

 

-No me vuelva a tocar con esas sucioas manos llenas de sangre y muerte

 

-Y tu a ella no le vuelvas a tocar un solo pelo, Briseoda no está sola 

 

Elliot tomaba a Axel del brazo, note como Elliot era unos centímetros más alto que el, eso me gustó, por primera vez me sentí defendida, segura de que no me pasará nada

 

-Mejor ve hablando porque la espías en la noche, habla, o podemos terminar esto aquí de una vez y no complicar más las cosas -notaba irá en la mirada de Elliot, no se porque, pero me gusta verlo de esa forma

 

  • -No te metas, no es tu problema, ocupate de tus propios desastres, lo que pase entre esta puta y...-Elliot no lo dejo terminar, le dio un gran golpe a Axel en la cara, su furia se fue agrandando, le iba a propinar otro, pero no lo permiti, no así, puse mi mano delicadamente en el hombro de Elliot, el me miró, creo que mi tacto lo calmo

 

 

-Calmate Elliot, todo a su tiempo

 

-¡Bris!, ¿Pasa algo?, Escucho gritos, no quiero que se lasti...

 

Dorothea entró a nuestro rango visual, su mirada mostraba impacto, seguí la línea de sus ojos, miraba a Axel, vi en el la misma mirada de desconcierto, era como si se conocieran de antes

 

-Tu...maldita....¿¡Que haces aquí!?

 

Dorothea no le contesto, salió despavorida del lugar como alma que lleva el diablo, le hice un ademán a Elliot para que sacará a ese idiota de aquí, su sola presencia dañaba mis córneas, entre en casa, note que Dorothea se había encerrado en su cuarto, quería interrogarla, pero sentía mucho estrés en mi, a pesar de que actúe normal con Axel aquí, mi alma imploraba a gritos de que huyera de ahí, de que hay peligro, del dolor, huir del problema, y es algo no volveré a hacer, crei que en algún momento algo fallaría, pero no fue asi, subí lentamente a mi cuarto, con cada paso que daba mi pecho junto a mis piernas comenzaban a pesar, tomé una bata de baño, me fui a la ducha y me despoje de mis prendas, tocar el agua bajo mi presión sanguínea que, según yo, estaba en una forma abismal, mi mente se aclaró, respiraba mejor, use un suave pijama, de un salto estaba en mi cama, me encanta el rose de mi piel fresca con las suaves y frías cobijas, en eso vi como la sombra de Elliot entraba por mi habitación

 

-¿Como te fue? - En mi pregunta se notaba la ansiedad por su respuesta

 

-Bien... Demasiado bien, me pude llevar un gran premio

 

-¿Si?, ¿Que cosa? -Ahora si que tenía más curiosidad

 

-Mira -De su bolsillo saco un diente, sin sangre para mí sorpresa

 

-¿Le quitaste un diente?

 

-Si

 

-¿Y por qué no tiene sangre?

 

-Lo limpie antes de mostrártelo, no pretendes que le saque el diente a alguien y te lo muestre con sangre, saliba y quién sabe que más porquerías 

 

-Tienes razón, pero si sabes que tirándole un diente no es suficiente

 

-Lo se, después de todo lo que te ha echo solo quería que se fuera con una pequeña advertencia

 

-Y si que lo hiciste bien, solo que hay algo raro que aún no sale de mi cabeza

 

-¿Que cosa?- Dice Elliot mientras guarda su premio y se sienta juntos a mi en la cama

 

-El comportamiento de Dorothea cuando vio a Axel no es normal, apenas lo vio salio corriendo como si al mismísimo demonio hubiera visto

 

-Bris, sus razones debe tener, quizás tiene miedo a conocer gente nueva

 

-Algo me dice que va más allá de eso

 

-Bueno, sea lo que sea siempre te apoyaré -Sus manos las posó sobre mi cintura y junto sus labios con los míos, era lindo los momentos que pasó así con el

 

-¿Estas seguro que no debemos preocuparnos?

 

-Si sientes que hay algo mal, la interrogamos mañana, no te alarmes linda, aún nos queda mucho tiempo, esto es solo el principio

 

-De acuerdo, ¿Donde esta mi tía?

 

-Me dijo que llegaría en unos 10 minutos, al parecer hay mucho tráfico, una moto chocó con un camión, al parecer el motociclista murió, el del camión, no sé que le podrá pasará, pero bueno, eso ya es otro caso

 

-Bien, ¿Hay algo de cenar?,mi estómago se está comiendo así mismo - le dije con mi cara de tragedia en medio de risas

 

-Que dramática eres, ven, vamos a la cocina, quizás allá algo

 

Fuimos a la cocina como antes se mencionó, no tenía tanta hambre, así que tome un pan de queso, lo calenté un poco y saqué un vaso de leche tibia, no era mi favorita, pero me servía de maravilla para calmar mis nervios

 

-¿Mejor?

 

-Si, necesitaba calmar mi pobre alma, a veces siento que me quebrantare en una foza de pirañas y extrañamente llena de mierda también, todo caliente al punto de hervir

 

-Pero que dices Bris, ya todo se solucionará, solo hay que ser más pacientes, llevas mucho tiempo en este país que no es de tu origen, y aunque hace mucho tiempo se pudo hacer la venganza, pero se pasaron unos acontecimientos que, bueno, hicieron que todo se rentalizara

 

-Lo se, es como si la desgracia me siguiera a donde sea que vaya




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