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POV. Michael Smith.

-¿Que tal te ha parecido mi madre?- pregunté abrazando su torso.

-Me ha parecido una mujer increible- murmura acariciando mi cabello- además de haber dicho mi segundo nombre..- gruñó con enfado.

-Oh vamos, Ramón- me burle provocando un gruñido de su parte.

-Mejor no hablemos de tu nombre...

-¡¿Crees que mi nombre es feo?!- chillé.

-Tu lo has dicho- musita.

-Aún me pregunto que fue me has hecho para enamorarme de ti.

-Un amarre- sonríe.

-¡Idiota!- reímos sin parar.

-Cariño..- murmure con suavidad llamando su atención- ¿Por qué jamás me has hablado de tu familia?

Su cuerpo se tenso inmediatamente causando nerviosismo en mi.

-¿Qué sucede?- pregunté observando su rostro- ¿He dicho algo mal?

Negó con lentitud sentándose a mi lado.

-Jamás he sabido lo que es tener una familia, cuando era pequeño podía observar como todos se negaban a estar a mi lado, odiando mi presencia en silencio sin razón alguna.. ¿Que culpa tiene un niño por sus rencores? Mi padre no había estado en mi vida, solamente eramos mi madre y yo- explicó- ella fue la única que había estado para mi en todo momento, su deseo era estar presente en el momento de mi graduación ¿sabes? Creía que ella estaría por siempre a mi lado pero me equivoque.

-Pero.. ¿Por qué?

-Ellas odiaban a mi padre, detestaban ver la felicidad en el rostro de mi madre es por eso que me odiaron mucho más cuando nací. Pero sin duda alguna sus rostros reflejaban felicidad al ver a mi madre enferma.

Fruncí el ceño- ¿Qué?

-Su corazón comenzó a fallar provocando un pre infarto, aún recuerdo su rostro cuando ocurrió, mi desesperación llevándola hacía el hospital. Ese fue el comienzo de mi tristeza..
Los meses avanzaban y con ello su salud, pude graduarme y ella estuvo presente, sus ojos brillaban orgullosos aplaudía sin parar; podía haberse detenido el mundo pero realmente nada me importaba más que verla tan orgullosa de mi. Puedo asegurarte que ese día fue el más importante en mi vida.

-¿Qué.. ocurrió luego?- murmuré sintiendo una opresión sobre mi pecho.

-Falleció al día siguiente, a mi lado.

Flashback.

-Estoy tan orgullosa de ti, hijo- sonríe con dulzura acariciando mi mejilla.

Me encontraba recostado sobre su pecho, sintiéndome protegido.

-Jamás te alejes de mi lado, madre- pedí sintiéndome extraño.

Uno de sus brazos se envolvió sobre mi espalda mientras que con su mano libre acariciaba mi cabello.

-Siempre estaré a tu lado, pero debes recordar algo.. jamás estarás solo si te tienes a ti, la vida te podrá situaciones desgarradoras pero tu tienes que demostrar cuan fuerte eres para soportarlas.

-¿Por qué me dices esto?- susurré.

-Porque no seré eterna en la tierra, cariño. Todos tenemos nuestro tiempo aquí.

-Tu siempre serás eterna- gruñí con dolor aferrandome a su cintura.

-Lo seré, pero en tu corazón y debes de prometer algo.

-¿Qué cosa?- alce mi mirada con dolor.

-Cuando.. ya no este aquí quiero que sigas de pie, luchando por alcanzar todo lo que te propongas aunque sea sin mi.

-¿Por qué me dices esto..?- sentí las lagrimas deslizarse por mis mejillas.

-Porque siempre te amaré.

Fin del flashback.

-Matt..- murmure sintiendo mis ojos repletos de lagrimas.

-Creía que no tenía una familia- sonríe con tristeza- Pero.. ¿Sabes que? Si la tenía y era mi madre, aquella mujer que lucho contra su propia familia para cuidar de mi, brindandome su amor..
Ella era todo lo que necesitaba, era mi familia y la perdí. La perdí en el momento que ella se fue entre mis brazos para no volver jamás.

-Ella siempre estará en tu corazón- respondí sintiendo sus brazos a mi alrededor.

Niega con lentitud- Pero no estará jamás a mi lado..

-Lo esta- susurre entre lagrimas- Realmente lo esta.