Aún Estoy Vivo

CAPITULO 13

Daniela

– Mami, gracias por venir siempre por mi a la escuela, siempre tienes otras cosas que hacer pero nunca me dejas esperando. Algunos de mis compañeros si esperan a veces a sus papás por mucho tiempo. Pero tu nunca te olvidas de mi

– Mi princesita, jamás me olvidaría de ti. Eres muy importante para mi y tu hermana también. Cómo crees que te dejaría olvidada en la escuela – me dice y me pincha la pancita lo que me hace reir.

– Y a papi ya no le importo?

Mami baja el ritmo del paso y me ve momentáneamente mientras camina lento, muy lento, creo que no le gustó que hiciera esa pregunta así que mejor agacho la cabeza y se me sale una lagrima.

– Mi bebé, tú eres tan buena e inteligente. ¿Quién no se interesaría en ti? – dice mami pero también le salen lágrimas de sus ojos.

– Perdóname mami, no quería hacerte llorar. Es que… – decidí mejor no decir nada más y me quedo callada.

– Creo que se que piensas… pero no te preocupes mi cielo. Puedes decirme lo que sea que no me molestaré contigo.

– Extraño mucho a papi… – al decir eso no puedo aguantar las ganas de llorar. – Papi no era malo. Todos mis compañeros en mi salón lo sabían.

– ¿Todos lo sabían? ¿Cómo era posible eso? . pero si tienes razón princesa. Tu papi no era… así.

– Todos miraban como me abrazaba y me cargaba cuando venía por mi a la escuela cuando tú no podías. Siempre tenía un chiste o una broma y todos miraban lo feliz que éramos juntos…

– ¿Te han dicho algo tus compañeros sobre eso ahora?

– … Quiero que venga papi por mi de vez en cuando a la escuela, ya no es lo mismo desde que el no esta con nosotras. – se que no puedo cargar a mamá cuando también se siente triste pero la abrazo con todas mis fuerzas y escondo mi cara en su cuello para que las personas que andan por la calle no me vean llorar.

– Lamento que te sientas mal mi amor, te prometo que voy a luchar porque no te sientas tan triste.

– Le pedirás a papi que regrese y viva de nuevo con nosotras tres?-- le digo dejando de llorar automáticamente y con los ojos abiertos y una esperanza relumbrante en ellos.

– Ya llegamos a casa princesita, – me dice como si quisiera consolarme pero ella misma no puede hablar claramente por el nudo que tiene en su garganta. – hablaremos en el almuerzo, Sí?

Mami no se molestó porque le pregunté sobre papi. Antes no me atrevía a hacerlo porque parecía que eso la ponía de mal humor pero ahora es diferente. Es momento de ponernos de acuerdo con mi hermana y juntas convencer a mami de que perdone y acepte a papi de nuevo en la casa. Eso es lo único que pido y ella nos escuchará.

Sin embargo, después del almuerzo, el cielo se pone oscuro y parece que llueve pero solo dentro de la casa porque afuera el sol está brillando bastante fuerte, pero solo para otros. Para nosotras es como una tormenta de las que me dan mucho miedo, con truenos y mucha lluvia. No paramos de llorar con mi hermanita mayor. Soy pequeña pero entiendo lo que mamá nos dice y se lo que significa…

– Entonces, papi no volverá nunca? – es lo último que digo y nadie me responde. Solo lloramos y lloramos y muy desesperada entro en mi cuarto en el que casi no duermo porque prefiero dormir con mi hermana, y le pongo seguro para que nadie me moleste. Quiero estar solita y despertar de este sueño malo y que papi esté a mi lado…

Luna

Ya pasó una hora desde que entré a mi cuarto a llorar desconsoladamente porque no puedo creer lo que mamá nos acaba de decir. Y menos que desde hace tres semanas se divorciaron y hasta ahora no lo comenta… Me siento muy traicionada y abandonada como un perro que sacan a la calle bajo la lluvia durante la noche oscura. No encuentro sentido a nada y no veo que haya un camino para salir de esta tiniebla.

Yo guardo una copia de algunas llaves de la casa, así que voy hacia el cuarto de Dani. Me preocupa que, siendo tan pequeña sufra lo mismo que yo que ya son más grande y que mami. Abro la puerta y la veo detenidamente. Parece muy agotada, como desmayada. El sueño la venció después de tanto llorar igual que nosotras dos o más, tal vez. Así que me acuesto a su lado y la abrazo. Ahora más que nunca tenemos que estar muy unidas.

– Te prometo que siempre estaré a tu lado hermanita.-- le digo al oído y me vence el sueño también.

No nos ha ido nada bien. Espero que papi, donde sea que esté, siga pensando en nosotras y que no lo esté pasando tan mal. Hoy me siento muy cansada y derribada, tengo mucho sueño también. Tal vez será por tanto llorar. Mañana hablaré con tía Hellen. Mañana habl…

Elizabeth

Como pude hacerle esto a mis niñas, tan solo son unas pequeñas indefensas en la vida y son todo lo que tengo en el mundo. Mis padres fallecieron desde que yo era joven y mi única hermana… no sé mucho de ella. Y no me hacía falta tener una familia enorme, me sentía completa siendo solo los cuatro, mi esposo, mis dos princesas y yo. Y ahora…

Me arrepiento mucho de no haberle dado una oportunidad a Herbert. El nunca fue malo conmigo ni con las niñas, al contrario, siempre demostró ser un padre ejemplar y dedicado y un esposo bastante atento y cariñoso. Nuestras diferencias aunque normales como todo matrimonio no eran relevantes, pero esta traición…

Y si me excedí? Tal vez no era para tanto y pude haberlo perdonado. Por Luna, por Dani, Por él, por mí. Me deje llevar por un corazón contaminado y mis pensamientos más opacos. No me dí tiempo para analizar mejor la situación y tomar una decisión con más calma y ahora, no puedo retirar las dolorosas consecuencias para ninguno. Ya no tengo lágrimas porque las expulse todas..

Lo admito. Herbert, te extraño mucho!




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.