Es martes y hoy Trey no tiene entreno, lo cual nos da ventaja en cuestión del tiempo.
A pesar que huyo de ello, Trey tiene pensado que lo mejor será ir a la cafetería. Tenemos que hacerlo, de esa forma, encontraremos a todos los aliados que necesitamos.
Destiny no quiso venir con nosotros. Me entristece un poco que ella no se nos una pero sigue siendo nuestra amiga y no vamos a obligarla.
Trey se coloca a mi lado antes de entrar. — ¿Lista?
Asiento, las personas pasan a mi lado sin tener idea que estamos aquí solo por un plan de venganza. —Lista.
Empujamos las puertas y el sonido de varias voces hablando a la vez nos llega como un trueno. El aroma particular a grasa, carne y cebolla también nos saluda.
Miro alrededor, las mesas son lo suficientemente grandes como para que diez personas se sienten juntas y casi todas están sin asientos vacíos, excepto las del fondo, donde varios están sentados pero dejan un asiento como distancia pues ahí es donde están los que no pertenecen a ningún grupo o solo quieren estar solos.
—Ahí está Jade —susurra Trey, acercándose a mí.
Veo disimuladamente a la chica. Unos asientos al lado está Roy Haru también, pero no están hablándose.
—Vamos —indica.
Nos movemos casi escondiéndonos de la mesa del centro, donde Wynter está rodeada de sus amigos y por supuesto, con Edgar al lado. Ni siquiera nos notan, supongo que no es usual que estemos aquí así que no esperan vernos.
Llegamos hasta la mesa y ambos están ocupados comiendo y viendo su teléfono. Trey me da un codazo suave para que yo hable primero.
Aclaro la garganta. —Um, ¿podemos sentarnos aquí?
Roy levanta la mirada lentamente, frunce el ceño pasando la vista entre Trey y yo. Jade también nos mira y se encoje de hombros, luego sigue con su teléfono.
—Supongo que sí —Trey susurra.
Quedan solo dos sillas que están entre Roy y Jade. Al lado de Roy hay una mochila y después de esa mochila, hay un chico que está durmiendo sobre la mesa y luego una chica que está escuchando música, no parecen interesados en absoluto. Del lado donde está Jade está una mochila y un suéter, como si estuvieran apartando lugar para alguien.
Ambos nos sentamos y nos volteamos a ver, creo que estamos tratando de comunicarnos telepáticamente lo siguiente que hay que hacer.
—Hola Roy —Trey saluda.
Roy vuelve a levantar la mirada y frunce el ceño. — ¿Hola?
Le sonrío apretando los dientes. —Hola… me llamo Lani.
—Lani Lane —agrega Trey—. Es un nombre gracioso, ¿no?
Roy solo hace un movimiento de cabeza y continúa con su teléfono. Lo baja un momento para tomar el sándwich y darle una mordida.
—Um, entonces… — ¿Por qué es tan difícil hablar con las personas? —. Eh, Tu eres Roy y tú eres Jade, ¿verdad?
Jade levanta la mirada. Su piel es morena y me gusta como sus pestañas son tan largas, ella es muy linda honestamente. No puedo creer que la tonta de Wynter habló de su nariz, para mi es solo una nariz.
— ¿Cómo sabes mi nombre? —Jade pregunta, frunciendo el ceño.
Bien, este es el momento donde estoy a punto de hacer algo que puede funcionar o puede dejarme como una tonta. Voy a ser yo misma.
—Porque Trey y yo los hemos investigado, creemos que tienen algo que nos beneficia —digo, con un tono serio.
Roy, Trey y Jade me miran. De nuevo, repito mi frase mentalmente: no tengo nada que perder.
— ¿Nos investigaron? —Jade entorna los ojos.
Sonrió. —Sí y resulta que a ustedes no les han lavado el cerebro, eso quiere decir, que estamos con gente conocedora.
Roy sonríe de lado. —No entiendo.
—Yo tampoco —dice Jade.
—Lo que quiero decir es que personas como ustedes no tratan a los semi populares de allá como si fueran celebridades —afirmo.
Jade sonríe levemente. —Ah, bueno, no lo son realmente.
Trey aclara la garganta. —Creo que lo que ella quiere decir es que, nos gustaría ser sus amigos.
—Si aceptan —agrego.
Roy entorna los ojos. — ¿Por qué quieres ser mi amiga?
Por alguna razón me siento en una entrevista de trabajo y yo jamás he ido a ninguna entrevista de trabajo pero siento que así se sentiría. —Um, bueno, la verdad —hago una pausa y decido que esta vez, la honestidad es lo mejor que puedo usar—. Supongo que ambos me reconocen, ¿no?
Jade le da un vistazo a Roy y luego asienten.
—Ajá, soy la chica del video —fuerzo una sonrisa—. Y bueno, supongo que recordaran aunque sea un poquito de ese año.
Ambos asienten otra vez.
—Pues como verán, soy todo lo opuesto a una celebridad o si lo fuera, sería una de esas que todos odian y tienen que mudarse de su país porque su vida está en riesgo —digo, bajando la vista—. Entonces… yo solo quiero tener amigos, personas que no se intimiden por Edgar, Wynter o ninguno de ellos.
El silencio no existe en esta cafetería pero en esta mesa pareciera que sí. No responden por varios segundos.
—Nunca… nunca me pareció justo —Jade habla—. Todo eso, nunca me pareció justo lo que hacían contigo.
La miro y le sonrío.
Roy se encoje de hombros. —Yo solo pensaba en que no tenían nada mejor que hacer. Sé que las personas pueden ser ignorantes muchas veces.
Lo veo y también le doy una sonrisa.
—Entonces, tú quieres ser nuestra amiga y, ¿Qué hay de él? —se refiere a Trey.
Volteo a verlo y él recuesta los codos sobre la mesa. —Yo también. Por mi parte creo que cualquiera que se burle de alguien es un idiota.
— ¿Ustedes son novios? —pregunta Roy.
— ¡No! —digo.
Al mismo tiempo, Trey responde: —Sí.
Giro para verlo y él levanta las cejas. —Si lo somos, ¿recuerdas, Lani?
Oh, no sabía que ya íbamos a fingir. —Eh, sí, digo, si lo somos. Es que… a veces lo olvido.
Jade inclina su rostro. — ¿Están juntos? ¿Acaso no regresaste hace una semana?
—Atracción instantánea —responde Trey—. Ella y yo, um, sí, ¿recuerdas el primer día?
#154 en Joven Adulto
#3230 en Novela romántica
amigos y amor, escuela drama, venganza dolor y amor inesperado
Editado: 18.03.2025