Capítulo(4)

Exevier.

—Tenemos mucho de qué hablar, Exaviar… —le digo cuando ya estamos en nuestro escondite.

Le suelto el brazo y camino hasta el pequeño sillón que tenemos en la sala. Me siento, la miro esperando una explicación, pero ella no se ha movido. Aún sigue en el mismo sitio.

—¿Me puedes explicar qué es lo que te pasa? —pregunto sin obtener respuesta. Ella sigue igual, quieta en su sitio, y me empiezo a preocupar—. Exa, ¿estás bien?

Después de unos segundos me mira a los ojos, y por un momento veo miedo en ellos… o tal vez solo me equivoco, porque después camina hacia mí y su mirada es fría.

—La princesa Mark quería usarte como su juguete para obtener la atención de sus padres…

Estúpida princesa, no soy un jodido juguete —pienso.

—Y yo le dejé las cosas claras: que te dejara en paz. No tienes nada de qué preocuparte.

—Sabías eso desde que la vimos hace más de tres semanas —no es pregunta— y no me habías dicho nada. ¿Por qué?

—Porque era asunto mío y tenía que arreglarlo yo sola —aclara.

—No, es mi asunto, porque me quería como su juguete a mí, no a ti, Exaviar —le reclamo—. Así que deja de mentirme y dime: ¿por qué no me lo habías dicho?

—¿Quieres la verdad? —me pregunta. Asiento.

—¡PORQUE ELLA PUSO LOS OJOS EN TI CUANDO MATÉ AL GRAN GENERAL, PORQUE ELLA PUSO SUS OJOS EN TI CUANDO SU PADRE TAMBIÉN LO HIZO, Y NO DE BUENA MANERA, PORQUE PUSO SUS OJOS EN TI EN ESE JUICIO, EN MI JUICIO, Y TODO POR MI CULPA! ENTONCES SÍ, EXEVIER, SÍ ES MI JODIDO ASUNTO Y YO LO TENÍA QUE RESOLVER —me grita sin control, apenas logro entenderla.

—Ay, Exa, no es tu culpa. Yo me ofrecí a buscarte y ayudarte. ¿Cómo no lo haría si intentó violarte? —le digo sin más, y se queda tiesa. Aunque lo negó, lo supe. Sabía que me estaba mintiendo.

—¿Cómo es que lo sabes?

—Lo supe cuando te pregunté y lo negaste. Exa, te conozco.

—Bueno, igual está todo resuelto. Me voy a descansar, estoy cansada. Tú también deberías hacer lo mismo —dice más tranquila, al intentar pasar por mi lado e ir a su habitación. Pero la tomo de la mano.

—¿Quién era?

—No sé de quién hablas, hermanito.

—El nuevo general supremo. Tiene el mismo apellido que nosotros, y tú te quedaste helada cuando el rey supremo lo presentó.

—No sé por qué lleva el mismo apellido que nosotros. Y no me quedé helada, solo fue por la impresión. No te equivoques, Exevier.

Mentira, mentira y más mentiras —pienso.

—Digamos que te creo… —me interrumpe.

—Tú, probable. No el mío.

Tendré que averiguarlo por mí mismo —pienso.

—Exaviar, recuerda que el que avisa no es traidor —la suelto, y sigue su camino.

Después de unos minutos también me voy a mi habitación a descansar. Seguro Exa dormirá unos dos días como mínimo. No ha descansado ni dormido bien.

—Que descanses, Exa.

—Tú igual, hermanito.

Y después de unos minutos me quedo dormido.

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Son más de las 7 de la mañana cuando estoy haciendo mi desayuno rico en grasas y calorías —lo necesito para recuperar energía—. Hice odix frito con mi hueso de ave roja y huevo de ridog.

Después de comer, me arreglo para salir. Me miro unos minutos en el espejo, salgo de la habitación y voy a la de mi hermana. La reviso, y como lo predije, está dormida. No creo que se levante hoy. Ayer —como siempre— abusó mucho de sus habilidades.

Salgo de su habitación, voy a la sala y me teletransporto.

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Holiii Sorry Por No Actualizar La Semana Pasada Es Q Tuve Una Perdida Familiar Este Cap Es Un Poco Corto Pero Espero Q Lo Disfruten.