Nunca había salido de "Las Marías", el pueblo en donde me críe y ahora resulta que en menos de una semana me iría a la ciudad, y lo pero es que por dos meses estaría sola, así es, como escucharon, sola, con 19 años, en la ciudad, sin conocer a nadie. Era algo loco, y por eso me asustaba pero también me fascinaba el reto que representaba. Me hubiese encantado que mi madre me acompañara desde el comienzo, pero ella tenía que arreglar un par de cosas sobre su negocio y el lugar en el que se hospedaría en la ciudad, puesto que la beca solo ofrecía un departamento mono-ambiente para una persona, y por mas que le insistiera en que haríamos espacio y entráramos las dos, ella dijo que no podía irse así como así de un día para otro, pues ella era doctora y el pueblo la necesitaba, así que lo comprendí.
Me encontraba empacando cuando sentí que tocaban la puerta de mi habitación
-Pasaa Ma!- grite
-¿Como sabía que era yo?- preguntó mientras se apoyaba en el umbral de la puerta y cruzaba los brazos sobre su pecho
-Facíl, Mery entra sin tocar, cuando llega algún vecino tu me llamas para que los reciba en la sala, no en mi cuarto, y así que a menos que Sili toque la puerta, y si tenemos en cuenta de que es un gato, la única que podría ser eras tú-
Ella niega y comienza a reírse. Yo comienzo a sacar las perchas con los pantalones del ropero
-Woaw!, En que momento mi pequeña se volvió tan lista?
-Quizas..., ¿Cuando deje de ser pequeña?- digo mientras finjo pensar
-Eso nunca pasara!, y dime por que empacas si faltan dos días para que te vayas?-
-Ya me conoces, no puedo evitarlo-
-Si, lo se, eres demasiado ansiosa,al igual que él...- en ese momento me giro para mirarla y noto que su mirada esta dirigida a algo detrás mio, entonces yo la sigo y encuentro el objeto que observa, es una foto en donde estoy yo, con alrededor de 6 años, sentada en una amaca, con mi madre a la derecha, y a la izquierda... mi padre. Por inercia sonrío y instintivamente mi mano viaja hasta mi cuello, en donde reposa el collar.
Mamá carraspea trayéndome a la realidad.
-Bueno venía a decirte que la cena ya esta lista-
-Ya bajo- ella asiente y antes de salir tras ella observo una vez mas la fotografía y apago la luz.
***
-Me estoy asustando!-
-Falta poco, quédate quieta y no te sueltes!-
No veo nada, y si me esta secuestrando?, ella no sera capaz de algo así...o si?. No se pero dicen que mujer prevenida vale por dos, no?
-Ayuda!, Esto es un posible rapto!, estoy aquí en contra mi voluntad!- comienzo a gritar, en eso mi dedo chiquito se golpea contra algo lo suficiente duro para que duela como mil demonios
-Ahh!, Mierda!- En eso siento una risa bajita, como si no quisiera que la escuchara, desgraciada!
-Meryyy!, juro que si esto es un plan tuyo para que no me vaya, te las veras con migo, recuerdas que te dije que sabía artes marciales?, bueno, no mentía!, yo...yo, emmm, tomare tus vestidos, si!, eso haré!, y se los daré a Sili para que te los llene de pelos como tanto odias, y además...además... los romperé a todos!, eso es!, bueno... menos el celeste, ese es muy lindo, pero juro que...- en eso Mery retira le venda de mis ojos
-Sorpresa!- escucho que gritan muchas personas a coro, y luego de unos segundos que le toma a mis ojos adaptarse a la luz, lo comprendo todo, y giro para ver a Mery, ella esta de brazos cruzados
-Con que planeabas romper todos mis vestidos...- dice y pone cara seria,luce enojada.
-Yo...Yo...- comienzo a decir pero ella intenta reprimir una risa y entiendo que estaba jugando, así que me lanzo y la abrazo, así hago con cada uno de los que vinieron a despedirme, y mientras escucho como me deseen suerte intento memorizar la cara de cada uno y sus gestos, así al menos cuando los extrañe tenga algo para recordar, por que se que los voy a extrañar, demasiado. Así que una gran idea se me ocurre, saco la cámara del bolso que siempre llevo con migo, y comenzó a tomar fotografías de cada uno, deseando congelar este momento y que dure al menos un poco más.
***
Él día en que debía partir llego demasiado rápido, y cuando quería acordar me encontraba en la parada de autobús, abrazando a mi seres queridos con la vista nublada por la lágrimas contenidas. Pero mas rápido aún se me hizo el trayecto en bus mientras observaba los hermosos paisajes pasar, así que sin darme cuenta la guarda llego junto a mi y toco mi hombro
-Disculpe, pero la siguiente es su parada-
Yo estaba muy nerviosa,así que solamente asentí, y murmure un "gracias" apenas audible.
Cuando baje suspire, pues si bien el viaje se me había hecho corto eran cinco horas sentada y encerrada, así que agradecí bajarme pues tenía el trasero entumecido, comencé a estirarme, pero cuando fui a respirar ondo para eliminar esa sensación de encierro que me había provocado el bus, comencé a toser, pues el aire aquí estaba raro, no era ni cerca de puro que el de mi pueblo, estaba algo así como "sucio", no se, pero me costo unos minutos dejar de toser y acostumbrarme a él.
Miré la hora en mi celular y descubrí que faltaban cerca de dos horas para la hora en que me habían dicho que el representante de la academia me llevaría a mi apartamento. Así que tras no darle mucha vueltas al asunto decidí dar un pequeño recorrido y tomar algunas fotografías.