Una chica joven esperaba el autobús nocturno en una parada del bus en la zona de Metropolitano, el núcleo más importante de colegios mayores de la capital. El lugar se caracteriza por estar rodeado de parques del campus universitario, que, en conjunción con los edificios de las facultades vacías y la noche, era sin duda un escenario digno de una peli de terror. Mientras la chica esperaba a su autobús, por la zona llegaron un grupo de chicos de aspecto neonazi que comenzaron a molestarla. La situación acabó con ellos "dibujándole" la llamada sonrisa del payaso en la cara para que no pudiera gritar, porque su macabra intención era violarla. La dicha sonrisa no es más que un corte a cada lado de la comisura de los labios que evita que la víctima pueda gritar para evitar desgarrarse aún más.
Editado: 04.05.2023