Soy David, un joven de 14 años, estudiante de secundaria y viví en mi escuela la peor experiencia de mi vida...
A mi escuela llegó un estudiante nuevo, de la misma edad que yo, su nombre era Maicol, era un joven aplicado y muy inteligente, pero era demasiado callado, no le gustaba relacionarse con los demás, al principio pensé que actuaba así porque era nuevo, pero iban pasando los meses y no lo veía interactuar mucho, aparte de él, habían otros compañeros, eran los típicos bravucones que se metían con todo el mundo, ya se pueden imaginar el acoso escolar que ellos hacían.
Maicol sufría mucho de acoso por parte de ellos, orinaban su pupitre, escondían su mochila, le quitaban su dinero, lo golpeaban y hasta le quitaban sus tareas para que ellos pudieran copiarse, se me hacía muy injusto lo que hacían esos infelices, nadie en la escuela hizo algo para ayudarlo, excepto yo.
Una vez lo encontré encerrado en el baño de hombres pidiendo ayuda, fui el único que me atreví abrir la puerta, ya que los demás se hacían los sordos, prácticamente desnudo y sus libros destrozados...
-Hey, ¿estas bien?, En mi mochila traigo ropas deportivas, están algo sucias pero te servirá, le dije yo.
El no respondió nada, sólo aceptó y se fue a su casa, al día siguiente en la escuela me devolvió la ropa deportiva limpia y sólo me dijo gracias. Yo me sentí un poco mal por él, así que decidí buscar su lado y volverme su amigo, al principio él estaba a la defensiva pero vio que mis intenciones eran buenas y poco a poco me fui ganando su confianza, lo invitaba a jugar a mi casa xbox, salíamos a jugar fútbol, y compartíamos historietas, poco a poco Maicol fue cambiando y se abrió más a mi, él me contó de sus problemas familiares, sus padres eran separados, su madre no tenía tiempo para él por su trabajo y pasaba la mayor parte del tiempo sólo en casa, y yo decidí hacerle compañía muy seguido para que no se sintiera tan sólo.
Pero los problemas en la escuela seguían y cada vez peor, en muchas ocasiones peleé por defenderlo, acusé a los bravucones con los profesores y el director, pero no hicieron mayor cosa, no era mucho lo que yo podía hacer para ayudarlo y eso me frustraba, un fin de semana Maicol llegó a casa.
Maicol- ¿Puedo pasar este fin de semana aquí?. Mi mamá llegó nuevamente borracha y tuvimos una fuerte discusión, traje el xbox, una pizza tamaño familiar con una coca-cola y unas cuantas cervezas
Yo- Claro, pasa
Pasamos un fin de semana genial, tomamos cervezas a escondidas de mis padres, comimos pizza y jugamos mucho, lo vi animado y eso me alegró, luego de eso me dijo algo extraño
Maicol- Te dejaré mi xbox y otras cosas que te daré el lunes como recuerdo
Yo- ¿Te vas a mudar o que?
Maicol- Si me iré, por eso vine a pasar este último fin de semana con mi amigo
El lunes que fui a clases Maicol se sienta a mi lado y me entregó sus cómics favoritos y los juegos del xbox que me había regalado el fin de semana
Yo- Hey viejo, ni que te fueras para siempre, estaremos en contacto quizás un cambio de ambiente te hará sentir mejor, además te liberas de estos bravucones, le dije yo
Maicol- Sólo recibelo y ya, no te quejes. David mañana no vengas a la escuela, quiero que me hagas un favor, es muy urgente
Yo- ¿Que favor?
Maicol- Quiero que me lleves esta solicitud, entraré a esa escuela, tengo plazo hasta mañana pero yo tengo un examen de recuperación de química la materia que perdí y no puedo faltar
Yo acepté el favor, Maicol me llamó temprano para confirmar y quedamos en que nos encontrariamos en la escuela al día siguiente pero mi madre se ofreció en hacerme el favor para que yo no perdiera el día de clase y me fui a la escuela, no vi a Maicol en clases, pensé que se encontraba en otro salón haciendo el examen de recuperación y pasó la tragedia.
Se escucharon muchos disparos y gritos, todos quedamos confundidos vimos a nuestro profesor de física caer con 2 disparos, uno en la cabeza y otro en el brazo, entramos en pánico y comenzamos todos a gritar, habían estudiantes y profesores muertos, algunos heridos, yo me fui a una esquina del salón y vi entrar a Maicol armado disparando a todos los de nuestra clase, fue horrible ver a mis compañeros en charcos de sangre, otros pedían compasión pero Maicol seguia disparando indiscriminadamente, Maicol me vió en la esquina temblando, su expresión cambió
Maicol- ¡Se supone que no deberias estar aquí! Me dijo apuntandome con su arma
Yo- Maicol tranquilo, somos amigos, baja el arma, ¿no vas a matar a tu amigo o si?
Maicol- ¿Que pasó, porque estas aquí?
Yo- Mi mamá me hizo el favor que me pediste porque no queria que yo perdiera el día de clases, por eso vine, vamos viejo baja el arma
Maicol- A ti no David, a ti no te mataré, fuiste mi único apoyo, lo siento tanto, no tenía alternativa, estos bravucones, mis padres, las personas que ignoraron como me maltrataban y humillaban, sólo se burlaron de mi, ellos arruinaron mi vida, sólo tu fuiste mi amigo