En la base subterránea, Kalin y Vypra conversan sobre los sucesos anteriores.
- ¡Kalin! - dice Vypra - Draug y Specter son traidores. Debemos hacer algo.
- Tienes razón - dice Kalin - ¿dónde está Specter?
- Está en la cámara de recuperación - responde Vypra.
- Perfecto - menciona Kalin - deja que se recupere de sus heridas, luego le harás un recordatorio de la persona que es y juntos irán a buscar a Draug.
- ¡Qué genial idea! - dice Vypra - será destruido por su propio aliado.
- No seas idiota - indica Kalin - El maestro y yo nos negamos a dejar que Draug se aleje con facilidad de nosotros. Obedece mis órdenes, ¿te ha quedado claro?
- ...como el agua - responde Vypra de mala gana.
Kalin desaparece y Vypra cumple las órdenes dictadas. En medio del desierto, en una aldea lejana, Draug despierta de su sueño y nota que se encuentra reposando en una cama dentro de una pequeña casa. Toca su rostro, y siente que no tiene la máscara. Se levanta y se sienta en el borde de la cama, luego nota que alguien toca la puerta.
- Pase - dice Draug.
Abren la puerta. Es una señora de avanzada edad que lleva algunas prendas de ropa en sus manos.
- Me alegra que hayas despertado - dice la señora - te encontré desmayada y te traje acá. Ten estas prendas de ropa, quítate ese traje y báñate.
- ¿Dónde está mi espada? - pregunta Draug - ¿y la máscara?
- Tu espada está encima del mostrador - responde la señora - en cuánto a tu máscara, estaba completamente destruida, así que no pudimos hacer nada. Igual no entiendo por qué ocultas ese rostro tan bello detrás de una máscara. Toma un baño, vístete y baja para que almuerces con nosotros, también arreglaré tu cabello, que necesita algo de cariño.
La señora se va, permitiendo a Draug bañarse y vestirse. Luego de unos minutos, ella baja y se encuentra con la señora. Juntas comienzan a almorzar y en ese momento la señora le pregunta algunas cosas a Draug.
- ¿Cuál es tu nombre jovencita? - pregunta la señora.
- No tengo nombre... - responde Draug - ...me llaman Draug.
- Qué curioso nombre - la señora ríe - mi nombre es Margaret.
- Señora Margaret - dice Draug.
- ¡Oh! Me haces ver más vieja de lo que estoy - dice Margaret - por favor, dime Maggie. Y yo te diré Danielle, era el nombre de mi hija.
- ¿Qué le sucedió a su hija? - pregunta Draug.
- Fue hace mucho tiempo - responde Maggie - ella murió cuando apenas tenía tres años de edad. Pero no quiero hablar de eso. Terminemos de comer para arreglarte, que lo necesitas.
Terminan de comer y van a la habitación de Maggie donde ella arregla a Draug, peinando su cabello, echarle algo de maquillaje, y arreglando un poco sus uñas, que, en palabras de Maggie, son garras muy afiladas.
- ¡Ahora si te ves como una señorita de la alta sociedad! - dice Maggie mediante risas - Ahora ayúdame a comprar unas cosas.
- Como guste - dice Draug - Gram, ¡levántate!
En la base subterránea, el maestro presiente la energía de Draug y le da una pista a Vypra que rápidamente se dirige hacia allá.
Gram se levanta del mostrador y rápidamente llega a la mano de Draug. Maggie queda sorprendida.
- Nunca he visto una espada como esa - dice Maggie - pero deberás ocultarla si quieres sacarla.
- No se preocupe - indica Draug - Gram, mimetismo.
Gram se convierte en un anillo que Draug se coloca en su dedo cordial. Después ambas salen de la casa y van al mercado a comprar algunas cosas. Hacen un mercado completo, incluyendo algunos obsequios de Maggie a Draug.
- Estas cosas son para ti - dice Maggie.
- No podría aceptarlas - indica Draug.
- No te preocupes, Danielle - responde Maggie - y si no las aceptas me sentiré mal.
- De acuerdo - dice Draug - gracias.
Luego de las compras se dirigen a la casa. Desafortunadamente para ellas, dentro de la casa les está esperando Vypra y un Specter renovado.
- ¡Señora! - dice Vypra - debe tener más precaución, la seguridad de su casa es un poco débil. Menos mal que estaba cerca. Y gracias por cuidar a la niña, estábamos preocupados por ella.
- Danielle, ¿quiénes son éstas personas? - pregunta Maggie.
- ¡Oh, Danielle! - dice Vypra - qué hermoso nombre, ¿te parece si hablamos afuera?
- Descuide Maggie - responde Draug - será rápido.
Vypra, Specter y Draug salen de la casa y comienzan a hablar.
- ¿Qué te pasó, Specter? - pregunta Draug.
- Lo mismo que te sucederá a ti - dice Specter.
- ¡Vypra! - responde Draug - tendré el placer de destruirte, ¡Gram!
Antes que pueda decir el resto, Vypra la detiene.
- Cuánta violencia, Danielle - dice Vypra - sabía que intentarías traicionarnos, así que mientras no estabas coloqué una bomba en la casa de tu querida Maggie. Podrás matarme, sí, pero una vez que deje de tener signos vitales, esa anciana decrépita volará en mil pedazos. Te recomiendo que vengas con nosotros y nadie saldrá lastimado.