Azar

Capítulo 8

Asher

Miro a Aura con su amiga y con el novio de esta, se ve feliz y relajada aunque evita en todo momento el contacto visual con las modelos, solo ha hablado con uno de los fotógrafos y ha decidido ignorar al resto como si no existiesen.

Killian y mi hermana llegaron hace rato, se quedaron un buen rato observando el cuello de Aura, incluso yo lo hice porque dos de las cámaras no estaban en la foto de su Instagram. Luego la saludaron como personas normales que son.

No sé en que momento Aura acabó a caballito en la espalda de Kristal, pero parece disfrutar con su amiga, parece estar pasándolo muy bien. Jacob las graba con su teléfono, divertido por lo que hacen ambas chicas. Aura es hermosa cuando se relaja y se divierte, no la he visto tan relajada como ahora mismo estando con Kristal.

– Hola.- saluda Kristal cuando llega a mi lado.

– Hola Kristal, hola Aura.- ella saluda con la mano antes de darle un beso a su amiga.

– ¡Qué pegajosa estás hoy!

– Luego no te quejes cuando no lo soy.- le tira de la oreja para fastidiarla.

Miro la felicidad de Aura, no puedo dejar de verla. Lo he intentando, he intentado distraerme con el trabajo, preguntando a los fotógrafos por la sesión y hablando con las modelos por si se sentían o no cómodas, su comodidad es mi prioridad.

Todo pasa muy rápido, dos chicas pasan por nuestra lado y golpean con fuerza el hombro de Kristal. Ella intenta mantenerse en pie, pero no solo está soportando su peso sino también el de Aura por lo que acaba por perder el equilibrio. El grito de Aura llama la atención de los más concentrados y aunque mi reacción es rápida, no puedo evitar que golpee el suelo.

Kristal se levanta rápida del suelo, mientras que Aura permanece tendida sobre la arena con una mueca de dolor en su cara. Gruesas lágrimas bajan de sus ojos, que permanecen fuertemente cerrados. Ella no tiene sensibilidad en sus piernas pero si en el resto de su cuerpo y el golpe, aunque ha sido con la arena, ha sido fuerte.

– Aura, ¿estás bien?

Hijaputa.- dice en un idioma que desconozco.- Zungas de mierda.

– Si puedes insultar es que te duele pero es soportable.- intenta bromear Kristal.- Pero se te desconfiguró el idioma amiga, hablaste español.

Aura abre los ojos, completamente cristalizados y con más lágrimas saliendo de sus hermosos ojos oscuros. Hace una mueca de disgusto antes de apoyar las manos sobre la arena e incorporarse hasta quedar sentada sobre la arena.

– Imbéciles de mierda.- dice en un idioma que si entendemos.

– Fue un accidente.- ella rueda los ojos.

– Si tú lo dices, será.- responde fastidiada.- Por qué no hacemos una cosa ¿Ustedes fingen que yo no existo y yo hago exactamente lo mismo?

– No podemos hacer eso.- la mira con desprecio.- Casi le rompes la nariz a Renatta, así que tú lo vas a pasar mal en este viaje.

– Renatta es la que me condenó a la silla de ruedas, romperle la nariz es lo que menos se merecía.

– Haya paz.- dice uno de mis fotógrafos.- Si vas a crear mal royo, te pido que no vuelvas.

– No te preocupes, mañana no estaré aquí.

– ¿Qué?- se sorprende Kristal.

– Prefiero volver a casa que tener que soportar a dos mujeres como ellas.- las mira con desprecio.- No quiero pelear, soy mejor que eso.- chasquea su lengua.- Ellas podrán andar pero yo sigo teniendo más talento y no soy una cabeza hueca.- sonríe victoriosa.

Jacob se acerca para levantarla de suelo pero soy más rápido y yo me encargo de Aura. Ella me mira molesta y con las mejillas empapadas, y los ojos rojos e hinchados, pero no se queja ni me pide que deje a Jacob tomarla. Sé que debo de tener muchas miradas sobre mí pero eso ahora no me importa, sacarla a ella de la playa me corre más prisa, que esté cómoda es prioritario.

La dejo sentada sobre un muro del paseo, ella sigue molesta, con las mejillas completamente rojas por lo mismo. Evita mi mirada a toda costa mientras que yo busco sus ojos, quiero estar seguro de que se encuentra bien y de que no le duele mucho la espalda.

Malparidas las dos.- ella vuelve a hablar en español.

– ¿Tus padres solo te enseñaron malas palabras en español?- me giro al escuchar la voz de Kristal.

– Para mi desgracia no, me enseñaron a hablar perfectamente en español.- rueda los ojos.

– ¿Cómo está tu espalda?

– Me duele.- se queja con una mueca.- ¿Llevas mis pastillas o se han quedado en el hotel?

– Tengo tus pastillas.- dice antes de pasarle una.- No pelees así Aura, ellas no lo merecen, son solo unas chicas inmaduras.- Aura resopla pero no la contradice.

– Yo no quería pelear, las he estado ignorando desde que llegué.- dice cansada.

– ¿Te irás de verdad?- ella niega.

– No, solo no te acompañaré, disfrutaré de la ciudad los dos días que me quedan.

– Tengo que volver a la sesión, y tú también deberías.- me señala.- Pero...¿puedes esperar aquí con ella hasta que venga el chófer?

– Claro.

Ella le da la cámara a Aura y me deja su silla de ruedas. Aura decide ignorarme hasta que llega el conductor de su coche. Solo se despide de mí y me da las gracias por acompañarla. Desde que llegué me ha evitado y quiero saber porqué, no es que yo haya hecho algo para molestarla. A lo mejor no quiere relacionarse conmigo porque mi hermano pequeño me odia. Tengo que hablar con Andrew y solucionar el malentendido de hace unos años, no lo hice antes porque no sabía donde estaba pero ahora que si lo sé, no tengo ninguna escusa para no disculparme y esclarecer lo que ocurrió.

Le mando un mensaje a mi secretaria para que busque el número de mi hermano, estoy seguro de que Benjamin lo tiene. Debe de tenerlo para avisar de lo que ocurre con Aura,y para que le avisen si algo pasa con su hija cuando él no está con ella.

 




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