Cuando llegue al hospital juro que corrí por todos lados hasta llegar a la habitación de Liam, abrir la puerta y correr hacia el y abrazarlo con cuidado.
-No vueltas a hacerme esto William Benjamin Fisher Miller.-Susurre en su odio y el me abrazo por la cintura-No sabes lo preocupada que estaba, casi me da un paro cardíaco cuando me avisaron que habías tenido un accidente.-Me separe de su cuello y lo mire a los ojos-¿Como estas?¿Te sientes bien?Ay Liam, te juro que si algo mas te hubiera pasado, no sabría que hacer conmigo, te extrañe, no me vuelvas a hacer algo así porque si no...
-Mila relájate, respira.-Había dicho todo eso de manera rápida y el aire comenzaba a faltarme.-Te escuche...
-¿Que?¿Que escuchaste?
-Lo de la denuncia...-Mire detrás de mi y vi a su familia, creo que siempre estuvo ahí pero no me di cuenta.-¿Lo harás?
-Si, ¿Podemos hablar de eso en otro momento?.-Le echo una mirada despistada a su familia y el asiente.-Te quiero Liam.
-Y yo te quiero mas Mila.-Le di un corto beso en los labios y el agarro mi vientre un poco abultado.-Los quiero.
Mis ojos no evitaron llenarse de lagrimas y lo abrace mas fuerte tratando de no hacerle daño.
-No sabes lo feliz que me haces Mila.
-Tu también me haces muy feliz Liam.
Le di otro beso en los labios y me separe de el para poder saludar a su familia como se debe.
-Lamento todo ese espectáculo.-Le dije a la madre de Liam, Melissa.
-No te preocupes cariño, se ve que mi hijo es feliz contigo.-Me dio un abrazo y me susurro en el oído-¿Estas embarazada?
Si, pero no de su hijo...
-Si.
-En ese caso felicidades.-Se separo un poco y me dio una grande sonrisa.
-Quisiera pedirle que no le diga todavía a nadie...
-Esta bien Camila, ustedes lo dirán cuando crean necesario.