El telón se levantó con una lentitud ceremoniosa, revelando a Anna y Luca en el centro del escenario. La música comenzó a envolver el teatro con una melodía suave y melancólica. Luca tomó a Anna de la cintura con precisión, y juntos dieron los primeros pasos, mostrando la técnica impecable que ambos habían practicado durante semanas.
A medida que la música aumentaba en intensidad, Luca dio un paso hacia adelante, marcando el siguiente movimiento: una serie de giros rápidos. Anna siguió su liderazgo, sus pies deslizándose por el suelo con gracia, pero la sensación era diferente. Sus movimientos eran controlados, casi automáticos. Luca la sostuvo por la cintura mientras realizaba un giro alto.
Con cada paso que daban, Anna intentaba recuperar esa chispa que solía sentir cada vez que bailaba. Luca era un compañero confiable, sin errores, pero la danza con él se sentía más mecánica que emocional. Los giros, los saltos, los levantamientos, todos eran perfectos, pero si no estaba la conexión especial con su pareja, el baile jamás sería como lo era con Kael que magicamente hacia que fuera inolvidable.
Luca la hizo girar nuevamente, pero esta vez Anna sintió el desequilibrio interno. El miedo la invadía, al sentir que había perdido algo esencial al separarse de Kael. Mientras giraba, sus ojos buscaron el borde del escenario donde sabía que él la estaría observando. Ese pequeño instante de duda fue suficiente para hacerla tambalearse, pero logró corregirse antes de caer.
Luca la sujetó con firmeza, y ambos continuaron con la coreografía, pero el momento ya estaba marcado por el vacío emocional que Anna no podía ignorar. El público veía a dos bailarines que dominaban su técnica, pero solo Anna sentía la falta de pasión en cada paso.
Al llegar al final de la coreografía, Luca la hizo girar una vez más, preparándose para el gran cierre.
Anna había decidido improvisar un giro arriesgado, se lo había propuesto a Luca. Era difícil, lo sabía, pero quería destacarse a pesar de todo. Necesitaba sentir esa adrenalina que siempre había estado cuando bailaba con Kael, aunque solo fuera por un segundo