ALEXANDER:
No puedo evitar que las lágrimas se acumulen en mis ojos mientras escucho a mi mejor amigo detrás de esa puerta:
- Nicole, te amo, siempre te he amado y no puedo soportar que estés con él -su voz sonaba desesperada y herida-
- Detén esto. Si no he hablado con Alex, es para no herirlo - ¿A qué se refiere? ¿Niki conoce a mi mejor amigo? –
- Enana, debes dejar de ocultar el amor tan fuerte que nos tenemos. Alexander merece alguien que lo ame, no alguien que solo ha tenido ojos para mi todo este tiempo –
- ¿Qué carajos? -pensé mientras sostenía con fuerza la perilla de la puerta, resistiendo el impulso de entrar para escuchar la respuesta de Niki-
- Grandote… -aquel apodo me dejó aturdido. La voz de Niki se quebró, y eso era una pésima señal- Un amor como el nuestro nunca podrá ser reemplazado por otro -no podía creer que esas palabras salieran de la boca del amor de mi vida- Pero entiende, estoy con Alex.
No quería seguir escuchando. Era evidente que algo paso entre ellos y yo no estaba enterado. Además, Niki no había negado que lo amara. Sin pensarlo, más abrí lentamente la puerta y quedé frente a ellos. Pude ver cómo Niki se puso pálida, mientras mi supuesto mejor amigo tenía una expresión intrigante. No pude evitar pensar esta había sido su intención desde el momento en que me pidió que fuera a la sala de música.
Los miré por un momento, esperando una explicación de parte de Niki, pero ella seguía tan pálida como cuando me vio. Sin decir nada, me di vuelta y empecé a caminar hacía la salida.
- Alex, por favor espera -gritó Niki en un intento desesperado de detenerme-
Me detuve en seco y giré bruscamente
- ¿Lo amas? -pregunté con tono frío y duro-
Nicole se puso todavía peor. Por fin se dio cuenta que había escuchado todo.
- Yo…yo… -empezó a tartamudear, algo que solo hacía cuando estaba bajo demasiada presión-
- Creo que todo está claro -le dije, y ella levantó la cara, mirándome con lágrimas en los ojos. Aquello me partió el corazón. Siempre pensé que Nicole Cortez era el amor de mi vida y la persona con la que pasaría el resto de mi existencia, pero escuchar que había estado con uno de mis mejores amigos y que lo ama fue un golpe más fuerte de lo que había imaginado. Las señales siempre estuvieron ahí: cuando los presenté, cuando Nicole vio a la pareja de mi mejor amigo, cuando me contó sobre aquel primer amor que había roto su corazón. Todo- Espero que seas feliz con tu primer amor.
Fue lo último que dije. Una parte de mí albergaba la estúpida esperanza de que Nicole me detuviera y dijera que me amaba solo a mí, que él era parte de un pasado que nunca me contó, aunque aquello también dolía. Sin embargo, Nicole solo me dejó ir.
Aquel día me rompieron el corazón por primera vez, y fue la mujer que más amo en el mundo.
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Editado: 26.12.2024