Bajo La Luz Del Sol

¿Y SI TE PIERDES?

Desconcertado, Jan intenta coger a Samantha, diciéndole:

— ¿A dónde te diriges? Sigamos hablando Samantha...

En ese instante, Jan ve el policía y se detiene. Cuando Samantha llega a donde está el oficial, y le dice:

— Señor, ayúdeme a encontrar a mi hijo.

— ¿Qué le paso a su hijo?

— Desapareció hace unos días.

— Ah, estamos llenos de casos de desapariciones de personas, ¿cómo estaba vestido su hijo?

— Es un bebe de dos meses, él tenía su ropita blanca con rayitas azules.

— ¿Ya usted ha reportado este caso?

— Si, sí, pero todavía no han dicho nada.

— Es porque debe de esperar, tenemos mucho trabajo...

Jan ve a Samantha que se enoja con el policía y le alega bastante, y luego ve alrededor la angustia de la gente, y dice:

— La falta de Dios en sus vidas, es lo que los tiene así...

Samantha al no tener respuestas de su hijo, sacude al oficial cogiéndolo de su camisa. Cuando este le dice:

— ¡Cálmese señora!

— Todos ustedes tienen la culpa, ustedes son unos incompetentes.

— ¡Cálmese señora! Nosotros estamos trabajando.

Samantha suelta al policía y se va muy brava a donde está sentado Jan...

Samantha se sienta junto a Jan y se pone a llorar. Cuando este le expresa:

— Tu dolor y tu angustia es entendible, hace unos días tuve una imagen de mi familia, en la cual; ellos se veían bien y felices, y yo estoy seguro que tu hijo de dos meses también está bien.

— ¿Tú crees?

— Claro que lo creo, tu hijo está bien.

— Es que lo quiero conmigo, quiero abrazarlo, quiero darle de comer, quiero verlo crecer.

— No te preocupes más por él, él está bien, quiero que entiendas esto...

Samantha mira a Jan. Cuando este le repite:

— ¡Él está bien! Tu hijo está en un lugar mejor que este, tu hijo es un angelito... ¿ahora piensa en que vas hacer tu? Este mundo lo gobierna el enemigo.

— ¿Quién es el enemigo?

— Satanás. El que anda como un león rugiente buscando a quien devorar... sube el ánimo Samantha, todavía hay esperanza para obtener vida eterna.

Samantha agacha su cabeza, y le expresa a Jan:

— Pues, con la perdida de mi hijo y de mi tía, mis ánimos están por los suelos, solo quiero morirme, así que no me importa ese tal Satanás o león rugiente que estás diciendo.

— Error, error, error, gran error, eso es lo que quiere el Diablo, verte vencida, que no busques de Dios, que nadie busque de Dios... él quiere que estes, así como estas para acabarte fácilmente y llevarte al infierno, ahora puedes decir esas cosas, pero créeme que es mejor evadir el infierno, porque si piensas que ahora estas sufriendo por la desaparición de tu hijo, entonces; como será si caes al infierno. Donde es un lugar de tormento eterno, un lugar no deseado por nadie, un lugar hostil, un lugar donde los demonios te van a torturar por los pecados que hiciste. Y te van a torturar por siempre, ellos te rasgaran y arrancara la carne de tu cuerpo mientras te quemas en un fuego que nunca se apaga. Veras cosas inimaginables, cosas horrendas y aterradoras, gusanos recorrerán todo tu cuerpo y te atormentarán. Y gritaras por ayuda, pero nadie vendrá a ayudarte, olerás un podrido como nunca lo has olido, un olor que mataría a cualquiera, pero no morirás, porque sufrirás eternamente. Entonces, allí te acordaras que un día te hablaron de Jesucristo y de su salvación para la vida eterna, pero le diste la espalda, le cerraste la puerta a cuantas personas te hablaban de Cristo. Y una y otra vez te buscan y no atendías. En las calles cuando te encontrabas a la persona que te iba hablar. Te ibas por otra calle. Y solo por no escuchar la palabra. La palabra que te iba a salvar de no0 caer al Seol. La palabra que te iba a dar vida eterna. La palabra que iba acabar con las guerras, el sufrimiento, la angustia, el dolor, las enfermedades, toda la maldad que ves ahora, todo eso desaparecerá de la faz de la tierra.

Samantha no le cree a Jan. Y cuando pasa un joven por su lado, le expresa a Jan:

— Solo me quieres meter miedo con eso del infierno.

— Te dije un testimonio de una hermana de la Iglesia, y no te estoy metiendo miedo, el infierno es real.

— ¿Real cómo? ¿Es un sitio?

— Si, es un lugar, y si las personas no se arrepienten de sus pecados de corazón, y siguen cometiendo toda clase de pecados y maldades, entonces caerán en ese lugar. Y de ese lugar no saldrán. Jesús es el camino la verdad y la vida, con él está la salvación.

— No te quiero escuchar más, llévame a la casa de mi tía.

— Bueno, bueno, no te alteres.

Samantha se levanta de la silla, y le dice a Jan:

— ¿Me vas a llevar o me voy sola?

— Yo te llevo, no te preocupes.

Jan ve a dos policías muy cerca y se vuelve a sentar. Cuando Samantha dice:

— ¿Qué te pasa? Apenas viste a esos policías te volviste a sentar como si te estuvieras escondiendo de ellos.

— Es un mal entendido que paso, esperemos que pasen para ir a la camioneta.

— Bueno...

Los policías pasan cerca de Jan y de Samantha, y solo un oficial los mira, y pasan de largo. Cuando Jan se levanta, y le expresa a Samantha:

— ¡Vamos!

En ese momento, Jan y Samantha llegan a la camioneta, y se suben. Cuando Jan dice:

— Espero que cuando estes en casa, reflexiones y pienses en todo lo que te dije.

— Te dije que no quiero hablar más de eso.

— Bueno, bueno, vámonos de aquí...

De inmediato, Jan enciende su vehículo y se va de ese lugar...

Condominio Riverside, Idalia está haciendo ejercicio en una caminadora de última generación. Cuando una de sus empleadas entra en la sala de ejercicio, y le dice:

— Señora, tiene una llamada.

Idalia detiene la caminadora, y coge el teléfono, y le expresa a la empleada:

— Vete ya a la cocina.



#7158 en Otros

En el texto hay: espiritual, salvacion, concejos y otros

Editado: 09.02.2024

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