Bajo la noche sin estrellas

Bajo la noche sin estrellas

Bajo la noche sin estrellas

-Urili Éter-

En algún lugar de México, 2019.

Ayer conocí a Thania, una chica hermosa y sencilla. Le he pedido que salgamos un día para volver a vernos, aunque no estoy completamente seguro de si pueda llegar lejos con ella, yo espero que sí.

Se lo dije, y entonces fue así. Ella contesto con tranquilidad y sin ningún tipo de inconveniente. Tuve la oportunidad de conocerla mejor, conocer sus sueños y sus aspiraciones. Me encantaba escucharla porque lo hacía con pasión, y eso me hacía sonrojar de sobremanera. Me miraba con tranquilidad y no se ponía nerviosa, parecía que miraba un humano por primera vez teniendo yo 15 años vivo en este planeta.

Fue la salida más hermosa que tuve, porque no estoy acostumbrado a salir de mi casa acompañado, mucho menos hablar tanto tiempo con alguien que, igualmente, habla y no se distrae viendo su celular.

Esa tarde hablé mucho, como si gritará todas las palabras que me guardé y las que quemé con el tiempo.

Primera cita, en alguna pizzería.

Y fue cuándo abrí la boca:

—Suelo escribir poesía, francamente diría que es mi afición. —Quite mi vista de mis dedos entrelazados—.

—¿Enserio? ¡Eso es muy bonito Josmar! Qué sorpresa, muy pocas personas hacen ese tipo de cosas. —Recargo su mejilla con su brazo, inclinando la cabeza—.

—Si... Intento hacer algo de ejercicio mental por todos los años que perdí haciendo otra cosa. —No aguante sus ojos brillantes viéndome y me puse a ver un vaso—.

—No te preocupes, yo al igual que tú también me echo en la cama y no hago nada.

—¿Tú? —Y volví a verla—.

—¡Enserio! Ni siquiera deberías preocuparte, es algo normal. Lo importante es que haces algo.

—A mí no me parece normal, conozco personas que desde niños se ponen a ver un libro o de tocar instrumento y son brillantes. —Thania me interrumpió abruptamente—.

—Josmar...

—¿Qué paso? —Sentí el pecho aplastado pensando lo peor—.

—Tú... Eres tú, ¿sí? No hables de otras personas conmigo, vine para platicar contigo, ¿okey?

No puedo describir lo que sentí en ese momento, suena muy cursi decir que solamente me enamoré. Más bien es algo que me emociona; algo que me hace sentir seguro de mí mismo; algo, algo como... El amor.

Seguimos hablando de nosotros mismos, mientras que cada segundo que pasaba, de mi mente no escapaba cuándo sentí que le importaba a alguien. También intente no olvidar lo triste que sería que me estuviera manipulando, opte por hacer lo que siempre suelo hacer: fallar.

Cómo temblé ese día, maldita sea. Me prometí a mí mismo ser lo mejor de mí; cuantos escenarios mentales qué me hice antes de llegar a la pizzería, en las que yo era un total galán y me hacía el interesante. Pero algo dentro de mí me dijo en medio de la plática con Thania: "no, no, perdóname, esto no va a funcionar".

Yo sentí que era completamente cierto ese consejo, cómo cuándo estás en clases y no entiendes nada, y después cuando lo explican, lo vez fácil. Así, justo así, fue lo que pensé en el momento que los ojos de Thania brillaron.

Luego de una plática más amena sobre que ella quería estudiar medicina (tiene 16 años, le falta poco para la universidad) un auto se paró en seco a un lado de nosotros, y entonces ella me dijo que tenía que irse con apuro.

Cómo si fuera yo un relámpago, clavé mi mirada en el auto y me percaté que estaba un joven más grande que nosotros en él. Ella subió y su sonrisa, sus ojos, se fueron a él. Eso me destruyó; justo en el momento donde más sentía que era importante para alguien, apareció otra persona que robó la atención.

No es por ser egoísta, pero deseaba mucho esa atención, pero tanto. Dolió... Solo un poco.

Me había dejado su número antes de irse, lo que me hizo pensar qué, tal vez, era una oportunidad de volver a vernos. Y mi mente como lo hace siempre, me empezó a decir que era algún tipo de táctica maniaca en el cual yo me obsesioné con ella mientras ella se va de parranda. ¿Qué hice? Ponerme a ver mi celular por horas.

Durante la noche de aquel día, recibí un mensaje de ella. Y yo resentido me hice el importante, respondiendo hasta mañana.

Dia siguiente, en mi casa.

Luego, el día siguiente revisé su mensaje en cuanto pude y en él decía algo cómo: "Perdóname por irme tan de esa forma, tenía que ir con mi amigo a una fiesta con otros amigos, se los prometí."

Entonces reflexioné tranquilamente...

— ¿¡Cuál amigo!?

Intente mantener la compostura, pero eso no evitó ofenderme y sentir ese dolor de abandono. Entonces le empecé a decir cosas cómo: "¿si tenías planes, porque aceptaste ir conmigo? " "¿Porque no me dijiste algo sobre eso?".

Me arrepentí al instante cuando me dijo que entendía perfectamente por lo que pasaba. Ella tenía muy en cuenta el dolor que me causo, y lo inmaduro que fue hacer eso, así que, ¡Ella me invitó a salir a platicar por la ciudad! Tratando de enmendar el error.

¿Ves cómo cambian mis emociones? Literalmente alguien que me gusta me pide volver a estar con ella de nuevo, a mi... ¡¡A mí!! Claramente acepté y solo esperaba el día en el que ella me dijera que esta lista para salir juntos. Casi me muero de emoción ese día.

Los mejores meses, la felicidad.

Las semanas pasaban. Empecé a tomar confianza con ella y me sentía yo mismo cada que estábamos juntos. Conocí a sus padres que me trataron bien, ella conoció a los míos y cada vez salía menos con sus amigos y más conmigo. Una chispa de amor nacía en estos días, y fue poco lo que duró nuestra amistad ya que ella me confesó que siempre que me veía se sentía bien y se divertía, lo que hizo que me empezará a ver con otros ojos.

Y si, empezamos a ser novios luego de que me atreví a recargarme en su hombro un día que estaba en su casa trabajando en hacer una figura de plastilina de su serie favorita. No me entendí ni a mí mismo, no sé por qué tuve la valentía de hacerlo. Lo bueno fue que ella no se quejó, al contrario, igualmente recargo su cabeza en la mía mientras estábamos callados con la cara roja. Así empezó nuestros pedacitos de amor.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.