A pesar de la conexión que sintieron desde el principio, había algo en el aire entre ellos que no podían entender. Al principio, las conversaciones fluían sin esfuerzo, pero poco a poco, surgieron pequeños obstáculos que empezaron a desestabilizar su relación.
Él, cuyo nombre era Andrés, era un hombre reservado, con un pasado que se le escapaba de las palabras. Había algo en su historia que no contaba, algo que lo mantenía distante, incluso cuando estaban juntos.
Mariana, por otro lado, no podía evitar preguntar, indagar. Su curiosidad la llevaba a querer saber más, a descubrir cada rincón de la vida de Andrés, pero él parecía mantener todo a una distancia segura.
Al principio, todo parecía simple, pero pronto surgieron dudas. ¿Realmente quería conocerla o solo buscaba una distracción momentánea? Y lo más importante, ¿por qué ella sentía que había algo raro en la forma en que él la miraba, como si estuviera viendo algo más allá de lo que mostraba?