✦ CAPÍTULO 10 ✦
“Cuando aún éramos nosotras”
Eliana
A veces me pregunto en qué momento se rompió todo.
En qué instante la chica que me defendía se convirtió en la misma que ahora busca verme caer.
Porque Evangs no siempre fue así.
Hubo un tiempo en que era la única persona que creía en mí, cuando nadie más lo hacía.
Recuerdo la primera vez que nos conocimos en la universidad.
Yo era la nueva, la del acento extraño, la que venía con un cuaderno de sueños en lugar de bolsos caros.
Ella, en cambio, caminaba como si el mundo entero le perteneciera, con su melena rubia agitándose al viento y una sonrisa que desarmaba a cualquiera.
Aquel día, un grupo de chicas se burlaba de mí por llevar la misma falda dos veces.
Yo fingí no escucharlas, pero ella sí lo hizo.
Evangs se acercó, alzó la barbilla y les dijo con esa voz segura que todos obedecían:
—No todas necesitamos vestir de marca para tener clase.
Desde entonces, supe que era distinta.
Y sin querer, me aferré a ella como quien encuentra su primera amiga de verdad.
Pasábamos horas hablando en los pasillos, soñando despiertas.
Yo le mostraba mis bocetos, y ella me decía que algún día usaría uno de mis vestidos en una pasarela.
“Nosotras dos —me decía—, vamos a cambiar la forma en que el mundo mira la moda.”
Y yo le creí.
Le creí con todo mi corazón.
Nos reíamos de tonterías, estudiábamos hasta la madrugada, comíamos pan con chocolate cuando no teníamos dinero.Era nuestra época dorada.Antes de que todo cambio para mi y para ella,Cuando mi mamá,murió y me quedé sola,después mi tía cercana me adoptó como hija,y un año después sucedió el accidente del esposo de mi tía,fue un año muy difícil para mí,y también para ella,su familia no mantenía en la casa,se sentía sola y vacía al igual que yo,y ahora la chica.La misma que ahora me mira como si fuéramos enemigas.
Como si la amistad que un día nos salvó ya no valiera nada.
Hoy, verla en la cafetería fue como abrir una herida vieja.
La manera en que habló de Kelian, esa sonrisa venenosa, ese brillo de triunfo en los ojos…
por un segundo sentí que volvía a perderla.
Otra vez.Porque aunque ya no lo diga en voz alta, todavía me duele que haya escogido el orgullo antes que quedarse conmigo. Y yo también con ella
Evangs y yo compartimos más que sueños: compartimos miedos.
La vi llorar por las noches cuando nadie más la veía, la escuché maldecir su propio reflejo y prometer que jamás volvería a ser débil.
Yo estaba ahí cuando le rompieron el corazón por primera vez, cuando juró que nadie volvería a hacerla sentir pequeña.
Y quizás fue ese día cuando la perdí.Porque el dolor la volvió fuego, y el fuego… termina quemando incluso a quien intenta apagarlo.Esta noche, mientras cerraba la cafetería, el eco de su voz seguía en mi cabeza.
“¿Sabes que el y yo ya nos hemos visto unas cuantas veces?”
No sé si era verdad o solo una forma de herirme, pero bastó para nublarme el alma.
Salí a caminar por el barrio, buscando en las luces de Nueva Orleans algún consuelo.
El aire olía a lluvia, y el saxofón de una esquina tocaba una melodía triste, como si la ciudad también recordara algo que quería olvidar.
Miré al cielo.
La estrella Hermayioner brillaba más tenue que otras noches.Le pedí, con el corazón apretado, que me diera fuerzas para no odiarla.
Porque todavía hay una parte de mí que la extraña.A la Evangs de antes.
A la que me hacía reír, a la que creía en mis diseños, a la que me abrazaba y decía “pase lo que pase, siempre juntas”.
Pero esa promesa se rompió hace mucho…
y ahora siento que algo más está a punto de romperse también.Porque cuando el destino se empeña en probarte, no manda tormentas pequeñas.Y esta vez, presiento que la mía llevará su nombre.
Al llegar al pequeño departamento miro al rededor una vez más y entro,mi tia me esperaba en una silla tejiendo una bufando de lana y me sonrió al verme
—¿Que tal te fue?— me preguntó —¿ Quieres café?— pregunto— si claro— le dedicó una sonrisa y me siento al lado de ella—¿ Que te pasa cariño,te he visto un poco distraída en estos días ?
A ella no le puedo ocultar nada,ella me conoce perfectamente,así como lo hacía mi mamá,se me escapó una pequeña lágrima en los ojos y ella me la limpia con sus manos tivias
— hay cosas en la vida,que uno no puede tener tan fácilmente,y la gente tan cambiante últimamente
Ella me sonríe, y me coge la mano
— A veces hay cosas,dónde uno toca dejarlas ir,tu amistad con Evangs fue una amistad única,Pero también hay que soltar lo, obviamente si tú quieres,o no
♠️♣️♠️♣️
Kelian
Ah esto se refería el brujo cuando me dijo que tuviera con cuidado,con el pasado,no sabía que un día en contarme con ella en Bogotá fuera un desastre. Eliana me mira algo pensativa con lo que le dije,ella no me cree la veo respirar y se levanta lentamente de la silla,su tía mira todo desde la esquina de la cocina de la panadería
—¿Porque no me lo habías dicho?— a qui va la misma pregunta—te lo juro te lo iba a decir solo necesitaba el lugar correcto,pero ella se adelantó,no nos gusta vernos feliz,tu misma es testigo por esos celos absurdos de ella. Yo solo tengo ojos para ti mi hermaione.
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amorsano, celos distancia amor a primera vista, sueños y magia
Editado: 05.12.2025