Eliana
Me despierto antes de que el sol termine de calentar,el aire húmedo de nueva Orleans,no necesito una alarma;mi cuerpo ya está acostumbrado al mismo ritmo de siempre. El sonido de los tranvías a lo lejos ,el canto de algún pájaro perdido en los cables ,y la voz de mi tia Angela desde la cocina me recuerdan a que otra jornada me espera. No tengo prisa, aunque se que el reloj no me dará tiempo,en el espejo de mi cuarto me encuentro con la misma mirada de siempre: ojos marrones con un brillo cansado como si fueran dos ventanas que nunca terminan de abrirsen del todo.
Me recojo el cabello rápido y me coloco un poco de maquillaje suave,no tiene caso aquí nadie me mira dos veces. Las ocho y punto y estoy saliendo con mi tía del pequeño departamento para ir a la panadería del centro de nueva orleans,ese pequeño rincón donde nos ha costado maternerlo día tras día. Doña Ruby llega justo a tiempo cuando estamos abriendo el local,ha pasado ya más de una semana donde la señora elegante rubia se ah quedado con nosotros,decidió cambiar de vida y que mejor en este hermosa ciudad de nueva orleans.
—buenos días Eli ....— me saluda con una sonrisa y entra —lo mismo de siempre cariño —dice y le sonrió —claro — mi tía pende la estufa para hacer el café, y yo me pongo a organizar la panadería
Media hora después el tinto para doña Ruby ya está listo— que pena la demora— le digo con una sonrisa timida—no hay de que
Mis amigos llegan no hay necesidad de alzar la cabeza se que son ellos,Tori me saluda y me abraza y kelian me da un beso en los labios al cual mi tía se sorprende y me mira " tenemos que hablar". Me sonrojo y el también
—creo que estoy frito— dice y lo miro — estamos — le corrijo y Tori sonríe de medio lado —¿ Que hicieron después de quedar sola en el local mmmm?...
Kelian estaba tarareando una canción y se calló,Voltio a mirarnos con una sonrisa de medio lado y como se que va a decir lo calló,pero el me aparto la mano
— lo que Ati te hace falta cariño—tori lo mira como para matarlo y lo persigue por toda la panadería hasta que se cansa y refunfuña
—te voy a conseguir otro candidato este no te conviene— dice entre dientes y después sonrie— ¿Que vas hacer ahora?— me pregunta y le sonrio
Los chicos me siguen ayudando con los quehaceres de la panaderia y mi amiga Tori,me mira con curiosidad — nada,si me queda tiempo seguiré diseñando bocetos de moda— digo algo nerviosa la presencia de Kelian me pone así y el lo sabe porque sonríe descaradamente
—¿Y si vamos al parque? — pregunta de repente —falta una semana para que llegue diciembre Eli.... Y depronto nos vamos a pasear la navidad en Colombia, queremos pasarla más tiempo contigo.
¿Porque Kelian no me ha dicho esto? ¿Cuando pensaría decírmelo ?
—¿Vuelven verdad?— pregunto un poco nerviosa y con miedo a la respuesta — Eli.... Nosotros ya salimos de la uni,ya somos mayores de edad tenemos veintidós años,obvio que voy a volver contigo,a y no me iré hasta encontrar un amor bajo las luces de nueva Orleans ¿Entendiste?
Muevo la cabeza en un si—bueni entonces a las cinco me esperan en el parque —tori mueve la cabeza en un no— nos vamos a esperar hasta las que llegue las cinco aquí contigo,.indgras tanto hay que ayudarte a tender las personas
Y así fue como nos llegó la tarde,entre risas,miradas lascivas que me daba Kelian la tarde llegó,mi tia se acercó a mi con una sonrisa de medio lado
—ve,yo termino aquí — Tori me jalo del brazo y se despidió de mi tia,salimos de la panadería y la llovizna nos cogió afuera,nos subimos al carro lujoso de la familia Delacroix
Llegamos al parque y Kelian me cogió de la mano y me beso,Tori rodeaba los ojos y me sonrie
—creo que deje algo en el carro,sigan sin mi eh— le guiña un ojo a Kelian y después a mi—mejor dicho que se diviertan.
La llovizna seguía cayendo, suave, casi tímida, como si tuviera miedo de interrumpirnos. Kelian aún sostenía mi mano, cálida, firme, como si temiera que la ciudad —con sus luces, sus tranvías y sus secretos— pudiera robarme de su lado en cualquier instante.
—No tienes frío —me preguntó, aunque su dedo ya estaba limpiando una gota de agua de mi mejilla.
Negué con la cabeza, aunque sí tenía frío… pero era otro tipo de frío, uno que se detenía cada vez que él me miraba así.
Nos acercamos al camino de piedras del parque, ese mismo donde Tori y yo solíamos sentarnos cuando queríamos olvidarnos del mundo. Pero ahora, el mundo entero parecía haberse achicado a la forma de los ojos de Kelian.
—Eli… —murmuró bajito.
No sé si la lluvia se volvió más intensa o si mi corazón empezó a latir más fuerte, pero en ese momento supe que iba a decir algo importante.
—No te dije lo de Colombia… porque quería hablarlo contigo sola —su voz era suave, pero tenía ese peso que te envuelve.
—Pensé que te ibas —confesé finalmente, con un hilo de voz.
—¿Irme? —Él rió bajito y negó, acercando su frente a la mía— Eli, ¿cómo me voy a ir… si apenas estoy empezando a encontrarte?
Sentí el mundo detenerse. Las luces amarillas del parque se reflejaron en sus pestañas mojadas. Sus dedos buscaron mis mejillas, mis labios, como si memorizaran cada parte de mí.
#3184 en Novela romántica
#1018 en Chick lit
amorsano, celos distancia amor a primera vista, sueños y magia
Editado: 05.12.2025