Capitulo Cuatro ( Reencuentro )

Es de mañana, me encuentro en la sala dando vueltas, tenía que practicar que le diría a ese niño necesitaba algo que sonara bastante tentador y lo mas creíble posible, el chofer ya me esperaba y se sorprendió bastante cuando en lugar de decirle que conduzca a Topic media, le digo que vamos a Banquells Entertainment.

Llegamos y el sistema de seguridad no me permite llegar con el auto, por lo tanto bajo de este y caminó adentro de la empresa buscando a una secretaria o personal que me ayude, todos se quedan sorprendidos de que este en este lugar, para ser sincero yo tampoco pensaba llegar a entrar, camine hasta un largo mostrador donde una linda chica me atiende.

-Buenos días señorita, tengo una cita con el director-

-Buenos días señor Ferrer, el director de que área?-

-El dueño de la empresa, Jasón Banquells-

-Necesito un segundo, disculpe-

Se fue por una puerta, aun me sentía incómodo, las miradas no me dejaban tranquilo, la chica tardo mucho por lo cual pense que el niño no queria atender mi petición y solo queria jugar, hasta que una empleada de limpieza me saco de mis pensamientos.

-¿Entonces a quien viene a ver?-

-¿Disculpe?-

-Dijo que tiene una cita con un director, pero después que con el dueño-

-Si claro, lo dije de esa manera ya que la señorita no me entendió-

-Son personas distintas-

-Señora, no intente jugar conmigo, ayer conocí a Jason el dueño de esto, su secretaria me llamo para decir que nos podíamos ver hoy-

-El joven Jason, solo es el director general, no es el dueño, usted tendría que saber sobre la señorita Banquells-

-Claro, señora basta de juegos-

Pude notar que la señora se puso algo extraña y siguió con su camino, me quede esperando por un rato mas, la señorita regreso con cara de confusión, anotó algo en su computadora y se dirigió a mi.

-Señor Ferrer, adelante la secretaria de el dueño lo espera arriba, estan en una pequeña junta por lo cual tendrá que esperar un poco de tiempo, suba por las escaleras que estan atras de la puerta, que tenga buen dia-
 

-Gracias, igualmente-

Tal y como lo indico, subí las escaleras, se pudo notar bastante la diferencia, un piso bastante amplio, tiene acabados de mármol y un toque negro bastante peculiar que resalta sobre todo, una voz se dirige a mi, también me era familiar.
 

-Benyamín, que sorpresa tenerte por aquí, no me dijeron que eras tu quien esperaba abajo, ya decía yo que tenia que ser importante para te aceptaran ver-

-¿Jules?¿Cuánto tiempo sin saber de ti? ¿Como estas?-

-Bastante bien, el trabajo de secretaria no es tan malo. Te voy a decir algo que seguro no esperas, ¡Estoy embarazada!-

-¿Jules embarazada? Eso no puede estar pasando, ¿Puedo saber de quien es?-

- Un abogado que conocí en California, estamos bastante emocionados por todo esto, es algo nuevo pero interesante-

-Me alegra saber eso, mereces ser feliz, ¿Cuando regresaste?

-Hace tres largos años. Pero cuéntame ¿Que tal tu vida Ferrer? Ocupada supongo, ¿Tienes una novia secreta? ¿Existe la señora Ferrer?-

-Para nada, solo trabajo, trabajo y mas trabajo, no voy a mentir, mi tipo no son las interesadas-

-Fuertes declaraciones de Benyamín Ferrer, no se puede creer esto, ¿Que está pasado?-
 

-¿Entonces ahora tienes mas sentido de el humor? ¿Donde quedo la Jules intensa y mandona?-
 

-Todo fue culpa de Marian ella llego a cambiar mi vida por completo, es un ángel de luz en la vida de cualquiera,-
 

-Tenia tiempo sin escuchar su nombre-
 

-Perdon por mencionarla, yo nunca supe como termino todo, ella cambio bastante se apago por completo.
 

-¿Ella no conto nada? Eso es extraño-
 

-Ella es rara a su manera, pero bueno ¿Que sabes de los chicos? Yo perdí total comunicación con todos-
 

-No estoy mejor que tu, lo más cercano es mi hermano y no estamos en las mejores situaciones-
 

-Que pena, fuimos tan buenos amigos, quiero regresar a esos tiempos donde no tenían nada mas importante que ser la capitana de porristas -
 

-Es lindo encontrarte, seguro nos veremos muy seguido, si todo sale bien voy a estar pasando bastante tiempo aquí-
 

-No lo creo Ferrer, voy a renunciar a mi trabajo, solo es cuestión de tiempo, quiero dedicarme a mi hijo-
 

-Eso es bastante lindo, seguro estara orgulloso de ti. No tengo duda de que seras una buena madre.-
 

-Cuando tu tengas un hijo seguro va a ser el consentido, el pequeñito heredero de los Ferrer, solo te digo que necesitas conseguir una mujer hermosa, no quieres que tengan la cara de tu madre, eso te lo aseguro- 
 

-Los genes de mi madre no son malos, yo soy la prueba ¡La hermosura en persona!-
 

-Yo no estaría tab segura. La junta esta por terminar y tengo que ayudar a despedir gente importante, gusto encontrarte Ferrer, suerte ahí adentro-
 

Jules era mi compañera y amiga de la escuela, nos conocimos desde niños, nuestras madres eran amigas, perdí contacto con ella cuando su familia se fue a California. La chica de la que hablo, Marian Alatriz, tanta hermosura y peculiar carácter, ella me hacía pensar que la mujer perfecta para mi existia y esa era ella, compartí bastantes cosas a su lado, lamento que las cosas no terminaran bien.
 

Pasaron cinco minutos y Jules regreso, me indico que entrara y que pronto llegarían a atenderme, me levanté y con toda seguridad puse mi mano en aquella perilla, la cual abría la puerta de mi destino y le di vuelta.
 

La primera impresión fue que es una oficina bastante oscura, en mi opinión difícil de trabajar aquí, tiene muchos libros en los costados, un escritorio en el fondo centrado con una placa plateada, tenia grabada la palabra "Banquells", me di cuenta que no había nadie, es como si hubieran desaparecido todos, lo cual no duro por mucho tiempo, Jason apareció atras de mi.