Bastardo sin pena

CAPÍTULO 10- "La cita con otro chico"

Ser llevada a la dirección nunca me había pasado, siempre he sido la chica que se sienta de primero para poner atención al profesor aunque me caiga mal, la que estudia como loca hasta quedarse dormida y aún asi no sirve de mucho porque saco notas regulares, haber obtenido esta beca fué uno de los mayores logros de mi vida, ya que vengo de una familia que le ha costado mucho las cosas, mi papá tuvo suerte de tener nuestra granja ya que fué heredada por mi abuela, mi hermano Luke apenas tiene 14 años y está my orgulloso de mí y quiere seguir mis pasos, estar aquí sentada no es el mejor ejemplo que le quiero dar , mis papas hicieron un gran esfuerzo desde que eramos niños y lo menos que podia hacer era decepcionarlos y sacar una carrera en Administración era una de las razones por las que había venido aquí pero, defener a una amiga que siempre ha estado en las buenas y malas para mí es parte de las cosas en las que debería sentirme orgullosa,aunque me haya equivocado con Airon, no queda más que rezar a los Santos de los Estudios para que me saquen de ésta.

Mis pensamientos daban vueltas en mi cabeza mientras veía cómo el hermano de Rhett sostenía su iphone mientras caminaba de un lado al otro hablando con alguien quien no parecía darle la respuesta que quería pues su mandíbula se mantenía tensa y no paraba de decirle lo inepto e incompetente que era, estaba claro que no era momento para que yo estuviera ahí, que ya estuviera enojado seguro sería peor para mí. Por un instante cruzamos las miradas y pude notar sus ojos iguales a los de Rhett con una exepción, éstos no brillaban de la misma manera, su semblante daba un poco de miedo aunque era casi parecido a Rhett pero con unos años de más, y eso me generó un escalofrío en todo el cuerpo, el tipo provocaba una mala vibra en mí que era difícil de explicar. Dirigí mi mirada al escritorio principal y una cosa me llamó la atención, no había ninguna foto de su papá , y ahora que lo pienso, Rhett nunca me había hablado de su mamá tampoco, y no sabía como lucía ella.

Listo, disculpa la demora, ¿Te gustaría tomar un té?

—Eh, no gracias estoy bien así—

—Vamos sin pena, es un té de hierbas muy relajante, te hará bien, desde aquí puedo ver tus manos temblorosas, tranquila, no te haré ningun daño.— mencionó

—Bueno está bien gracias —accedí sin dejar de mirar como manipulaba una tetera electrónica que jamás había visto en la vida, de echo no soy una chica de tomar té, soy más de tomar café y negro, sin leche ni azúcar. Sonreí al sostener mi taza y resoplé el humo que salía mientras él se servía otra taza.

—Así que te llamas, Any Foster ¿cierto?— preguntó mientras sacaba de una caja un documento y lo leía detenidamente

—Eh si, disculpe pero ¿ Cómo sabe mi nombre?— pregunto con una mirada directa

—Bueno eres la última chica que me falta de conocer de todos los becados de nuevo ingreso.— mencionó mientras dió un sorbo a su té

—Ah ¿vinieron todos a verlo? — pregunté con intriga intentando ver lo que tenía en ese papel

—Si estuve llamándolos uno por uno y justamente hoy te tocaba a ti

—Entonces no estoy aqui por lo que pasó en la cafetería? — fruncí el entrecejo

—No, a mí eso no me interesa, dijo mientras con un lapicero pasaba una línea sobre mi nombre y continuó—No tengo porque regañarte, esto no es un kinder, tú mas que nadie debe de saber como te tienes que comportar

— ¿A qué se refiere con yo más que nadie?

—Bueno, ya sabes, eres becada, eso significa que no aportas nada para el crecimiento de la Universidad —contestó con las cejas elevadas y arrugando la boca como si eso que dijera fuera lo peor que podría pasar
— Quiero que sepas que mi padre fundó este lugar con una ideología que yo no comparto, desde que llegué aquí tomé la decisión de hacer unos cambios, el primero es que ya no puedes vivir en las residencias universitarias, si quieres continuar aquí tendrás que buscar un lugar donde vivir, la Universidad ya no le dará sponsor a los estudiantes becados en ese aspecto, a final de año si pierdes alguna materia tendrás que pagarnos toda la carrera completa sin derecho a graduarte por supuesto —

— Deseo que ésto último se mantenga entre nosotros. — espetó sin levantar la mirada

— Eh si, está bien — respondí apretando los puños de mis manos, me sentía aprisionada, no puedo creer lo que me esté diciendo

— Podrías porfavor firmar este acuerdo? — me presentó un documento el cual intenté leer detenidamente, me estaban prácticamente echando a la calle, ni siquiera tengo empleo, ¿Cómo voy a pagar un apartamento? lo miré mientras daba un sorbo de té, lo bajó y me regaló una sonrisa falsa.

— Adelante firma — agitó su mano — es lo mejor que puedes hacer

— Pero si pierdo una materia tendré que pagarle toda la carrera Don Sebastián — musité




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