¿Por qué no me miras? Es que estoy justo frente a ti, yo no voy a ir a ningún lado, quiero sentirte, el poder de tu mirada...
¿Es por que yo no soy lo que tú esperabas, porque yo no tengo esa mirada tan linda?
Quiero que voltees a verme como aquel día, la primera vez que te ví, cuando el humo inundaba mis pulmones y me encontraba bajo la influencia de la ceguedad, porque tenía palabras falsas a mi lado.
Desde que te ví por primera vez en aquel día nublado, supe que tú podías salvarme de las falsedades, que podrías luchar contra ese ente increíblemente alto y con mal aspecto que me tenía atado a una rama de palabras tóxicas que simplemente no encajaban en mi mundo. Sabía que el lugar perfecto estaría junto a ti, en tus fuertes brazos y sonrisa brillante.
Sácame de aquí, porque yo nunca había sentido esto por nadie. Necesito que me enseñes el camino dentro de la oscuridad, y ésta vez no hay nada que pueda arruinarlo.
Te puedo imaginar, haciéndome sentir cosas que nunca había experimentado, llegando a puntos que sólo tú sabrías cómo manejar.
La distancia entre nosotros me está matando, tienes que leer mis señales, porque pides ser comprendido. Siente que te he estado gritando todo este tiempo, que eres una ilusión única que no quiero dejar ir tan fácil. Y trataré de hacer lo posible porque yo pueda pertenecerte cada día.
Enséñame el camino a la oscuridad y el pecado que de verdad me gusta.