Capitulo 21

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Capítulo 21

Scarlett Grant

Luego de que Bestia me dejara en casa entre a esta con un poco de temor y observe que todo estaba exactamente como antes.

No, no como antes de que aquel hombre tratara de atraparme, con cosas tiradas y regadas.

Todo estaba en su orden perfecto, no había un hacha, ni tabla para alimentos tirada en el suelo.

Y eso me dio escalofrío

Estoy segura de que no estoy loca y sabía lo que pasó, pero los hechos demostraban lo contrario.

Ya cansada de todo simplemente me fui a mi habitación en la que encima de la cama encontré una nota.

"Tu padre llegará pronto, nos vemos luego -Andrea"

Note que la tinta parecía haberse escrito recién ya que cuando pase mis dedos sobre la hoja un poco de tinta en las letras se distorsiono

Wau, si fuera por mi mejor amiga me asesinan ayer

Rodee los ojos y me dedique a descansar el poco tiempo que tenía antes de que llegara mi hermana y padre de aquel viaje para luego arreglarme para asistir a la cena con mi padre.

Después de tener aquella conversación con Bestia no paraba de pensar que yo no era la más preparada para hablar con mucha seguridad en la cena. Perdí la mayoría de mi infancia por culpa de... Ella.

Las explicaciones que se supone que debía tener no están porque nunca me las cedió ella.

La odiaba, mucho.

Estaba tumbada de espalda en mi cama y llegaron todos esos pensamientos a mí.

Todo mi día se resumió en estar preocupada por todas las acciones que tendría en la cena, pero algo si me era claro.

No demostraré nada a ante nadie.

Podría no saber mucho del tema, pero demostrarle tu incapacidad al enemigo es perder por completo.

Estaba sumamente perdida en mis pensamientos hasta que escuchar el sonido de la puerta principal.

Mi corazón dio un salto y de la nada me empezaron a sudar las manos.

¿Qué tal si era el chico de la noche?

¿Y si venía a terminar su trabajo?

Pensé una y otra vez

Baje con precaución, pues gracias al retraso de mis habilidades no sabía exactamente quién sería y todos mis miedos quedaron esparcidos cuando vi aquella cabellera castaña tan idéntica, pero a la vez diferente a la mía.

- ¿Scarlett? - Llamó Violeta

-Que me traes- pregunte con una sonrisa a lo que ella rodeo los ojos.

- Quería traerte un conejo- susurro

¿Un conejo?

- ¿Y qué paso? - pregunte al notar su silencio.

-Que no sabía que el pobre sufría de corazón - dijo entre risas papá entrando a la casa con algunas maletas.

- ¡No sabía que algún animal pudiera tener problemas cardíacos! - defendió Violeta

- ¿En dónde lo compraste? - reí - ese tipo de cosas te las dicen ¿sabes?

Tomé la maleta de mi hermana y ayude a subirla hasta su habitación, una vez en ella me senté en su cama y la espere.

-Pensé que me ayudarías a desempacar- dijo con una ceja levantada

-Subirlas está bien, ayudarte a desempacar ya es avaricia.

Ella solo rio y sacudió la cabeza.

- ¿Cómo les fue? - pregunte al fin en un susurro.

La habitación quedó sumergida en silencio unos cuantos segundos y ella lo rompió.

-Mamá aceptó presentarse a la cena.

-Ese era el trato, irías con mi padre y ella vendría.

-Pero quiere pasar tiempo con ambas

-No - fui directa

-Su psicólogo dice que ha cambiado.

-Entonces todos sus pecados han sido borrados? - bufé - está vez no le será así de fácil, no volveremos -hable firme - ¿Qué me dices de la ceremonia de compromiso?

-No habrá ceremonia sin cena de acuerdos.

- ¿Ella irá?

- ¿Acaso eso te importa? - preguntó Violeta sarcástica

-Para mí está bien si simplemente desaparece de la tierra.

La puerta se abrió y dejó a la vista a un hombre alto, con camisa blanca y pantalones negro caros.

-Es tu madre- dijo papá y estaba a punto de abrir la boca para hablar del porqué ese argumento no iría conmigo, pero él me detuvo - No te pido amarla, te pido soportarla y quieras o no quieras aún seguimos casados y aún puede verlas porque son sus hijas.

-No la llamare Mamá

-Debemos presentar un frente unido ante la Golden Dynasty. Debes hacerlo- dictamino  

Me niego a tener que verla, a tener que estar en la misma habitación que ella.

Me niego a llamarla mamá.

Me niego a estar junto a ella.

Me niego a tener que hacer todo lo que se relacione por estar ahí, sonriéndole o incluso solo observándola.

Me levante de la cama de mi hermana enojada y me dirigí a la puerta y antes de atravesarla pasando al lado de mi padre susurre.

- ¿Le bourreau est-il coupable des péchés commis par la personne avant son exécution?

 (¿Es el verdugo culpable de los pecados cometidos por la persona antes de su ejecución?)

- ¿Le bourreau ne serait-il pas maintenant le coupable de sa mort? - respondió mi padre antes de que me viera desaparecer por su lado.

(¿No sería el verdugo ahora el culpable de su muerte?)

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Decidí encontrarme con Susana en el momento exacto en el que fuéramos a sentarnos en la mesa para estar en la cena.

Entramos a un restaurante grande y elegante donde antes de entrar pude observar que estaba con el letrero de "Cerrado" activo, pero luego, una vez dentro pude notar que todas las mesas y sillas estaban alejadas dejando así una única mesa con 8 sillas en ella.

Mi padre llevaba un traje negro completo, yo llevaba puesto un vestido del mismo color con escote, me llegaba hasta arriba de la rodilla en forma de campana.

Aquel vestido me lo había puesto casi obligada por que mi decisión inicial fue una camisa de estampado con unos vaqueros, todo iba bien hasta que salí de mi habitación y Violeta me quedó mirando como si fuese la única persona descerebrada en la tierra así que tuve que cambiarme.