La bestia

Hay una chica que me gusta, ella es amable y linda, pero a pesar que hayamos estado en la misma clase desde primaria, nunca he tenido el valor de hablarle, creo que ella ni es consiente que hemos estado cerca tanto tiempo, después de todo en mi infancia pasaba completamente desapercibido, a diferencia de ahora.

Si soy sincero no estoy orgulloso de mi actual yo, no soy más que un cobarde que dejo de intentarlo. Sé que las personas me llaman bestia y no creo que estén equivocados, con tal de sentir que encajo tan siquiera con alguien he hecho cosas horribles, de las cuales me arrepiento. A todos, a excepción de mis amigos, les desagrado, incluida ella, sé que incluso los profesores piensan que soy una molestia. Jack fue el único que me acepto, puede que él no sea una persona ejemplar pero el solo hace lo que cree necesario.

— ¡Hey! A que no saben que están haciendo los imbéciles de Nathan y Dan. — dijo Ariel sacándome de mis pensamientos, él era uno de los tantos que admiran a Jack, seguramente si él no estuviera con nosotros sería objetivo de algunos de los de aquí. A pesar de a Jack no le guste molestar a los más débiles que él, eso no se aplicaba a los demás de aquí, puede que parezcamos su grupo, pero él no interfiere si no lo cree necesario.

— ¿Chuparle las bolas a J? ─ dijo Chris mientras soltaba carcajadas.

─Seguro que eso también, pero eso no es a lo que me refiero, parece ser que han estado molestando a una chica ─ De las pocas veces que Jack se metía era si molestábamos a alguna chica, él tiene varias hermanas y dice que no le gustaría que las tratasen mal, así que evita que molestemos a alguna.

─Parece que les faltan huevos, si J se entera les dará una paliza ─ exclamo Peter mientras le daba un mordisco a lo que sé que estuviese comiendo.

─Si, pero eso no es lo peor, a quien han estado molestando es a la pequeñita del salón de Derek, la que se junta con mi hermosa Zoé. ─ finalizo mientras me miraba. Sabía perfectamente a quien se refería y sin poder evitarlo me enfurecí, tratando de controlarme, solo atine a encajar mis uñas en la palma de mi mano─ Me pregunto… puede que si la salvo, mi musa Zoé se enamore de mi ─ así ellos empezaron a hablar de lo bella que era Zoé.

Al principio yo solo creía que aquellos dos solo eran un tanto estúpidos, pero al final Jack tenía razón, ellos eran la peor basura, no diré que es por el hecho de molestar a alguien, seria hipócrita de mi parte, pero vamos todo el mundo es más alto, y por mucho, y fuerte que Bonnie.

Desde ese día no le perdí el ojo de encima, no llegaba al punto de seguirla a su casa, pero en la escuela procuraba estar cerca, fueron pocas las interacciones que Bonnie tuvo con ellos, pues ella siempre estaba acompañada por sus amigas Adriana y Zoé. Fue justo el día que decidí dejarla cuando sucedió aquel incidente.

Estaba yendo al sitio donde los chicos y yo acostumbramos fumar, y lo mire. Esos dos la estaban molestando, y sin pensarlo me acerque.

— Hey ¿qué hacen? — pregunte tranquilo, sabía que alterarme en esta situación solo pondría las cosas peores.

— Justo a tiempo, Derek, casi te pierdes la diversión- dijo el imbécil Dan quien tenía el descaro de reír, mire a Nathan quien tenía agarrada a Bonnie de la camisa. Los ojos de Bonnie estaban llorosos y se alcanzaban a escuchar pequeños sollozos ─La pequeña dijo que nos iba a regalar dinero.

— Vaya, que generosa eres. Entonces, puedo saber por qué le tienen así. — Señale el agarre de Nathan, no quería que la hirieran así que tenía que estar lo más calmado posible.

—Solo jugamos un poco con ella ¿Verdad? — contesto Nathan con una sonrisa burlona y apretándole las mejillas con una mano a Bonnie, sin poder evitarlo me enoje más.

— Suéltala, Nathan — Seguía tratando de mostrarme tranquilo, pero ver sus caras me enfurecía. — Ahora — ordene cuando me miraron confundidos

Nathan, la soltó y me miro, sabía que estaba molesto a pesar de esa estúpida sonrisa.

— ¿Y se podría saber quién eres tú para darme ordenes? — pregunto Nathan, acercándoseme amenazante. A este punto ya sabía que no iba a salir como si nada hubiese pasado.

— ¿Que mierda te sucede, Derek? Ahora te quieres creer el héroe — dijo Dan soltando un resoplido para luego reír.

— No quiero problemas, entendido, solo déjenla y váyanse, ¿no les da vergüenza molestar a una enana como ella? — No me gustaba referirme de mala manera a ella, pero tampoco podía demostrar que me importaba ella, solo complicaría las cosas.

Nathan soltó una risa seca a la vez que me lanzaba un puñetazo, y fue cuando la ira me segó y empecé a golpearlo también, no me gustaba que las cosas hayan llegado a este punto, sabía que la imagen de Bonnie hacia mi empeoraría, después de todo estaba viendo con sus propios ojos que era violento...

El cabron era fuerte, pero yo no iba a dejar que hirieran a Bonnie, no sé cuánto tiempo estuvimos peleando, paramos por que escuchamos un golpe seguido de un quejido, volteamos a la dirección y vimos que Bonnie le había lanzado su mochila a Dan, no me lo esperaba para nada y por un momento no pude evitar reír por ello, mi sonrisa se esfumo cuando vi que sus ojos volvían a llenarse de lágrimas y justo cuando iba a acercarme ella, empezó a correr mientras gritaba, y vaya que grito.

Cuando mire a un profesor acercarse, empecé a correr, sabía que no importaba si ella le decía que solo la estaba ayudando no le creerían y pensaría que la estaba amenazando para que diga eso, no los culpo, con la cara que me cargo yo también lo pensaría. Cuando note que ni el profesor ni los imbéciles me seguía pare de correr.

Estaba cansado así que fui a recostarme al pasto del patio cerca de la entrada, tenía que ver que Bonnie pudiese irse a su casa sin más incidentes, cerré los ojos por un momento mientras sentía el viento rozar mi cara, tuve mucho miedo de que le sucediese algo y yo no hubiese podido hacer algo, quería poder protegerla, pero no creo que se me permita.