Besos Azucarados

Capítulo 13

Nuevamente un suéter ajeno estaba en mi poder. Esta vez no iría a devolverlo si David me amaba como decía debía demostrármelo y eso incluía tener que visitarme otra vez. Luisa llegaba esa noche para quedarse a dormir conmigo y me pareció extraño que siempre fuera ella quien viniera a hacerme compañía y no yo a ella, intenté cambiar el plan y sorprenderla pero preferí quedarme a esperarla ya habrían más noches para quedarme en su casa.

— ¡Hola! ¿Cómo está la más hermosa? —preguntó Luisa entrando por la puerta con una bandeja en sus manos. Me limité a sonreír al verla.

— ¡Oh por Dios! Extrañaba esa curva en tus labios —me dijo —hace tanto que no reías —añadió.

—Hay un motivo —le dije.

— ¿Cómo? ¿Haber cuéntamelo todo?

—David se ha ido hace poco. Confesó que me ama desde hace mucho tiempo.

—No me lo creo, quien lo diría. El chico malo y engreído enamorado de la nena aburrida.

— ¿Es un halago o solo te burlas?

—Estoy petrificada.

—Lo sé tampoco le creí. ¿Por qué nunca me contaste que cortó con Mónica?

—Bueno. No pensé que te interesara. Estabas tan mal que no hacías otra cosa más que hablar de Allan y yo me limitaba a escucharte.

—Ya estuvo bien, he decido empezar de nuevo. Allan será siempre mi primer gran amor, pero ya no hay nada que hacer.

—Me alegra que pienses así. ¿Vas a darle una oportunidad a David? —me preguntó

—Aún no es el momento, no siento nada por él. No me gustaría hacerme falsas ilusiones y tampoco voy a engañarlo. Sabes que él jamás fue de mi agrado.

—Bueno cariño, las personas cambiamos. David nunca fue malo, simplemente se divertía a su modo. Con el paso de los años ha madurado bastante y se ha puesto mucho más guapo.

—Luisa de verdad que no cambias lo sigues viendo con ojos de babosa.

—Hay cállate, tienes una suerte de verdad te mereces un poco de felicidad. Déjalo que te conquiste.

—No respondí, tan solo tomé aquel suéter y me lo puse, quería sentir de nuevo su agradable aroma.

Poco a poco y con la ayuda de mi buena amiga y de mis padres mi vida fue encaminándose nuevamente. Comenzaba a ser otra vez yo, la joven aburrida pero con ganas de vivir.

En el fondo sabía que desde donde estuviera Allan estaba feliz como todos aquí, él hubiera hecho lo necesario por hacerme sentir bien; no conocía a alguien que se le comparara en todos los sentidos aún en los momentos más difíciles que atravesó siempre se mantuvo fuerte y feliz. Nada podía doblegarlo pienso que ni siquiera la muerte tuvo esa oportunidad ya que él iba a reinar en los corazones de todos aquellos que le conocimos y que tuvimos la fortuna de ser especiales en su vida. Allan partió de este mundo dejándonos un gran legado <<Sonreír incluso en medio del llanto>> le había fallado al no cumplirle, pero aún estaba a tiempo para hacerlo.


 


 



#39881 en Novela romántica

En el texto hay: besos, romance, amor

Editado: 03.05.2019

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