Hoy es el cumple años de Maya y en un mes se cumple un año de conocerla.
Me levanto sin hacer ruido, bajo a la cocina y veo que Eliot y Rubí estan listos.
-¿aun duerme?- pregunta Eliot
-si, vamos antes de que despierte- subimos rápido y entramos a mi habitación
Cantamos la típica canción, no muy fuerte y tampoco muy suave. Ella se despierta y sonríe.
-chicos no tenían que hacer esto- se sienta y sonríe
Le llevamos un globo y un pedazo de pastel de helado de chocolate.
-claro que si, es tu cumple años guapa- Rubí Sonríe mientras Eliot toma fotos
-gracias, son los mejores- Maya se pone de pie y nos abraza a los tres
-no es nada princesa- Eliot la mira con ternura
-bien, hoy no es la excepción, así que debo ir a trabajar- se dirige al closet
-entonces te dejamos- Rubí nos arrastra fuera de la habitación
-recuerda, que no sospeche nada- Me lo repite por centésima vez
Planeamos una fiesta sorpresa, en la cual va a ver pastel, vino, postres y decoración. Van a estar mis padres, Lucía, Tommy, Lana, Emma y obviamente los de la casa.
Entro de nuevo a la habitación, escucho la llave de la ducha abrirse. Alisto la ropa que voy a usar hoy y la dejo sobre la cama. Entro al baño y mientras Maya se ducha, yo me lavo los tientes.
-¿me pasas la toalla por favor?
-claro, pero primero deja me verte- corro la puerta empañada y la veo
Su cuerpo aun suelta vapor por el agua caliente, su largo cabello esta pegado a su espalda, brazos y senos. De las puntas de su cabello escurren gotas de agua y por todo su cuerpo resbala aun el agua.
-¿ya disfrutaste la vista lo suficiente?- pregunta con sus manos sobre las caderas
-no, pero tampoco quiero que nos retrasemos para ir al trabajo- le paso la toalla y ella la envuelve en su cuerpo
-gracias
Me da un suave beso y luego sale del baño. Me quito la ropa y me ducho, unos minutos después salgo y me visto lo mas rápido que puedo para bajar a desayunar.
-¿de verdad tienes que ir a trabajar hoy?- le pregunta Rubí a Maya
-obviamente- responde y cuando se da cuenta de mi presencia me sirve el desayuno. Le agradezco y me responde con una linda sonrisa
-pero es tu cumple años- se queja Rubí y Maya rueda los ojos
-que sea mi cumple años no quiere decir que deje mi trabajo botado- Maya vuelve a sentarse para terminar de desayunar
-como sea- Rubí se cruza de brazos
Terminamos de desayunar tomamos nuestras cosas y salimos todos de la casa, Rubí se dirige a la empresa, Eliot a recoger a Emma y yo para ir a llevar a Maya a su trabajo.
-¿nerviosa?- pregunto
-¿por decirle a todos lo nuestro?-pregunta de vuelta y yo asiento
-mas que nerviosa, estoy emocionada, por fin podre besarte cuando quiera
-y yo podre tocarte cuando quiera
-no, al menos no como aquel día en el lago- me regaña
-nadie se dio cuenta- me encojo de hombros
-pero pudo pasar- siento su mirada en mi
-pero no paso, así que deja de preocuparte por eso- llegamos a un semáforo en rojo. Me giro hacia a ella y la beso
-te amo
-también te amo- contesto de vuelta y vuelvo a conducir
-¿como vas con Lucia?- me siento curioso sobre el tema, se que para Maya fue diferente pero a la vez emocionante tener mas familia
-bien, aunque a veces es un poco incomodo, me pidió que la llamara abuela, le dije que no me sentía del todo cómoda
-tomate tu tiempo, no debe ser fácil. Sabes que estoy contigo, así que cualquier cosa que pase o que sientas puedes decirme, estaré ahí con un litro de helado de chocolate apoyándote
-lo se amor y gracias, eres el mejor- pone su mano en mi pierna y yo me estremezco
-¿sabes? Ahora que estoy contigo mi cuerpo se cree adolescente, así que con cualquier roce me pongo caliente- miro de reojo su mano en mi pierna y su risa llega a mis oídos
-ese si es un problema- desliza su mano hacia arriba, siento que mi cuerpo comienza reaccionar y mis músculos se tensionan
-no hagas eso a menos que quieras que salude a tu abuela con una erección que tu ocasionaste
-bien, ya me calmo
En un par de minutos llegamos al centro comercial, subo a dejarla en la boutique, charlo un poco con Lucia y voy a mi empresa.
Durante todo el dia Rubí me llama para saber si debe poner o no algunas decoración, que colores y que cosas le gusta a Maya y todo eso, ya se estaba volviendo estresante. Cuando llego la hora de salida, llame a Eliot para preguntar si estaba todo listo a lo que el respondió:-por supuesto que si, ¿que clase de decoradores piensas que somos?- hablamos un poco mas y luego colgué para ir por Maya
-hola amor- me saluda con un beso en los labios
-hola, ¿que tal tu día?- pregunto antes de subirnos al auto
-bien, Lucia me deseo un feliz cumpleaños y hace poco dijo que tenia algo que hacer y se fue- arranco el auto y salgo del estacionamiento para dirigirme a casa
-me alegro- respondo y ella toma mi mano
-¿que tal estuvo tu día?- pregunta de vuelta
-bien, pero se comienza a poner mejor porque ahora estoy con tigo- le saco una sonrisa
-uy pero que dulce, creo que me vas a dar diabetes- hace una mueca y yo suelto una carcajada
-mataste mi romanticismo- me quejo divertido y ella ríe
-lo siento cariño
-no te preocupes- respondo sonriente
-¿mañana podrías acompañarme a un sitio?- pregunta algo dudosa y nerviosa
-claro, ¿a donde quieres ir?- pregunto curioso
-mañana te diré
-de acuerdo, señorita misterio
En pocos minutos llegamos a casa, espero que todo este listo y organizado. Nos bajamos del auto abro la puerta y entramos.
-¡sorpresa!- gritan todos al ver a Maya
-¡oh mi Dios!- se tapa las mejillas con las manos- gracias- agradece y todos pasan a saludarla y darle un feliz cumple años
-tus regalos esta en la habitación de Jaden- le avisa Rubí