Best Bad Move

Capítulo 5

Me desperté sola está vez, Sabrina no me levanto como ayer. Escogí la ropa que me voy a poner y entre al baño para hacer mi rutina diaria. Cuando acabe de arreglarme salí de mi habitación, para buscar a mi compañera.

Para mi sorpresa, ella no está, ¿será que se fue sin mí?, mire la hora en mi celular todavía es temprano, así que mejor descartó esa opción.

—Aquí estoy-dijo Sabrina entrando con una caja—. No es para mí, lo fui a recoger porque tú, duermes como una roca

Ella me entregó el paquete, leí la etiqueta, viene desde New York de parte de Lydia García, lo puse en la mesa y lo abrí.

— ¿Qué es?—preguntó mi compañera

—Bueno aquí hay una carta

Tome la carta y empecé a leerla en voz alta:

Hola Nadine

Es mi segunda semana en la Academia de Artes de New York, la verdad es un sueño hecho realidad, no puedo quejarme de casi nada. Sin embargo debo admitir que quisiera un cambio de compañera, ya que es muy ruidosa y la verdad no nos llevamos bien.

En fin, te escribo para agradecerte por las zapatillas de ballet que me regalaste, en verdad me encantaron. Sé que lo hiciste con mucho cariño, sin embargo yo también tengo un regalo para ti, como sé que te gusta tomar fotos, espero que te guste está cámara instantánea.

Espero que estés bien y no olvides de mandarme fotografías.

Lydia

Saqué de la caja una cámara lila, me encanta, no lo puedo creer, jamás pensé que ella haría algo así por mí.

— Se supone que no tenías mejores amigas

—Lydia y yo, éramos unidas sin embargo ella tenía otras amigas a las cuales veía más seguido

—Entiendo, yo no he visto a mis amigas desde la graduación

—Podrías organizar una reunión el fin de semana

—Tienes grandes ideas

Después de eso sólo comimos cereal con leche, ya que se nos hacía tarde, lavamos todo, tomamos nuestras cosas y salimos. Subimos el auto y nada mejor empezar el día con música, así que prendí el radio.

Cuando llegamos, me bajé y fui corriendo al salón de clases, rayos solo hay un asiento a lado del cerebrito, me senté y el rodó sus ojos con un gesto de fastidio.

Escuchaba al maestro de teoría en comunicación, de que se trata y de donde se originan los medios, empecé a tomar nota y Theo regresó a ver mis apuntes, ya que no alcanzó a escuchar lo último que había dicho.

—Al parecer el cerebrito, no es tan perfecto como pensé—dije con intención de que se molestara

—Y tu letra no están legible, como imaginaba— me espetó

Cambie de hoja rápidamente cuando lo dijo y seguí como si nada, anotando unos cuantos detalles que había olvidado escribir, junto con la tarea que nos acababa de dejar el profesor.

Finalmente luego de dos horas largas, tuve una hora libre, salí al campus para comer algo y alguien llegó corriendo hacia mí.

—Sabrina, un día de estos me vas a matar de un susto, ¿qué haces aquí?

—Yo también tengo horas libres y debo decirte algo

—De acuerdo, empieza a hablar

— ¿Recuerdas que me diste una idea, para hacer una reunión con mis compañeras?— preguntó y yo asentí— Pues las invité mañana y necesito que me ayudes a organizar todo, por favor

—Me recuerdas en que día estamos

—Ayer fue el primer día de clases, ósea Jueves y hoy es Viernes, mañana Sábado

—Ya entendí, está bien yo te ayudo

—Eres la mejor compañera del mundo mundial

Sabrina todavía tiene tiempo libro, así que comimos juntas, sin embargo ella no para de hablar de los preparativos para la reunión de mañana. Escuché algo sobre comprar comida y me concentre en mi emparedado, la verdad tengo mucha hambre.

—No quiero asustarte pero tenemos un minuto para correr a clases, te veo a la salida

Salí corriendo y aunque quise llegar lo más rápido posible, sólo hay un lugar a lado de él. Creo que nadie quiere sentarse a lado de él porque es un poco pesado, de ahí podría ser un beneficio estar sentado al lado del cerebrito del salón.




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