Capitulo 59

Hoy era la pelea de Blake, el estaba en su camerino alistándose recibiendo masaje, la tensión estaba al máximo, pues hoy se decidía el segundo semi finalista para las ligas mayores, y aumentando que Máx quería hablar con nosotros al terminar la pelea, todos nos encontrábamos en nuestro lugar, Jhon estaba a lado mío, y Alex de lado de Yess, Oscar y Vane juntos, esos no se separan.

Hoy Blake se enfrentaba a un chico llamado Aldo Gulian, que era uno de los cuales también acababa de subir a boxeador profesional, imaginé la tensión que Blake sentía y nosotros también. 

Queríamos ver a Blake campeón.

– ¡Buenas noches! ¡Señoraaaas y Señoooooores! – el mismo presentador de la otra pelea subió al ring. – ¡Hoy tenemos la seguuuunda semi finaaaal! – hablo por el micrófono y todos los presentes incluyéndonos estallamos en gritos, aplausos y chiflidos. – ¡De mi lado izquierdo Aldooooo Guuuuuuliaaan! – este señalo hacia su lado izquierdo, por el pasillo apareció un tipo con una estatura más grande que Blake, y eso hizo que todos nos observáramos. – ¡Y de mi lado derecho Blakeeeeee La Bestia Wiliaaaamssss! – los chicos y yo saltamos de nuestro lugar para gritarle a Blake, este mientras caminaba por el pasillo río por el show que estábamos haciendo.

El referí los llamo a ambos al centro para decir las reglas. Chocaron guantes y cada uno se fue a sus esquinas para prepararse.

La campana sonó indicando que el primer asalto comenzaba. Ambos se pusieron en guardia daban vueltas esperando a que el otro diera el primer golpe, Blake fue el primero en dar el primer golpe, Aldo logro esquivarlo y le dio un fuerte golpe a Blake en el estómago. Todo el estadio quedó en silencio.

Blake tratando de recuperarse le dio un golpe a Aldo en la cíen, esta pelea no sería fácil y eso comenzó a preocuparme. 

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Séptimo round y último, nadie podía más con la tensión, era el último asalto y Blake iba perdiendo a menos de que Blake lo noquee, pasara, si no lo logra no podrá ascender. 

– ¡Vamos Blake! – grito en apoyo Jhon.
– ¡Tu puedes hermano! – fue el turno de Alex.
– ¡Si no ganas Nat de va a ir con Máx! – volteé a ver a Yess, por el comentario que acababa de lanzar. 
– ¿Cómo se te ocurre decirle eso Yess? –  me cruce de brazos.
– ¿Quieres que gane, no?
– Chicas, chicas miren. – Vanessa interrumpió nuestra pequeña riña para hacernos ver hacia el ring, donde Blake daba golpe tras golpe, sin darle oportunidad a Aldo de que regresara los golpes.
– ¡10! – quedaban diez segundo para que se acabara la pelea. – ¡9! –maldición Blake. – ¡8! – Blake dejo que su oponente le soltara un golpe y este lo aprovechó para darle un fuerte golpe en la nuca. Todo el estadio quedo en silencio...El referí comenzó a gritar.
– ¡10...9...8...7...6...5...4! – que no se levante. – ¡3...2...1! –  el referí alzo el brazo de Blake.
– ¡El ganador señoras y señores Blake la Bestia Wiliams! – todos nos echamos a correr hacia el ring del cual Blake bajaba, en cuanto lo vi salte hacía el.
– ¡Nat! – el me recibió y me tomo en un abrazo. 
– ¡Blake eres semi finalista! ¡Felicidades amor! –  grite aún en el abrazó.
– ¿Cómo me dijiste? – Blake se separo de mi, sólo un poco para verme a la cara.
– Este...yooo...–  tartamudee.
– Me dijiste amor, ¡Me dijiste amor! – Blake comenzó a darme de vueltas aún en sus brazos. – ¡Te amo, te amo! – reí, Blake al fin había dicho esas dos palabras que causaron en mi todo una revolución de emociones en mi cuerpo.

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Estábamos en la casa de Blake, más bien en el estudio del papá de Blake, esperando a que Máx hablara.

– Tienes que venir conmigo Blake. – Máx al fin hablo.
– ¿Qué? –ambos hablamos al mismo tiempo. 
– Ya se quienes fueron los causante de la muerte de nuestros padres, por mi los acabaría pero se que tu también los quieres vengar. –  ¿Irse?
– No me puedo ir, Nat me necesita.
– Tiene a su hermano, no te pediría ayuda pero...– Máx saco una folder amarillo y se lo entrego a Blake. – ábrelo. – incitó, Blake le hizo caso y saco una fotos donde aparecía Chace en un almacén con otros dos tipos. – Es Chace con los jefes de la mafia Irlandesa. – Blake se puso serio y rígido. – Si aceptas venir te espero mañana en el aeropuerto de New York, me voy tienen mucho de que hablar. –  Máx se acercó a mi y yo solté la mano de Blake para ir en busca de los brazos de Máx. – adiós Nat.
– Adiós Máx, cuídate mucho. – lo abracé.
– Yo siempre. – beso mi nuca y se soltó de mi agarre para dirigirse a la salida. – Espero verte, ocho de la mañana. – y salió, gire para ver con los ojos obscuros de Blake que destellaban preocupación.

– Nat... – intento hablar Blake.
– Se lo que vas a decir. – agache mi cabeza.
– Vamos arriba. – Blake me tomó de la mano y subimos a su habitación, en cuanto entramos Blake me tomo de la cintura y se puso enfrente de mi. – Tengo que ir, pero también tengo que estar contigo.
– Blake, Oscar puede cuidarme. – susurré. – El trabajaba para un mafioso, no se para cual, el no me lo ha dicho, estaré bien, esta mi hermano, Alex y Jhon se que los mandaras a cuidarme. – el sonrió.
– Volveré lo más pronto posible, lo prometo, Te amo Nat. – Blake busco mis labios y yo acepte los suyos gustosa, no lo quería dejar, pero eran sus padres y se podía encarcelarlos junto con Chace nos libraríamos de todos los problemas que nos asechaban.
– Te amo Blake. – el sonrió ¿cuándo ocurrió todo esto?