Capitulo 1

          Mentiría si dijera que me despierto con el cantar de los pájaros... Ja, eso solo pasa en las películas de Disney o por lo menos no sucede en mi casa, puedes despertar con todo menos con eso, con lo que me despierto es con el muy detestado y odiado por mí, el sonido de la alarma; que me indica que ya son las 5:30am y que tengo que alistarme para ir a la preparatoria "Dark Nith".

          Si lo sé, estúpido nombre, llevo tiempo queriendo saber a qué se debe, más concretamente desde que me dijeron hace mes y medio que tendría que estudiar allí, aun no le encuentro el sentido, porque ponerle a una preparatoria "Noche Oscura" ¡¡¡Explíquenme!!! En fin, no es mal de morir.

          Me paro, voy al baño y hago mis necesidades básicas (no creo que quieran que se los explique más detalladamente, pero si es así, no sean metiches, no tienen suficiente con que les esté contando mi historia, sino que tan bien quieren que les diga cómo me cepillo... eso es abusar), ya duchada y oliendo rico, me pongo ropa interior y una camisa negra que me llega hasta los muslos; salgo de mi refugio alias mi habitación dirigiéndome al de mi hermana, a ver si la dormilona se paró. Y que creen, ding ding, acertaron sigue durmiendo como una perezosa, ayer la muy desgraciada salió de fiesta aun sabiendo que hoy empezaban las clases. Voy al baño y lleno un vaso con agua para volver al cuarto.

          - Sof, despierta - digo zarandeándola, lo único que obtengo es un gruñido, parece animal - Se hace tarde ¡¡levanta!! – insisto de nuevo, pero nada, sin resultados - Te lo advertí

          Sin más le vacío todo el contenido del vaso en la cara, echándome para atrás por... seguridad.

          - ¡¿Estás loca?! - me vocifera gruñendo - Me puede dar hipotermia o aun peor ¡me pudo dar un infarto! – agrega levantándose de la cama, no sin antes regalarme una mirada de odio.

          - Sorry, not sorry... son las 6 y te recuerdo que la prepa queda a 40 minutos caminando - le digo saliendo para dirigirme a la cocina - Ya que cierta señorita descompuso el auto - agrego casi gritando desde las escaleras.

          - ¿Y que con tu moto? - me grita devuelta.

          - Está en el taller por mantenimiento - le respondo – Así que olvídate de eso y alístate mientras preparo el desayuno.

          Empecé a hacer el desayuno, puse la cafetera y a tostar pan; serví el café en dos tazas agregándole leche y azúcar, coloqué las tostadas en un plato junto con mermelada y nutela.

          - Ya estoy – anuncia Sofía sentándose en la isla de la cocina - Tengo hambre.

          - ¿Vas a ir vestida así? - cuestiono al ver cómo iba; lleva puesto un short jean azul marino, una camisa blanca volada con una chaqueta de cuero negra y unos botines negros de tacón - ¿No crees que muestras una imagen poco agradable?

          - Cambiamos de prepa, no de ciudad - me responde poniendo los ojos en blanco a lo que yo me encojo de hombros – Voy a ir así, ya me cansé de que me vean como la dulce y tierna de las mellizas Baker - agrega un poco molesta terminando de desayunar y saliendo de la cocina.

          Os explico Sofía y yo somos gemelas, aunque no somos exactamente igual, mientras ella tiene el cabello castaño claro con reflejos amarillos, yo lo tengo castaño oscuro, ambas lo tenemos semi-ondulados y largo, ella es más bronceada que yo, aunque ambas somos de tez blanca, en estatura medimos lo mismo, 1,68 metros... Ah, por poco y lo olvido, mis ojos son grises mientras que los de mi hermana son hetero cromáticos central, verde en su mayoría grises por los bordes con motas doradas. En personalidad soy más reservada y algo fría, lo opuesto a de Sof hasta ahora, al parecer, digamos que mucha gente se ha aprovechado de que sea abierta con las personas, lo más reciente fue su ex novio patán, Víctor Ferrer (que por desgracia es primo de mi mejor amigo, Damian), la engaño con la zorra (mis más sinceras disculpas a esos animales, pero no se me ocurre con que otra cosa compararla sin insultar los sentimientos de los animales) de Britany Smith hace dos meses atrás, desde entonces se prometió a si misma que ya no sería dulce y tierna ahora será fría toda una badgirls; vamos a ver cuánto dura con esa actitud, solo espero que no se convierta en una perra sin corazón, ya que no quiero que tenga problemas.

           - Por cierto, llame a Damian y dijo que a las 7:15 am nos pasara a buscando - me informa Sof a lo cual hago un esfuerzo en no rodar los ojos, que vaga me salió la niña, no es que yo sea muy activa que digamos - De nada.

          Subí al cuarto a terminar de arreglarme, ya que se está haciendo tarde y odiaba que esperaran por mí. Me puse un jean azul oscuro rasgado en las rodillas, una camisa blanca sin mangas con una chaqueta jean y unas vans negras; me deje el cabello suelto para finalizar con un gorro de lana gris, apenas me maquille ya que no me gusta mucho, algo sencillo. Justo a tiempo, suena como aparcan un coche y empieza a tocar el claxon repetidas veces.

         - ¡¡Beth!! ¡Apúrate que ya llego Damian y hasta que no salgas no dejara el fastidio! - grita mi hermana desde el porche - ¡¡Calla ya, aborto de mono!!

         - Todos sabemos que mueres por mí – replica mi amigo.

         Corrí agarrando mi bolso y mi teléfono, menos mal que acomode mi bolso ayer, porque si demoro más, los encontraría matándose entre sí, no es que no se soporten, pero desde lo de hace dos meses, se podría decir que las cosas han estado tensas... además a mi amigo le gusta molestar.