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Abadía Valkov
En los laboratorios, Boris observa nuevamente el vídeo de Black Dranzer. No esperaba aquella derrota. Sin embargo, no estaba molesto. Una malévola sonrisa adornaba su rostro, gracias al orgullo del bicolor al devolverle a Black Dranzer había decifrado el misterio sobre aquella Sirena.
— Te arrepentirás de haber dejado la abadía.
Biovolt no aceptaba la traición, sobre todo Valkov. Por ello, había ordenado a la peliblanca reunir a los Demolition Boys, tenían ordenes de capturar las bestias bit de los Bladebreakers, en especial la bestia bit europea.
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En la profundidad del espeso bosque, los Bladebreakers deciden tomar un descanso, habían tenido una dura batalla de entrenamiento contra los europeos, quienes en ese momento se encontraban recogiendo leña para la chimenea. Al menos hasta que uno de ellos se distrajo patinando sobre el agua helada.
— Te vas a lastimar — advierte el escocés observando a la ojiazul deslizarse sobre el lago.
— Esta bien — dijo deteniéndose
Aquello sorprendió al escoces, quien la miró extrañado pues la ojiazul no solía hacer caso. Una vez que patina hasta llegar donde se encontraba su conpañero, él observa como lejos de acercarse a la orilla, la europea se detiene a pocos centímetros mirándolo fijamente.
— Me ayudas? — dijo al dirigir su vista hacia el escocés esbozando una inusual sonrisa mientras estiraba su mano
Tras unos segundos de extrañeza, Johnny procede a dejar la leña para acercarse a la orilla y sostener con firmeza la mano de la ojiazul, quien al sentir el agarre, procede a tomarlo de ambas manos y jalarlo hasta atraerlo con ella al lago.
— Eres tan engañosa como Serenity
— Gracias — dijo observando como el escoces intentaba mantener el equilibrio para no caer, sin el equipo necesario le costaba encontrar una posición. Por ello, la oji azul se acerca hasta tomarlo de las manos entrelazándolas entre sí, ruborizando al escoces, quien tras un suspiro se deja guiar.
No le incomodaba el contacto.
De esta manera ambos europeos patinaron juntos.
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Hotel Svetlana
Un joven de cabello bicolor y ojos carmesí se encontraba buscando a sus compañeros. Días habían pasado desde lo ocurrido en el lago Baykal, donde tras abandonar a BlackDranzer y dejar la abadía, había decidido regresar con su equipo. Sin embargo, en aquella amplía habitación no había rastro alguno de ellos. No podía evitar preguntarse. Dónde podrían estar? Sin más procedió a dejar sus maletas sobre una de las camas. ARecorrió la habitación hasta detenerse en una pequeña mesa, sobre ella se encontraba una nota, con extrañeza lo tomó, en ella el de lentes le comunicaba que se encontraban en el bosque, habían decidido entrenar el fin de semana en aquel lugar. Debían estar en buena condición si querían enfrentar al equipo Ruso.
— Te estaremos esperando. — terminó de leer el bicolor para posteriormente centrar su vista en un pequeño mapa. — Fueron al bosque Gorki.
El bicolor observó con detenimiento el mapa. Aquel bosque estaba en las afueras de la ciudad, a sus alrededores yacia un lago congelado, un poco más lejos yacía una fábrica abandonada perteneciente a Voltaire... Tenía un mal presentimiento.
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Bosque Gorki
El almuerzo estaba listo, Max había procedido a llamar a los europeos quienes aún se encontraban patinando, esta vez el escoces con total estabilidad. Sin embargo, al salir del lago congelado, la ojiazul resbala, siendo sujeta por el escocés quién la sostiene atrayéndola a su cuerpo en un inesperado abrazo.
— Estás bien? — preguntó
— Sí — dijo pasando sus manos por los hombros del escocés para recuperar el equilibrio.
Al levantar la vista las orbes cielo de la europea chocan contra la profunda mirada del otro, percatándose que estaban demasiado cerca, aquello provocó que ambos se miraran sonrojados, el escocés quiso decir algo pero es interrumpido por una gélida voz.
— Que bella escena
Rápidamente ambos se separan mirando con sorpresa a un joven de corto cabello pelirrojo y gélidas orbes árticos.

— Los Demolition Boys! — advierte Max
— Lamentamos interrumpir — una malévola sonrisa adornó el rostro de una bella joven de largos cabellos blancos
— Ustedes...— espetó el escocés poniéndose delante de la ojiazul
— Protegiendo a tu novia? — dijo con burla el pelirrojo — Es un poco tarde para eso.
— Qué hacen aquí? — interrumpió la ojiazul percatándose como el equipo ruso rodeaba la cabaña.
— No es obvio? — respondió ácido clavando sus orbes ártico en la europea, aquello le provocó un escalofrío. Algo no iba bien — vinimos por sus bestias bit.
Al percatarse de la situación, el resto de los Bladebreakers dejan la cabaña para hacerle frente al equipo ruso quienes sacan sus lanzadores apuntando directamente a ellos. Lo quieran o no tendrían que luchar.
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— Vaya, así que Kai no está con ustedes — dijo la peliblanca quien se encontraba luchando contra el chico de gorra alrededor de la cabaña. Su objetivo era el bicolor pero para su sorpresa no se hallaba con los Bladebreakers
— Qué quieres con él?! — preguntó Kenny
— No es asunto tuyo — dijo evadiendo el ataque de su oponente — Dónde esta el traidor, niño?
— No tienes porque saberlo!— exclamó Tyson golpeando su blade — Vamos Dragoon!
El japonés trataba de tomar el control de la batalla pero aquella enigmática peliblanca era demasiado fuerte, sabía moverse perfectamente entre la nevada. Si no quería perder a su bestia bit debía estar en guardia. Por otro lado, no muy lejos de ahí sus compañeros no se encontraban mejor, los Demolition boys habían logrado dividirlos por diferentes caminos del profundo bosque, Max y Rei se encontraban combatiendo contra Ian y Spencer en las orillas del lago congelado, Aria y Johnny se encontraban en lo profundo del bosque luchando contra Tala y Bryan.