Capítulo 3

¿!Ella!? 
 

Sofia
 

Cómo de costumbre iba nuevamente camino a la escuela, mi rostro iba un poco demacrado y mi uniforme no iba del todo planchado que digamos. 
 

Intenten reconciliar el sueño ayer varías veces pero este nunca llegó. Tenía los párpados inchados, lo labios morados, la nariz roja y en lo único que pienso es que tendré que verle la cara a Rafael y Victoria. 
 

Siendo honesta no creo estar lista para eso. 
 

— Sofía — llamó Victoria detrás de mí —
 

¡Oh no! 
 

— por favor detente — pidió y yo apresure el paso — 
 

— me detuve en seco cuando se paro frente a mí — dame un chance para explicarte todo.

En ese momento le frunsi el señor e intente evadirla pero esta no me dejaba pasar. 
 

— no hagas esto tan difícil Victoria, no quiero escucharte, se lo que vi y... No sabes como me duele. 
 

— es que no quiero perderte como amiga 
 

— eso debiste pensar antes de hacer lo que hiciste 
 

La empuje bruscamente alejándome de ella. 
 

(***) 
 

— Sofía — dijo Nicoll apenas me vio —
 

Ella al igual que Ritzy se levantaron de la banca y se apresuraron a llegar rápido a mí.
 

— ¿por qué no atendiste nuestras llamadas anoche? — preguntó un tanto preocupada Nicoll —
 

— lo que pasa es que... — me comencé ahogar en mis propias palabras —
 

— ¿esto tiene que ver con Rafael, verdad? — preguntó Ritzy y yo asentí — lo sabía — dijo un tanto molesta - 
 

— ¿se puede saber con quién fue? —preguntó Nicoll —
 

— Victoria 
 

Ambas abrieron los ojos de par en par para finalmente darme un corto abrazo. 
 

— de verdad lo sentimos Sofía — musito Ritzy — 
 

— sabes que cuentas con nosotras para lo que sea — hablo Nicoll — 
 

— gracias — susurre, limpiando una pequeña lágrima que resbaló por mí cara - de verdad me alegra contar aún con su amistad y ojalá con.... 
 

De pronto un doloroso recuerdo se vino a mi memoria. 
 

Recuerdo... 
 

— ¿es necesario que dejemos ser de amigos? — replique al borde del llanto —
 

— Sofía entiende, será lo mejor — contestó —
 

— ¿lo mejor? — pregunté confundida — ¿porqué sería lo mejor que tú y yo dejemos de ser amigos si nos conocemos desde niños? 
 

— entiende de una vez, y no lo repetiré — fulmino molesto — no quiero ser tu amigo... he cambiado, tu haz cambiado, todo ha cambiado y nuestra amistad — paro de hablar para tomar una bocanada de aire — por favor no me odies pero es que tú no sabes que como amigo te he fallado — dijo antes de marcharse —
 

— de qué hablas, a que te refieres — pregunté un tanto confusa pero este solo respiro hondo y pasó a mi lado ignorandome por completo —
 

Fin del recuerdo. 
 

— ¿hablas de Lenin? — preguntó Nicoll y yo asentí — yo también lo extraño — dijo con una cierta sonrisa en el rostro —
 

— ¿no lo odias por lo que te hizo? — me anime a preguntar y ella simplemente negó —
 

— jamás podría odiarlo, no después de tantas sonrisas. 
 

(***) 
 

Caminaba acompañada de mis dos mejores amigas en la hora de receso, hablábamos de cualquier tema con el objetivo de hacerme olvidar lo que había pasado, y vaya que lo estábamos logrando. 
 

Admito que me preguntaba dónde estaba Rafael pero a la vez intentaba no verlo, me lo encontraba en los pasillos pero este por surte no me miraba así que con mis amigas tomábamos otro camino. 
 

— ¿qué les parece si esta tarde tenemos una loca sesión de selfies en el parque, eh? — propuso Nicoll —
 

— a mi me parece bien - contestó Ritzy —
 

— claro, cualquier cosa por entretenerme — contesté — 
 

— si y quizás también vayamos a.... — Nicoll no termino de decir la frase ya que se entretuvo con algo o alguien que estaba detrás de nosotras —
 

Giramos y nos percatamos de la presencia de una de las personas que creí que jamás volvería a ver en mi vida. 
 

— ¿es Kenia? — preguntó Ritzy y Nicoll asintió —
 

— sí qué ha cambiado — agregó Nicoll —
 

Se dirigía hacia nosotras a una larga distancia pero se podía ver el gran cambio que ha hecho. 
 

Ha bajado de peso, tiene más curvas, su cabello está super largo y ese traje de dos piezas le queda bien. 
 

Nunca creí decir esto pero... 
 

— que bonita esta — musite —
 

Cómo de sorpresa, se detuvo frente a nosotras saludando únicamente a Nicoll con un fuerte abrazo y beso en la mejilla para luego seguir su camino. 
 

— ¿qué fue eso? — preguntó Ritzy — 
 

— ¿te llevas con ella? — pregunte un tanto confusa —
 

— pues... Como ya saben — sus mejillas se tornaron rojas — es bueno hacer amigos ¿no? 
 

Ritzy y yo la fulminamos con la mirada. 
 

No era que la chica nos cayera mal pero en la escuela se podría decir que en ciertas ocasiones pasamos por bulling de parte de ella.