XII

AARON.

Cuando entramos al salón todo se ve demasiado aburrido, todas la decoración está hecha de blanco y dorado y todo está en absoluto silencio.

—¿Esto no era una fiesta?—Stephen mira hacia todos lados analizando todo.

—Bueno, aquí todos son muy aburridos, pero supongo que después de que dija el maldito discurso nos vamos—Muchas y chicos se acercan a saludar a Alinet.

—No decías que no tenías tantos amigos, chica de el batido de fresa sin mucha azúcar todo el mundo te saluda—Se encoje de hombros.

—Por compromiso. Todos aquí son unas víboras.

Josh, el imbecil que molestaba a Alinet pasa enfrente de nosotros con dos chicas. Dios es un asco, su cara aún se ve con algunos moretones.

—Oye Aaron, él no es el idiota que golpeamos hace unas semanas—Le lanzó una de mis peores miradas.

—Ohh, es un secreto. Lo siento—Adam le da un manotazo el la cabeza.

—Bueno, ahora ya no lo es

—¿Fuiste tú?—Alinet me golpea el brazo—Por supuesto fuiste tu, por eso traías un golpe.

—No, para tu información él no me toco ni un pelo. El golpe fue de otra cosa.

—Okey..... —Un chico chico se acerca y la abraza por atrás. 

Volteó a buscar a los chicos  ya que esto es algo incómodo pero no hay nadie.

—Hola mí amor—ella simplemente se ríe. El chico es alto pero no tanto como yo y de el color de su piel es algo oscuro.

¿MI AMOR?.

—Hola—el me mira a mi.

—Un gusto soy su futuro novio, esposo y padre de sus hijos¿y tu eres?—Me extiende la mano.

—Aaron—Miro su mano—Alinet voy a buscar a los idiotas.

—Oh, si yo voy contigo tengo que practicar el discurso. Un gusto verte David.

—El gusto es mío florecíta.

¿Florecíta?, que horrible apodo.

Ella me toma del brazo y nos alejamos del chico.

—Creí que no tenías novio.

—No lo tengo. David es solo un chico. De hecho es la única persona que soporto de aquí.

—Ahh.

Vemos a Stephen y Adam con un grupo de chicas.

—Wow, ellos si que no pierden el tiempo.

—POR FAVOR TODOS TOMEN ASIENTO EL EVENTO ESTA APUNTO DE COMENZAR.

Los chicos se acercan y nos sentamos en las mesas, Alinet sube al escenario donde se encuentran todos los alumnos que están apunto de graduarse. Pasa la. Ceremonia y es hora del discurso.

—Ahora la señorita Alinet Allen.

Alinet se ve nerviosa, esta moviendo mucho las hojas que tiene entre sus manos con el discurso escrito.

—Bueno..... En esta escuela todos hemos pasado por cosas muy buenas, he-hemos aprendido tanto y—Lee las hojas y después a mi y las tira al piso—Una vez alguien me dijo que en este mundo todos somos unos hipócritas, yo creí que solo era demasiado grosero, pero llevo conociendolo algo de tiempo y ahora se que es cierto prefiero mil veces que me dijan la verdad que se que va a doler a una mentira. Así que no quiero terminar siendo una hipócrita—se ríe—DIOS, odio esta maldita escuela, ¿pero saben que odio aún más?, a las malditas personas que están dentro de ella, todos con sus perfectas sonrisas juzgandote, creyéndose que son perfectos solo por que usan ropa de marca. Pero mierda odio aun más al profesor Patrick, por que por su maldita décima—una mejer se acerca a quitarle el micrófono pero no se lo da y la mujer se lo intenta jalar—Ya voy a terminar. En fin los odio a todos y espero no volverlos a ver. Excepto a él conserje pedro, a él ojalá este bien y que su esposa se recupero—se baja corriendo y llega a donde estamos.

—Vamonos, corran—Los tres salimos detrás de ella, pero antes Adam se lleva la botella de vino que está en la mesa.

—No creo que la necesiten—se defiende cuando lo miramos. Salimos corriendo del salón y subimos a la camioneta. Fue bueno que le dije al chófer que la dejara.

—Dios, chica te odoro—Stephen le palme la espalda.

—oficialmente esta graduada ¿que se siente?.

—Igual que ayer—se ríe—Quiero hacer algo—todos la miramos.

—¿Qué?—le pregunto.