Alinet.
—¿estas segura de que te quieres bajar?—Aaron me pregunta al llegar a la entrada de mi casa.
—No—el me mira, yo solo le sonrió—Tranquilo, Es mi casa no me va a pasar nada.
—No es eso, es solo que parece que quisieras estar en todos lados menos aquí—señala la entrada de la casa.
—Quisiera estar en todos lados menos aquí—Me encojo de hombros.
—¿Donde quieres ir justo ahora?—me mira directo a los ojos.
—Lejos—su mirada pasa de mis ojos a mis labios, regresa rápido a mis ojos. Entonces enciende el motor y sale de la calle—Oye, ¿a donde vamos?.
—Lejos—Me sonríe.
—Estás loco. Tu enserió quieres que mi padre me mate. No he ido a mi casa desde ayer.
—¿Quieres que me regrese?—señala hacia atrás con una sonrisa burlona.
—No.
[...]
—Oye, ¿Por qué no me cuentas algo de tu vida?—él me mira rápido y después regresa su mirada ala carretera.
—¿Qué quieres saber?—me encojo de hombros.
—No se, lo que tu quieras.
—Me llamo Aaron y mi color favorito es el negro—Lo miro mal y el se ríe—¿ Qué? Tu dijiste que lo que yo quisiera.
—Si idiota pero eso ya me lo dijiste, no se cuéntame algo más profundo.
—¿Profundo?.
—Sip.
—Pues, mis padres murieron cuando tenía 10 años, estuve un año en una casa hogar, hasta que llegó el hermano de mi madre reclamando mi custodia—parecía tranquilo con la mirada perdida en la carretera, pero sus manos estaban muy apretadas al volante.
—Y que más......
—Ya es todo ¿ a donde quieres ir?.
— Sorprenderme.
Editado: 22.12.2019