Blanca Corazones

La voz del pasado incandescente

Mi nombre es Marvolo, nací un 11 de septiembre de 1972 durante toda mi vida siempre lo tuve todo, era el más inteligente de mi generación, el más astuto y tengo que decir que muy manipulador, físicamente era creo que bello, siempre cargaba una maleta en mis espaldas, nunca me peinaba y me gustaba la ropa ancha y por ser tan frio me llevo a odiar a la humanidad, todos para mi eran unas sangres sucias, no me apetecía en lo absoluto con gente de mi edad todos esos jóvenes que se creían amos y señores del mundo, no tienen ni la menor idea de cuánto es la raíz cuadrada de 20 y aun así creen que ellos cambiaran al mundo, generación de bestias son peores que todas las demas generaciones anteriores, tirando piedra y matando al inocente no cambiaran al mundo pero nunca entenderán eso, ni mucho menos estando de un lado de la política equivocada, más aun así en mi vida solo había una amiga no más la señorita azul su nombre no es azul obviamente pero yo le decía así porque su color favorito era el azul también el mío por cierto de hecho por eso empezamos hablar solo porque nuestro color favorito era el mismo, yo siempre la tuve a ella por encima de todas y creo que ahora que estoy en el limbo a ella es la única que extraño, nunca me intereso hacer amigos pues siempre supe algo, quien es amigos de muchos, ni de él es amigo. Y mucho menos me intereso el amor incluso muchas veces humille a las personas que se me trataban de acercar, muchas veces lastime a muchos y aun así nunca me importo no tenía ni a más mínima pisca de amor por alguien que no fuera mi amiga la señorita azul, pero la vida me hizo así en especial desde mucho antes que llegara la señorita azul tuve una amiga la cual ni me gustaría recordar, pero ella se llama Marisol, era muy tierna demasiado dulce en verdad y siempre me trato de una manera muy bonita más sin embargo ella tuvo un novio el cual la hizo cambiar se volvió más fría, más agresivas más distante conmigo, y ella me empezó a tratar mal muy mal pero aun así yo nunca le puse atención pero no fue hasta que en una noche el enojo contenido de tanto tiempo exploto y le dije tantas verdades que la muy burra que se hacia la indomable lloro peor que un niño, después de eso solo me sentí utilizado, humillado por ella y nunca más le volví hablar, y así pasaron los años y todo era bello para mi parecer, más ella apareció, esa mujer Blanca que volvió mi vida una correría simplemente me volvió loco de amor por ella nunca había sentido cosas así por alguien, en ella mi corazón busco una manera de dejar de ser tan frívolo y macabro pero me equivoque ella era como un libro de hadas con una portada muy bella pero su contenido era muy siniestro, de que me servía estar tan cerca de ella pero a la vez tan lejos pero el tiempo me volvió a confirmar algo, la mujer bella y astuta es un engendro de satanás, la mujer bella solo busca complacer al mundo y al ser inteligente se creerá superior a sus iguales, y ahí me salve de caer en sus garras, más aun así el tiempo y el destino me golpearon más y más, yo jure que jamás iba a sucumbir ante una mujer en el aspecto del romance, pero a todo santo le llega su día, ella tenía los “amigos” que la belleza, la fama, el dinero, le pueden dar alguien pero cuando ella mostro su verdadero rostro a las personas por más de que estas fueran una total basura no podían estar cerca de ella y se alejaron de ella, yo estuve para consolarla más ella nunca aprecio mi cariño y amor por ella, cometí tantos erros en mi vida ser tan frio, tan malvado pero a la vez creer que una mujer como Blanca tenia solución, antes fue un prodigio que yo hubiera amado a una mujer como ella, de todas formas en mis 19 años de vida nunca aproveche nada de mis grandes facultades, era inteligente pero nunca use esa inteligencia para algo bueno antes la usaba para planear perversos planes contra las personas que odiaba, cuando era pequeño siempre pensé que todos eran mis amigos que ignorante fui siempre le di lo mejor de mí a las demas personas pero parecía ser que nunca era suficiente, yo siempre era el culpable de todo, cuanto hubiera querido alguna vez sentir lo que era tener el amor de una mujer lo más cercano que estuve fue siempre la amistad con la señorita azul la única persona genuina entre ese valle de hipócritas que rodeaban mi vida, mas tanto aprendí en mis cortos años de edad que llegue a la enigmática conclusión de que nunca ninguna mujer me amaría podía tenerlo todo pero aun así faltaba algo, y ese algo nunca pude comprender que era, en el bien habita el mal y ese es mi caso, tantas horas pensando en ella más nunca me prestó atención, tantas horas llorando y suplicando de que fuera mí y nunca paso, si tan solo ella me hubiera dado una oportunidad nuestros destinos hubieran sido muy diferentes, pero inclusive acá después de la muerte en el limbo eterno a causa de mis males la sigo amado y odiando al mismo tiempo podrán pasar mil años, pero aun mi amor seguiría intacto por ella todo esto paso por algo pienso yo, pero aun así el sufrimiento siempre fue mi amigo pero al final le debo muchas cosas a la sociedad, gracias a ella entendí que las peores personas viven detrás de las caras más inocentes y bonitas, también aprendí que porque ames alguien no significa que esa persona te amara a ti, el amor siempre es un arma de doble filo que premia al bello, afamado al “príncipe azul” pero mata al miserable siervo que pudo ser mil veces mejor que 1000 galanes, esa es mi historia poco interesante pero muy sufrida talvez en unos años mi simple recuerdo se pierda pero siempre habrá una persona como yo en el mundo, siempre abra blancas ovejas que el mundo quiera usar de sacrificio para el mismo pero los infelices de la sociedad siempre se les hará justicia, los apartados de la sociedad siempre serán engrandecidos en algún momento, y cada vez que un pobre, miserable, y usado hombre sea elevado a los más grandes honores mi historia se seguirá contando, cada vez que el perdedor se vuelva en el triunfador se acordaran de mi historia y mi muerte no habrá sido en vano, pues el secreto para que la sociedad no los utilice es simplemente seguir las palabras que el hombre más sabio de toda la historia dijo hace ya tantos años; amen a sus enemigos, oren por los que los persiguen, posiblemente morirán pero lo harán siendo felices y estando en paz con ustedes y con esta sociedad.




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