Saliendo de las clases, iba a ir directo a las duchas para bañarme pero recordé que ya me había saltado el almuerzo y debía ir a cenar por qué tengo que empezar a comer 3 veces al día, así que me pare en seco pensando en si hacerlo o no, estaba dudosa mordiendo mis labios con mis libros en las manos, cuando alguien me golpeó la espalda.
—Vamos a cenar beba —me dice Kaan seria moviendo la cabeza para que la siguiera
—Si Kaan —le dije sonriendo con alivio
Me tranquilizó bastante que ella me anime y me acompañe a cenar ya que así toda duda se disipó en mí y solo camine detrás de ella para que podamos ir a comer. Nos formamos en la fila y tomamos una charola para poder recibir la comida, cuando llegamos la señora Minerva se asombró al verme.
—¡Vaya, es la primera vez que te veo en otro horario que no es el desayuno! —dice asombrada
—He decidió empezar a comer más —sonrió —aliménteme bien por favor —le dije feliz
—Con gusto —pone en mi charola un poco de sopa de papas con fideos y un trozo de pan
Cuando Kaan y yo recibimos nuestra comida nos fuimos a sentar en una mesa, ella rápidamente empezó a comer en silencio, yo antes miré mi charola y respire fuerte tragando saliva para ayudar a mi mente a prepararse para comer, tome un pequeño sorbo de sopa que me lo pasé con algo de dificultad, pero a la final pude comérmelo entonces continué comiendo y poco a poco masticaba los pedazos de papa que iba agarrando con la cuchara; mientras Kaan me observaba feliz y asentía cada vez que llevaba otro poco de comida a mi boca.
—¿Cuántos años tienes niña? —me pregunta rompiendo el silencio
Me asombré ya que era la primera vez que me preguntaba algo sobre mí.
—Tengo 13 —le dije sonriendo
—Ella frunció el ceño ligeramente con asombro —¡que pequeña estas!
—Lo se jaja —me río nerviosamente —todas me han dicho eso, pero no sé porque se sorprenden tanto, no creo ser la única aquí con 13 años.
—Es porque —me responde rápidamente —la edad mínima de algunas chicas es 15 años, y al parecer tu sí eres la más pequeña y también creo que eres la primera que llega con esa edad.
—Ahh ya veo —dije mientras masticaba un poco de comida —es la edad que tiene Gery verdad, 15 años
—Si, ella llego aquí hace un año y yo hace dos, por cierto, yo tengo 17 años —me sonríe ligeramente
—Wao, eres mayor que mi —me reí.
—Más o menos, solo por algunos años —ve su charola —por cierto Noor me hablo de tu historia, espero que no te moleste eso
—¡Oh no, por supuesto que no! —dije negando con las manos —al contrario, me alegro que ustedes también sepan ya que son mis amigas
Kaan me sonríe y sigue comiendo, cuando me atreví a preguntarle algo.
—Oye Kaan —dije con timidez—¿Te llamas así, Kaan? Porque desde hace tiempo veo que todas te llaman de ese modo y me entró curiosidad de saber si ese es tu nombre real jaja
—Me sonríe y responde —No beba, es solo un apodo —masticando un pedazo de pan —mi nombre real es Gadea, alguien me puso ese apodo y desde allí siempre me gusta que me lo digan en vez de mi nombre real
—¿Ehh? —dije —¿Pero porque no usas tu nombre real?
—Bueno es sencillo —cambia su expresión a una sombría —no lo uso para recordar por lo que pase, lo que fui y lo que soy ahora y para recordarme a mí misma que jamás quiero volver a estar donde estuve antes.
—Asustada por su cara dije —Debió ser algo difícil para ti
—Lo fue niña en ese momento —me sonríe —tuve una relación bastante abusiva y pasé por muchos problemas con un tipo quien fue mi novio, estuvimos juntos 4 años en los que mi vida fue un infierno —dice con tristeza
—¡Oh, Dios mío! —dije poniendo las manos en mi boca —no sabía que habías vivido algo así Kaan —recordé lo que me había pasado a mí y sentí una punzada en el pecho —pero te entiendo y se lo que se siente vivir en una relación donde sientes que tú eres la única que das todo y la otra persona no, aparte abusa del amor que sientes por él.
—Estas muy pequeña para haber pasado algo así niña —me dice seria —siento lastima ya que nadie debería ser abusada de esa forma, a decir verdad, deposité mi confianza en ese tipo y lo único que hizo fue inculparme de sus pecados —se enoja y aprieta el pedazo de pan que tenía en la mano
Mientras escuchaba su historia pensaba en que tiene mucho en común conmigo y parece que por esa razón es bastante reservada y creo por qué ya conoce mi historia decidió sincerarse conmigo, es algo de lo que estoy agradecida, siento de alguna forma nos une más el saber la una de la otra, además de que si vamos a estar encerradas aquí por quien sabe cuánto tiempo al menos deberíamos conocernos mejor.
—Me parece injusto que tu estés aquí cuando es el quien debería estar pudriéndose detrás de las rejas —dije enojada con las manos empuñadas
—Jaja que ruda te ves al decir eso niña —sonríe —lo es, pero sé que cuando salga, no dejare que se vuelva a salir con la suya, créeme que obtendré mi revancha —me guiña el ojo — y espero que tu igual.
Me miró fijamente cuando dijo eso