Capítulo 76

—Supongo que no me prestó tanta atención, aunque le estaba contando lo que pasó ese día con demasiados detalles jaja —Haco vía a Ibai de reojo

—¿Es así? —le pregunto Ibai —¿Por qué no estaba escuchando?

—Cerca nuestro estaba Amanda hablando con su grupo, debe ser por eso que Peix no me prestaba atención en ese momento —le respondió

—Otra vez Júpiter Peix— pensé.

Ya intuía que alguien más estaba detrás de esto porque Amanda por si sola no es capas de hacer eso, no es su forma de acosar a otros, pero si es la de Peix; fui al aula ya que cuando busque a Amanda el estaba allí en su asiento como si nada viendo el celular y está vez no pienso solo hablar con el. Mientras iba de camino hacia allá iba apretando mis nudillos y dándole vuelta a mis muñecas para calentarlas ya que tenía pensado usarlas, también calenté mi cuello haciéndolo girar un poco de un lado hacia otro y pensando que me he oxidado un poco, hace tiempo no ejército como es debido y eso es peligroso en este tiempo porque si pierdo fuerza física me podrían dar una golpiza con facilidad, mis músculos están un poco más tiesos que antes así que debo hacer algo cuánto antes para resolver esto.

Llegué al aula y sin detenerme fui hasta donde estaba Júpiter sentado, me pare en frente de el y lo ví hacia abajo; en ese momento en el aula estaban también Lavinia y Nahuel comiendo juntos y fue cuando Lavinia me vio y movió la mano de Nahuel para que me vea ya que el también estaba con el celular en la mano mientras que con la otra comía y no prestaba atención a nada de su alrededor, el rápido alzó la mirada asustado, la vio y me miró; Peix se dio cuenta de que le hacía sombra y alzó la mirada ligeramente entonces sonrió y me miró completamente está vez.

—Vamos a hablar —seguía viéndolo —sígueme —le hice una señal con los ojos para que saliéramos del aula.

—El seguía sonriendo —como quieras, te sigo —se levanto de su lugar y fue atrás de mi.

Salimos del aula, Lavinia y Nahuel nos miraron y luego se regresaron a ver .

—¡Ay no! —dijo Lavinia asustada —¿Y ahora que pasó?

—Nahuel la miro con preocupación —seguro tiene que ver con… —miro a los lados y bajo la voz acercándose a Lavinia —Pandora

—¿Cómo? —dijo ella —¿Tiene algo que ver con esa tipa?

—Nahuel asintió —luego de la hora de matemáticas cuando anunciaron los resultados del examen quimestral ella salió detrás de Mayida, algo debe haber pasado.

—Entiendo, sabes que no estoy en tu aula en Matemáticas por eso no se que paso, mejor ve a ver qué va a pasar, así puedes evitar que ese animal le haga algo.

Nahuel asiente y sale de aula detrás de nosotros, cuando el salió, Lavinia se quedó preocupada, sintiéndose impotente así que miro lo que había acabado de comer que era un sándwich, un galleta y un jugo de naranja y le sobró una barra de chocolate así que se le ocurrió algo en ese momento, saco de su maleta unas notitas y escribió : todo estará bien; y también dibujo una carita feliz, lo pego en el chocolate, se levantó y lo dejo encima de mi pupitre y regreso al suyo de inmediato.

Peix y yo estábamos unas cuantas gradas abajo del aula, yo lo miraba de frente con las manos en los bolsillos de mi chompa.

—¿De que es lo que quieres hablarme?, debe ser muy importante ya que hasta te atreviste a sacarme del aula —dice burlándose

—Fuiste tu el de la idea ¿verdad? —estaba enojada.

—¿De que me hablas? —pregunta fingiendo ingenuidad

—Sonreí y mire la pared que estaba alado de nosotros —no me sorprende que te hagas el ingenuo cuando sabes muy bien de lo que hablo, pero te lo diré sin rodeos, tu fuiste el que le dijo a Amanda que tomara mis cosas ¿No es así?

—Jajaja ahh eso —empezó a sonreir —supongo que ahora ya no queda nada de tu mochila ni de tus cuadernos es por eso que vienes a mi ..

—Pues en esa parte te equivocas —lo interrumpí —afortunadamente tengo otros ojos aquí, y pude evitarlo.

—Dejo de reírse y se puso serio, miro hacia arriba y dijo enojado —Nunca hacen nada bien jaja, está bien, lo acepto, si yo fui —se pone cerca de mi cara —le dije a Amanda que quemara tu mochila, por dos razones: la primera es porque ella estaba enojada ya golpeaste a su amiga y la segunda es debido a que ambos necesitamos hacer que entres de nuevo en razón.

—Bien —asentí, mientras agarraba mi cabello con la liga que siempre llevo en mi muñeca y ajuste las vengas de mis brazos y mis muñecas — eso es todo lo que necesitaba saber, pero déjame decirte que son ustedes los que deben entrar en razón de una buena vez.

Me acerque a Júpiter separé mis piernas un poco, apreté mis manos para luego empuñarlas mientras lo mire a los ojos y entonces de un solo golpe y con un solo movimiento le di un puñetazo en el estómago sin fallar, al sentir mi golpe el se agacho en un instante tosiendo, me aleje de él unos centímetros estirando mis dedos y moviendo mi muñeca.

—Tú y los otros no escuchan nunca jaja, y ahora me doy cuenta que son más estúpidos de lo que pensé —lo miré de reojo y subí las gradas —te advertí que si te metías conmigo te ibas a arrepentir y agradece que fui suave contigo, pero no abra una próxima vez así que no fastidies porque no será como ahora.

Una vez que le dije eso, me fui al aula, Nahuel estaba viendo todo así que cuando vio que ya estaba subiendo las gradas rápido se fue, Júpiter se quedó allí agarrándose fuerte el estómago mientras trataba de recuperar el aire que le saque con el puñetazo que le metí entonces la campana sonó y todos empezaron a ir a sus aulas. Cuando entre al aula me fijé que en mi pupitre había un chocolate así que lo agarre y le saque la nota que tenía y la leí, negué con la cabeza, hice una mueca y la arrugue así que camine hasta el basurero y tire allí el chocolate junto con la nota y me senté en mi pupitre, saque mi celular y revise mis mensajes, tenía varios del grupo.