Capítulo 45

Los tres ¿?

Nomi

No es un día normal. El cielo truena y las personas se van alejando cada uno por su lado. Diman se fue hace cuatro días y me dejo a cargo, pero ¿De que me estoy haciendo cargo? Cuando cada uno hace lo que quiere. William no se mueve de la pared ya que con sus binoculares espía cada rato afuera, es decir a la nada porque lo cañoneros ya se han marcado pero parece preocupado de que seamos atacados por sorpresa. Danna y Obi parecen estar entrenando en combate algunos personas y con ello se suman Felipe y Sebastián excepto Lucas que esta mas concentrado en sus libro de dibujos, y las tres chicas sonríen como nunca por el bebe en la panza de Raya.

Vaya las cosas si han cambiado mucho desde que me aleje de ellas mas aun Violeta que me desconcentra cada vez que estamos juntos ya sea hablando de cosas banales o cuando me ayuda con el orden de la cascada. Es tan linda que cada dia que pasa me esta gustando mas, su cabello de escoba, sus ojos cafes y esos labios que algún dia quisiera probar y para remetar su vestimenta que no tiene nada que ver con las nuestra toda fashion.

Sonrio solo con recordar eso.

-Esa sonrisita- se acerca Obi cansado de tanto luchar con flauchos – imagino que piensas en alguien- tanto se me nota oculto mi sonrisa para mi mismo y me giro para ignorarlo- ¡vamos no seas asi!, es normal estar enamorado – le planto cara serio y cruzado de brazos.

-Eso no te incumbe – salgo de cascada mientras el me sigue burlándose. Sera muy imbécil . Me lanzo al agua, ¡mierda que esta muy fría! Nado hasta sacar mi cabeza y Obi me que da viendo desde arriba.

-Tu sí que estás loco, porque no te has unido a la pelea- comienzo a mover mis brazos hasta la orilla.

– Porque no estoy interesado en luchar y menos entrenar a jóvenes de nuestra misma edad- parece que no se lo esperaba. Suelta sus brazos y también se lanza llegando hasta a mí.

-Es por Violeta.

-No, no es por nadie Obi. Es porque necesito tranquilidad después de mucho caos. Es mucho pedir, además odio estar a cargo también de todos ustedes.

-Entonces no lo estés, nadie quiere estarlo solo ayudamos Nomi, deja de estresarte y has lo que tu cuerpo y mente o corazón te pide. Diman pasa lo mismo que tú, se estresan por todo, pero si solo consultaran que queremos no pasarían por esto. Y mira a donde llegamos. Se fue y no sabemos cual es el próximo paso que daremos así que mientras tanto solo disfruta. Tú también vive tu vida.

Y con eso se va dejándome solo y llevándose a VIDA que no sabíamos de su presencia.

Los truenos siguen y con eso salgo del agua para caminar por el sendero vagando como si fuera un zombi. No es hasta que me doy cuenta de que piso algo metálico saco la hierva marchita y mojada por las gotas de lluvia que caen, miro un camino de tren su camino es largo comienzo a caminar a mi derecha y poco a poco se va poniendo sombrio, el atardecer se avecina y yo sigo hasta que llego a la recta final. No fue más de dos horas si no media que lleguo y veo un antiguo tren, su estado es deteriorado y tiene muchas manchas metálicas, la puerta parece estar rota así que fuerzo por abrirla, la bulla es tan fuerte que me caigo para atrás y una manada de zombis comienzan a correr dentro del tren, me escondo debajo de este, poniendo mis manos como sostén de lo mucho que se mueven.

¡Mierda!

Un grujido me pone la piel de gallina. Cuando escucho mas grujidos salidos de nada, de reojo miro a dos zombis que parecen estar comunicándose. Que es lo que mis ojos están viendo.

Más mierda. Algo toca mi pierna y eso me pone en alerta.

Diman

Los truenos me hacen refugiarme ente los árboles que parecen cuevas mientras espero a que escampe. He pasado cuatro días fuera de las cascadas más bien iba de regreso cuando no encontrado nada, mi preocupación y estrés aumentan por que no sé que decisión tomar cuando ya se la verdad.

De la nada veo que la valla metálica del tren se mueve, saco mi cabeza para ver que está pasando y un montón de zombis salen de un tren como monstruos carnívoros que son. Pero más letales. Me escondo cuando veo una figura moverse por debajo del tren, me agacho para ver más y ¡diablos! Que hace Nomi ahí abajo, saco mi pistola y disparo hacia el cielo nublado para que intente escapar de los zombis que se lo quieren comer.

Corro hacia mi lado opuesto, no creo que pueda regresar si eso significa haber salvo a mi amigo.

Ya está.

Mi decisión.

Se tomó sola.

Mi decisión es entrar al círculo.