Aquí estoy otra vez, recomendando una serie coreana que vi en Netflix.
Pero antes, anuncio rápido: ¡Ya tengo el primer tomo de Akatsuki no Yona! ¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHH! Fin del anuncio rápido.
Hay un podcast que me gusta mucho y suelo escuchar cada vez que me baño, o ando lavando el baño, o lavo los trastes, o estoy desayunando, o doblando mi ropa o cada vez que estoy haciendo algo y necesito escuchar algo de fondo, siempre estoy escuchando noticias coreanas con la Insolenta del Isoticiero o el podcast "Leyendas legendarias", en donde José Antonio Badía le cuenta a Eduardo Espinosa y a Mario Capistran, casos de crimen real, fenómenos paranormales o eventos históricos tan peculiares, notorios y fantásticos, que se ganaron el título de legendas legendarias.
Está muy bueno, toca temas como las atrocidades de genocidas mexicanos que por alguna razón terminaron siendo glorificados y convertidos en héroes en los libros de historia, como Pancho Villa, o de lo mismo, pero con figuras que la iglesia santificó, como Teresa de Calcuta, hablan de cultos, de extraterrestres, de abducciones, del chupacabras, del big foot, de exorcismos, de poltergeist, de asesinos seriales, y muchas cosas más. Ellos manejan un humor un poco negro, entonces sé que hay personas a las que no les gusta porque no les causa risa ese tipo de humor, tengo una amiga a la que de plano no les cae, pero, por ejemplo, a mi mamá sí le hace gracia jajaja.
Chales, ¿qué no era recomendación de una serie coreana? Sí, perdón, tengo TDA y me distraigo.
Legendas legendarias tiene un capítulo llamado: "Shiro Ishii y la unidad 731", que va de las peores cosas que alguien se puede imaginar, fue un médico militar japones que, antes y durante la segunda guerra mundial, anduvo experimentando con chinos, taiwaneses, coreanos, rusos y de más personas no japonesas, viendo por medio de vivisecciones los efectos de varias enfermedades en distintas personas, con distintos sexos, edades y razas, algo espantoso que se vio ensombrecido por el holocausto y que no recibió la atención que merecía.
Bueno, no sé si ustedes lo sabían, pero Corea antes de que existiera Corea del Norte y Corea del Sur, Corea estaba unificada y tenía el nombre de Joseon, el problema es que la península de Corea está cerca de China, Rusia y Japón, así que les llovieron las invasiones, hasta que ahí por 1910, los japoneses los anexionaron y los coreanos sufrieron de todo hasta que terminó la segunda guerra mundial y obtuvieron su independencia en 1945.
La serie se ubica históricamente durante la ocupación japonesa, así que puede verse como una serie histórica en la que puedes conocer como era el trato en ese entonces entre los coreanos y los japoneses, y pues hay mucha acción, pero aparte meten a un tipo que está inspirado en Shiro Ishii, y la serie se vuelve en una de misterio y suspenso, porque, ¿qué es lo que oculta el hospital que no me acuerdo como se llama? Y luego hay un monstruo, producto de los experimentos humanos, así que también se vuelve una serie de terror, y en medio de todo, los protagonistas se van enamorando y su romance se ve tan natural porque desbordan química y me encanta cómo se fortalece su relación con el paso de los capítulos y van aceptando que están enamorados del otro.
Y luego también lloré. No les puedo contar con qué escenas lloré, pero wow, lloré, yo no esperaba llorar con esa serie.
Yo ya he leídos y visto muchas historias, no es imposible, pero no es tan fácil hacerme llorar, o tiene que ser algo que se perezca a una vivencia dolorosa mía y me haga empatizar mucho, porque pues yo no me di, en el momento que me pasó, permiso de llorar y eso me hace llorar más, o, no sé, creo que en este caso fue la maternidad que toca la serie, y no es como que yo tenga instinto maternal, yo jamás voy a ser madre, pero tengo una mamá, y adoro a mi mamá, y de repente vi mi amor por mi mamá reflejado en la prota y me rompí.
No es como que otras series no hayan intentado hacer esto antes, pero joder, qué bien les quedó aquí, 10/10. No recuerdo dónde lo escuché, pero es algo con lo que estoy de acuerdo: A veces no es lo que cuentas, sino cómo lo cuentas.
No sé qué más puedo contarles para que la vean, me gustó mucho, tenía mucho que una serie no me gustaba tanto, ya hasta hice que mi papá la empiece a ver, aunque tuve que esperar a terminarla para decirle el título, porque luego él termina de ver las series antes que yo y... no me spoilea, pero me molesta mucho que se burle de que él ya sabe cómo termina.
Entonces, les dejaría la opinión de mi papá, pero él todavía no la termina muajajajaja, así que solo confíen en mí uwu