Mis dedos se posicionan una vez más en el teclado de la laptop. Antes de escribir en Google me permito observar a mis alrededores aún sabiendo que no hay absolutamente nadie en el espacio verde en que me encuentro. Mi espalda está recostada en el tronco del árbol grande que impide que los rayos de sol me den de lleno, mi trasero se encuentra posicionado en el verde césped, mi maleta a un lado de mi cuerpo y mi laptop justo en mi regazo. Los únicos que vienen a este lugar son Sara y Dylan, pero salí antes que ellos a descanso así que dudo que se hagan presentes hasta por lo menos una hora.
Lo bueno de estudiar para los exámenes es que cuando los terminas de primera eres libre de salir del aula a hacer lo que se te pegue la gana.
Mi vista deja los alrededores para centrarse en el computador, observo el teclado sintiéndome estúpida. No puedo creer que realmente voy a buscar lo que tengo en mente. Mis dedos teclean la palabra y sin poder evitarlo antes de dar enter para comenzar la búsqueda me quedo observándola con atención.
Sombras.
El listado característico de páginas web se hace presente y me preparo para realizar la investigación. Comienzo a abrir página por página. Cierro las que no me resultan atractivas, leo las que me resultan interesantes, saco por aparte datos que me resulten importantes...
Luz obstaculizada...
Fuente de luz...
Presencia siniestra...
Reflejo de un cuerpo contra la luz...
De lo científico a lo ficticio, de lo ficticio a lo siniestro, de lo siniestro a lo terrorífico, y de lo terrorífico a lo paranormal. No me importa que tan extraño y descolocado suene, entre más extraño mejor.
Han pasado dos días desde aquel incidente en Rayo Nocturno. He podido dormir mejor, las alucinaciones y voces han disminuido, de la misma manera en que las pesadillas, pero eso no quiere decir que se hayan ido por completo. Por ratos, se siente como si estuviera ida. Como si no me encontrara en mi cuerpo y no fuera nada más que una estatua parada en un lugar sin saber qué demonios hacer, es como si algo o alguien me estuviera rogando que mire mas allá de la realidad en la que he vivido todos estos años y a su vez, hubiera una barrera que no me permitiera verlo.
Los dolores de cabeza han disminuido también, diría yo que de cinco dolores que tenía al día se han reducido a uno o dos, lo cual resulta reconfortante. Me tome el día domingo y el siguiente para pensar, necesitaba convencerme a mí misma de que lo alucinado en Rayo Nocturno hubiera sido solo eso, una alucinación.
No respondí el celular, ni cualquier otro medio electrónico con el cual alguien pudiera contactarme. Le dije a papá que si venían Sara o Dylan no abriera la puerta, comprendía que necesitaba estar sola por lo que no protesto cuando se lo dije.
Él me observó el domingo y los días posteriores, lucía más desganada de lo que alguna vez me encontré en la vida, así que cuando le dije que iba a faltar el lunes no se opuso; sin embargo, hoy es martes y tanto él como yo sabíamos que tenía que estudiar puesto que la anterior semana falte por los exámenes médicos. Si quiero salir de aquí necesito pasar de año, faltar todos los días no me ayudará en absoluto a graduarme con honores.
Evite a toda costa los ojos inquisitivos de Sara, Dylan, Reynolds, e incluso de los amigos de Christopher. Tyler va a la Universidad por lo que es una persona menos.
Ahora, no puedo evitar seguir buscando entre página y página de Internet porque a pesar de que los síntomas de lo que sea que estoy sintiendo, viendo y en general viviendo han disminuido no quiere decir que no persistan. Necesito averiguar qué es lo que sucede o me voy a volver loca. No puedo vivir sintiendo que algunas personas e incluso objetos esconden algo más allá de lo que son, simplemente no puedo vivir sintiendo que algo raro sucede en este pueblo, en las personas que lo conforman e incluso, en mí misma.
Tal vez el problema no sea lo que te rodea, tal vez el problema seas tú...
Como último recurso dígito lo que he sentido durante estos días. El dolor de cabeza, las alucinaciones, lo sueños, el nerviosismo, la ansiedad, los lugares que he soñado...
No todos los sueños son pesadillas, algunos me muestran una perspectiva menos terrorífica. El rostro de mi madre conversando con personas que jamás he visto en mi vida, sombras de aquí allá oscuras y claras alrededor de mí, tormentas eléctricas, casa enormes... Como si estuviera observando con mis propios ojos un lugar relativo a la realidad.
Presiono enter cuando he escrito lo suficiente, puedo encontrar lo que sea pero algo que comparto con Google es que me da pereza procesar cosas muy largas.
Una parte de mi por alguna razón no se siente confundida cuando un artículo vinculado al Sanatorio de Cronwell se hace presente, dirijo el cursor hacia ese lugar sin importarme los otros informes presentados. Observo con atención cómo se carga, se demora tanto que termino observando el típico "Tiempo de conexión agotado".