| Capítulo 8 | Chica ruda.

👭🏽✨ SOLANGE ✨👭🏽

Es el segundo día que despierto antes de las cinco de la mañana. Espero que no se me haga un mal hábito. Por suerte, hoy Linsy no tenía entrenamiento de natación ni de ninguna otra cosa.

¿Qué tan cabeza dura tengo que ser para seguir pensando en la conversación que tuve con Dylan anoche? Mi cabeza era todo un mar de preguntas y, no conseguía responder ninguna. ¿Qué fue lo que pasó «la otra noche» entre él y Linsy? Era la que más retumbaba en mi cabeza.

Cuando regresamos de la cena, le pregunté a Beth si sabía algo y ella dijo que no, que de haber pasado algo entre ellos, Linsy se lo hubiera dicho. Ni siquiera sé porqué perdí mi tiempo preguntándole si ella es incapaz de darme información cuando la necesito. También pensé en la opción de preguntarle al molesto profesor Harrison, pero conociéndolo, me va decir que no es de mi incumbencia y que si Linsy quisiera que lo supiera, me lo diría.

—¿Qué haces despierta tan temprano? —preguntó adormilada. 

—No lo sé —me encogí de hombros—. Lamento si te desperté con la lámpara. 

—No te preocupes... Está bien —habló, incorporándose en la cama— No has podido dormir, ¿verdad? 

—No —suspiré. Imité su acto y me recosté contra la cabecera de la cama— Tengo curiosidad por saber qué fue lo que pasó entre ellos. 

—Te juro que no lo sé. 

—¿Será que tuvieron sexo? —esbocé una sonrisa, sintiéndome orgullosa de mi hermana—. Entendería porqué no dijo nada. 

—Sol —rió—. No creo que Linsy se haya entregado a él. 

—Es la única respuesta a mis preguntas.

Leer tantas novelas eróticas me está haciendo imaginar muchas cosas. Si no fue que se escaparon del colegio para ir a una cita «la otra noche», solo queda pensar que tuvieron sexo. O, ¿por qué otra razón Linsy le diría que fue un error?

Dios... Cuando la tenga frente a mí, la voy a obligar a decirme todas las cosas que se ha guardado. Me indigna que no las comparta conmigo.

Incluso podría hacer que a Dylan le quede claro que yo, "Lindsay", no quiero absolutamente nada con él, y después de eso no le van a quedar ganas de seguir insistiendo. Sin embargo, no me atrevo a hacerlo porque no sé si ella siente algo por él.

—Mejor hablas con ella más tarde y así sales de dudas —bostezó—. Voy a tratar de seguir durmiendo. Tú deberías de hacer lo mismo. 

—Lo dudo —salí de la cama. 

—¿A dónde vas? 

—Necesito un poco de aire.

Empecé a caminar por los pasillos sin rumbo alguno. Me llenaba de rabia saber que en estos mismos pasillos agreden e insultan a mi hermana, y nadie es capaz de hacer algo. Y yo soy la peor hermana del mundo, porque a pesar de que sé que debería de hablar con mis padres, no lo voy a hacer porque Linsy me pidió que no lo hiciera.

Quisiera que ahora las cosas se calmen. Ayer en la cena no tuve ningún mal trato por parte de Jackson o de sus amigos, todos parecían intentar llevarse bien conmigo. Espero que siga siendo así después de hoy.

Un ruido proveniente de uno de los salones llamó mi atención. Caminé hacia allá, y abrí la puerta sigilosamente al escuchar algunas voces.

—¿Juntaste todo el dinero? —era Jackson junto a Caleb.

—Si —sacó un fajo de billetes de su mochila—. Tuve que usar un poco de fuerza... Ya sabes que a veces no quieren pagar. 

—Muy buen trabajo —chocaron puños—. ¿Y lo de las chicas? 

—Todas están de acuerdo —dijo mientras hacía líneas con el polvo blanco que estaba sobre el escritorio. Debe ser cocaína—. Es increíble ver cómo las chicas acceden a vender su cuerpo a cambio de un par de dólares. 

—Les hablas bonito y hacen lo que quieras —dijo, antes de inhalar el polvo—. Esto es gloria.

¿Estoy entendiendo bien?

Estos chicos no solo venden drogas dentro del colegio, sino que también son proxenetas. ¿Qué diría el director? Si los descubren y los echan del colegio, Linsy estaría en paz.

—¿Y Maddison? 

—¿Qué con ella? 

—Fue una sola vez. Muchos clientes la quieren de vuelta. 

—Maddison es mía, al igual que este negocio. Así que los clientes se van a tener que conformar con las que les ofrecemos. 

—¿Ya no piensas llevar a Beth? 

—Todo a su tiempo, querido amigo.

¿Piensa prostituir a su propia hermana? Qué tan enfermo tiene que estar para tener una mente tan retorcida.

Sea como sea, esto no se puede quedar así... Sin que yo haga algo al respecto.

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Las dos primeras clases me dejaron con un terrible dolor de cabeza. Durante las dos horas de la clase de inglés, estuvimos escuchando un estúpido audio acerca de la rutina diaria de una persona. Después de eso, en la clase de biología, estuvimos viendo un video que la verdad ni siquiera lo entendí.