Bocados de amor

¿Sí o no?

Narra Sarah Matheus.

La noche llegó y es hora de salir de mi habitación, me veo al espejo y estoy segura de que he quedado bien, verdaderamente esos estilistas son maravillosos me han hecho un peinado muy bonito con ondas perfectas que caen por debajo de mis hombros, mi maquillaje es atractivo y mi vestido ajustado al cuerpo es magnífico, su color salmón es bastante lindo parece parte de mi piel y eso me gusta porque se ve muy sensual, cuando Alex me vea se le caerá la mandíbula de la impresión…

Escucho la puerta y la voz de vivi llamarme para preguntar si ya estoy lista, yo respondo que pase y ella abre la puerta, siendo asoma su cabeza me mira abriendo su boca muy grande.

—¡OMG! meki, te ves tan jodidamente sexy de verdad si yo fuera lesbiana sin duda me acostaría contigo eres una diosa…— yo sonrío y le guiño un ojo dando un giro de 360⁰ para que pueda detallarme más, ella me observa de pies a cabeza y sonríe.

—Uff, definitivamente hoy no te salvas, Alex te va a azotar como una fiera salvaje… Miauuu— dice la última palabra haciendo una señal de gatita, yo niego con mi cabeza y señalo la puerta para que ambas podamos salir de la habitación.

—Si, gatita loca, ya vamos a la fiesta que deben estarnos esperando— ella asiente para responder.

—Sobre todo Alex, por cierto ¿te pusiste ropa interior? Eso se ve como que no traes nada abajo— me suelta una nalgada y yo le doy un golpe en el hombro.

—Si me puse vivi, ya deja de joder, vamos— sale carcajeándose hasta que llegamos a las escaleras bajamos y al llegar al final todos gritan...

—¡SORPRESA!— sonrío y observo todo a mi alrededor, mi familia y únicos amigos que son vivi que está a mi lado y mi tierno Liam. También está la allena la prima de vivi, ya la había olvidado y pensé que se había regresado a Florida o donde sea que viva esa loca.

Miro a Alex y se ve tan jodidamente atractivo, su traje color gris lo hace ver como un caballero sensual, se acerca a mí lentamente y me abraza para desearme feliz cumpleaños, mientras susurra a mi oído.

—¿Quieres matarme de un infarto? Estás muy sexy— siento un cosquilleo en mi oreja que avanza hasta mi vientre provocando calor en todo mi cuerpo, él sujeta mi cintura y me empieza a mostrar toda la decoración que han hecho mi amiga vivi y mi madre, la verdad está muy bonito, ya que usaron flores naturales y el pastel ni se diga, es de tres pisos decorados con fondant rojo y rosas comestibles...

Todos me desean feliz cumpleaños y nos reunimos en la sala donde organizaron una gran mesa con una cena para todos los que los encontramos en el lugar, no me canso de asombrarme por todo lo que mi familia ha hecho por mí y en especial Alex que fue el de la idea de celebrar mi cumpleaños, realmente no me arrepiento haberle permitido hacerlo.

Luego de la cena nos trasladamos al pie de las escaleras que es donde está toda la decoración que prepararon, yo camino en dirección donde está mamá y le doy un abrazo agradeciendo por todo el esfuerzo que dedicó en hacer está hermosa decoración con vivi.

Por un momento me distraje y no me di cuenta cuando Liam y Alex se colocaron de lado de las escaleras ambos tienen dos guitarras, yo no tenía idea que Alex sabía tocar guitarra eso es un secreto que tenía bien guardado...

«Oh, no… ¿Van a cantar para mí?» pienso mientras observo a Alex pararse en medio y decir unas palabras.

—Esta canción es para ti, de verdad la elegí porque es lo que siento por ti, la adaptamos en forma masculina, espero te guste… por cierto tengo muchos años que no toco una guitarra ni canto, así que no se burlen— cuando dice esas palabras empiezan a tocar ambos la guitarra la canción la reconozco, es (Helium de sia) cuando dice que mi amor lo hace elevarse como el helio siento que mi piel se eriza y las lágrimas recorren mis mejillas…

Por un momento empieza a acercarse en mi dirección hasta quedar frente a frente, yo lo observo totalmente llena de amor sus ojos brillan y tiene una hermosa sonrisa dibujada en su rostro, él señala detrás de mí yo giro y están mamá, papá, vivi y allena con unos carteles que dicen:

¿QUIERES SER MI ESPOSA?

Yo abro mis ojos y llevo las manos a mi boca, giro de nuevo para ver a Alex y no está tocando la guitarra y tampoco cantando, él tiene una rodilla puesta en el suelo y una pequeña cajita en sus manos abierta que dentro tiene una sortija con una piedra de diamante…

—Te amo y siempre será así meki ¿me harías el honor de convertirte en mi esposa?— yo observo todo a mi alrededor y siento como mi corazón está acelerado, no hay otra cosa que pueda hacer que decirle sí…

—¡Si, si y siii, quiero ser tu esposa Alex!— exclamo feliz, él se lanza sobre mí y me abraza haciéndome girar por los aires, y todos gritan y aplauden emocionados. Me vuelve a dejar en el piso delicadamente y coloca la sortija en mí debo anular para luego darnos un beso intenso y lleno de amor.

—Te amo alex— le digo mirando sus ojos.

—Y yo te amo a ti meki— responde con una amplia sonrisa y otro beso tierno en mis labios.

En este momento no hay otra cosa en mi cabeza, solo ser feliz con Alex y olvidar todo el pasado que me agobia y me atormenta.




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