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"Te lo juro, te voy a meter en problemas"
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Estoy listo, pero tú no eres una chica
Muéstrame lo que tienes
Tu cuerpo golpeando en el lugar exacto
Está bien, está bien
Tan seductor
Tan sexy
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La noche estaba dispuesta a guardar mis secretos, y para un pecador como yo, era la clara invitación a romper cada línea de lo correcto. Un año de terapias puede irse al carajo después de una botella de alcohol, buena música y el candente espectáculo de aquellas cinco musas bailando con cada vez menos ropa, dejando expuesto su cuerpo de una manera vulgar que me encantaba.
Mi sonrisa estaba tan llena de burla y perversión, solo de imaginar a esa despampanante rubia tumbada sobre mi cama, gimiendo como la puta que era, mientras era follada de las maneras más sucias y descuidadas por mi parte.
 

Dí una profunda calada al cigarrillo que sostenía entré mis dedos, estaba dispuesto a dejar la fiesta de una vez por todas e ir directo por lo que me apetecía, pero Yoongi me detuvo colocando su mano sobre mi hombro, obligandome a prestarle atención por primera vez desde que entramos al sitio.
 

-- Las mujeres pueden ser peligrosas para un hombre que está a pocos meses de casarse.-- dijo lo suficientemente alto para dejarse escuchar por encima de la música, el tono de voz del rubio estaba impregnado de cinismo.
 

-- Oh vamos, no me has traído a este sitio para simplemente quedarme a mirar. Tú y yo sabemos que mi prometida te importa una mierda.-- 
 

El hombre soltó una carcajada, sí, bueno, cuando lo llevo a ese sitio, no era precisamente para portarse bien, pero está ocasión, las cosas iban hacerse bajo sus condiciones.
 

-- Te conformas con tan poco. Esas chicas que vez ahí, no están ni cerca de ser una de las exclusivas del lugar.-- 
 

Jungkook arqueo una ceja, la pregunta a punto de salir de sus labios, pero se contuvo, si Yoongi le pedía esperar, tenía que ser por una buena razón.
 

-- Entonces deja de jugar. --
 

En ese momento su amigo se puso incorporó y se acercó hacía un hombre alto el cual se encontraba de pie frente a una puerta que estaba a un lado del escenario principal, le vió murmurarle algo al oído y un luego se giró nuevamente en su dirección, agitando la mano para invitarlo a acercarse.
Termino su copa y se puso en pie, siguiendo a Yoongi, quién se había perdido en el interior de la habitación que había estado custodiando el hombre. Apenas entró al lugar, notó el cambio de inmediato, ahí había solo silencio, era una habitación amplía y bastante lujosa, había un escenario y frente a este se encontraban unos hermosos sofás de piel, todo en tonos rojos.
 

-- Tu jamás me decepcionas -- dijo Jungkook, negando levemente con un gesto de la cabeza y tomando lugar en uno de los sofás rojos.
 

Entonces una música suave comenzó a sonar y seis personas salieron al escenario, tres de las mujeres más bellas que Jungkook había visto en su vida, y tres chicos de apariencia delicada y bastante atractivos si era sincero, pero ninguno que valiera la pena.
 

-- ¿Y bien? -- preguntó Yoongi, sin apartar la mirada de los seis exquisitos trozos de carne.
 

-- La mujer de cabello negro.-- 
 

-- Eres tan predecible, amigo mío.-- dijo mientras tomaba la botella de whisky de la pequeña licorera que había en la habitación.-- Se quedarán solo las chicas, gracias.-- dijo en voz alta, apartando la mirada y sirviendo dos vasos.
 

Se escuchó una risa en la habitación, lo que llamo la atención de ambos hombres quienes volvían a mirar el escenario. De pie, mirando de manera divertida, se encontraba un séptimo chico de cabello negro, tenía unos labios gruesos y apetecibles, sus ojos de un azúl intenso resaltaban aún más gracias a una generosa capa de delineador. Igual que las otras seis personas en el escenario, este estaba casi desnudo, pero lucía una hermosa gargantilla de brillantes en el cuello como un adorno más que sorprendentemente solo realzaba su belleza.
 

-- ¿Qué es tan divertido? -- preguntó Jungkook, arqueando una ceja.
 

-- Tú -- dijo con un encogimiento de hombros.
 

-- Vaya, creí que por el dinero que pagaba, las putas serían más educadas.--
 

Intentaba ser hiriente, esperaba asustar al chico, pero los únicos que parecían nerviosos eran sus compañeros en el escenario. Sin embargo el pelinegro solo amplió su sonrisa.
 

-- ¿Prefieres putas educadas o una puta que sepa darte el mejor sexo de tú vida? -- preguntó, cruzándose de brazos en un gesto de suficiencia.
 

Otra risa se escuchó, está vez por parte de Yoongi, quién veía divertido el rostro de sorprendido de su amigo.
 

-- Chico, te diré una cosa. Puede que seas jodidamente bonito, pero el hombre que intentas seducir, ya probó de todas las delicias carnales, habidas y por haber. No tienes oportunidad.-- y dicho esto tomo su bebida de un solo trago.
 

-- Puede que haya probado grandes delicias, pero yo no me encontraba en ese menú, y te juro que soy un deleite. -- 
 

-- Mirá...-- 
 

-- Déjalo, quiere una oportunidad y yo se la voy a dar. Después de todo, hay perras que necesitan aprender una lección.-- 
 

Yoongi tardo un momento en conectar sus ideas, Jungkook era bisexual, pero rara vez llevaba a un chico a la cama, a pesar de tantos años, aún le parecía extraño, más aún que diera el "Sí" a un chico que de sumiso no tenía nada, normalmente a Jungkook le gustaba tener el control.