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VULNERABILIDAD
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A veces mostramos debilidad 
Está bien ser tú
No vuelvas a mentirte a ti mismo
Todo se conecta 
por un sonido en común

Cuando cierro mis ojos
Veo tu luz en la oscuridad
Ilumina el camino para mí
Podemos seguir adelante 
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Dió pequeños toquecitos con la borla de algodón en el raspón de la mejilla, lo único que denotaba que aquello ardía, fue el ceño fruncido de Jungkook, quién había permanecido muy quieto mientras Jin le curaba. Se dijo que aquello no era su problema, pero después de todo, estaba aquí para ganar la confianza del chico, lo necesitaba si deseaba conseguir el acceso a las oficinas principales de la familia. Así que aunque no era necesario, acompañó a Jungkook hasta su habitación, le ayudó a preparar la bañera y ahora estaba curado sus heridas.

Oh, era demasiado joven para toda esta mierda.

-- ¿Duele mucho?-- preguntó con un tono de voz más suave.

La mirada de Jungkook era de curiosidad, porque ninguno de los guardaespaldas que había tenido antes, le había tratado así. Su trabajo terminaba una vez lo dejaban en la puerta de la casa, sin mantener conversación, sin hacer preguntas, sin ningúna atención extra que no fuera exclusivamente para preguntarle sus horarios. Fue diferente de muchas maneras y estúpidamente eso le hacía sentir bien, agradecido, pero claro que no iba a decirlo, no quería verse más patético de lo que ya era.

-- Estoy bien.--

-- ¿Me dirás lo que pasó?--

-- ¿Por qué te importa? Apenas me conoces, tu trabajo terminó cuando llegue a casa ¿Qué haces aquí?-- soltó con molestia.

-- No, no te conozco, pero mi trabajo termina una vez me asegure que estás a salvó y no podré saber cómo mantenerte así, si tú no me dices que pasa.--

Jungkook se encogió en la cama como un niño pequeño, por primera vez Jin realmente sintió algo de culpa por intentar utilizarlo para sacar información, ese chico no era para nada como su familia, que estuviera involucrado en todo esto le parecía un error.

-- Tienes diecisiete años ¿Me equivoco?--

Jungkook entonces esbozó una medio sonrisa y resopló con algo de burla.

-- Si no sabes mi edad, entonces no estás haciendo bien tu tarea.--

-- Soy malo con los números.-- dijo con cinismo.

-- No pareces alguien que sea malo en nada. -- Jungkook lo miró de arriba abajo antes de encogerse de hombros.-- Eres alto, bien parecido y hablas con propiedad, incluso tu postura denota cautela. Algo que está bien para un guardaespaldas pero demasiado trabajando para alguien de tu edad. ¿Cuántos tienes? ¿Treinta?--

-- Veintiséis, mocoso, más respeto.--

-- Veintiséis y ya estás calificado para trabajar de guardaespaldas, ¿Lo ves? Todo tú denota experiencia, llevas el arma a un costado para tenerla a tiro, no atrás como los novatos. Tienes un anillo de punta de diamante, algo que parece un adorno pero que al momento de soltar un golpe puede hacer una gran herida.--

-- Vaya ¿Qué tenemos aquí? ¿El nuevo Sherlock Holmes?--

-- No, solo soy observador, me ha salvado de muchos problemas el estar siempre alerta… Claro que… a veces fallo.--

-- ¿Y hoy fallaste?--

-- He fallado más de lo que acierto.-- dijo con voz apagada.

-- ¿Qué pasó ahí fuera? ¿Por qué no estabas vestido?--

-- A las personas les gusta hacerme daño. Me he defendido, pero no puedo hacerlo solo todo el tiempo. Uno está bien, pero tres o cuatro no es algo que maneje con facilidad.--

-- ¿Te molestan en la escuela? -- preguntó sorprendido, cualquiera pensaría que con los antecedentes de su familia, Jeon Jungkook sería uno de los agresores, no el agredido.

-- Bueno… pero ahora tú vas a cuidarme ¿Verdad?--

¡Maldita sea! No debería sentir pena por este chico, cuando prácticamente era un privilegiado que pagaba sus gustos gracias a la sangre de otras tantas personas.

-- El tiempo que pueda hacerlo, te mantendré seguro. ¿Te es suficiente?--

-- Eres el primero ¿Sabes?--

-- ¿El primero?--

-- Si, el primero que me ve como una persona y no como un cheque mensual.--

Hubo silencio mientras Jin comenzaba a guardar las cosas en el pequeño botiquín, hasta el momento que sintió una mano posarse suavemente sobre la suya.

-- Gracias por todo, SungJin.--

-- Jin, prefiero que me llames solo Jin.--

Pensando que aquello era una muestra más de amistad sin saber que el hombre solo pidió que le llamara Jin solo para no sentirse incómodo, Jungkook sonrió y bajó sus defensas.

-- Y tú puedes llamarme Kook…--