“¿Sombras o fantasmas?”
Harry estaba confundido, había mantenido la misma rutina al despertar temprano para contemplar al chico que cada mañana con aquella ropa blanca se dirigía a la escuela.
¿Cómo lo sabía?
Como si no le hubiera seguido en más de una ocasión. Si, bueno, quizá parecía extraño pero es que a pesar de que Harry estaba seguro de que aquel rubio era Draco no dejaba de impresionar lo tan diferente que era de la imagen que tenía guardada en sus recuerdos.
Draco parecía mucho más amable, su sonrisa para con los demás solía ser sincera y no de superioridad, otra cosa que le desconcertaba era el trato ameno que mantenía con los muggles pero que a pesar de todo Draco era el tipo de chico que prefería estar solo.
Más de una ocasión tuvo la tentación de acercarse a él para evaluar su reacción o simplemente para acompañarlo a una tasa de café pero aún no era capaz de llegar a ese punto.
Harry se había convertido en una sombra, era irónico pues en su sexto año de curso en Hogwarts había pasado algo parecido pero en circunstancias mucho más distintas a las de ahora.
Malfoy le provocaba curiosidad y eso debía admitirlo, una mañana se descubrió así mismo buscando entre los archivos del ministerio el nombre de Draco y claro que lo encontró, tomo la carpeta y comenzó leer los documentos, ninguno era agradable para ser sincero.
- Mortífago (alto riesgo).
-Draco Lucius Malfoy investigado por el asesinato de May Lefroy, una joven de 14 años de origen Muggle.
- Draco Malfoy investigado por intento de asesinato a Albus Dumbledore.
- Draco Lucius Malfoy es absuelto.
(Lucius Malfoy confiesa sus delitos recibiendo en su lugar el beso del dementor.)
Draco Lucius Malfoy Black.
Mago sangre pura.
22 años de edad.
Cédula tipo B (En observación).
Lugar de residencia: Londres (dirección confidencial).
Dedicasion:
Sanador (Con especialidad en hechizos provocados por maldiciones oscuras.)
Lugar de trabajo:
Hospital San Mungo de enfermedades y heridas mágicas.
Negocios y propiedades varios:
(Esta información es de origen confidencial)
La información venía acompañada con varías fotografías, no le sorprendió que Draco estuviera trabajando en San Mungo, después de dos semanas viéndole con un uniforme blanco ya esperaba algo así.
Entre sus demás investigaciones dio con los archivos de Lucius Malfoy quien había Sido condenado al beso del dementor pero que se había quitado la vida una semana antes de cumplir sentencia.
¡Dios! las cosas en la vida de Draco no habían Sido nada buenas y sintió algo de remordimiento al no preguntarse una sola vez que sería de él, de su familia ¿Que le haría el ministerio?, nada, porque en ese punto el tenía su propio problemas y Draco había desaparecido por completo de su cabeza.
Con aquella información se dirigió a casa, no por desaparición o por red flu, hoy le apetecía caminar un poco, pensar, necesitaba pensar en todo lo que estaba pasando, lo que fuera menos en él mismo porque entonces la obscuridad y la tristeza le consumirían de nuevo.
Estaba llegando a su departamento cuando...
—Harry... ¡Hey! llevo una hora esperándote—. Ron se acercó a él tomándole completamente por sorpresa.
—yo... creí... bueno ¿No estabas en Francia con Hermione?—
—Si, estuve pero... hablé con Ginny ayer y...—
—No era necesario que vinieras Ron, eso ya es pasado.—
—¿Porque no lo dijiste? soy tu amigo y tengo que enterarme por un periódico que ahora estás soltero y Ginny dice que no has querido siquiera escucharla.—
—Es que no me interesa escucharla.—
—Harry...—
—¡No! Ron, por favor, no quiero hablar de eso. Mejor dime ¿Que tal te fue a ti en tu luna de miel? ¿Cómo está Hermione?—
—Pues ella...—
Ron abrió los ojos de para en par, una de las desventajas de su amigo -pensaba Harry- era aquel hecho de que le era imposible ocultar sus emociones y la prudencia para el valía un carajo
—¡¿Ese es Draco Malfoy?!—
Lo había dicho en voz tan alta que era imposible que el chico no le escuchará, Draco quién estaba saliendo del carro se quedó inmóvil un momento completamente atónito al ver a Harry y a Ron. Pero al final decidió optar por no hacerles caso, cerró la puerta del carro y se dirigió al edificio de a lado rebuscando en su mochila las llaves del departamento.
—No me dijiste que eras vecino del hurón. —
—¿Vecinos?— preguntó Draco girandose a ver a Potter.— ¿Te mudaste aquí?
—Vivo en el edificio de junto desde hace ya un tiempo.—
—¿Y tú lo sabías Harry? ¿Porque no lo dijiste antes? Hermione y yo te hubiéramos ayudado a preparar la casa de Sirius para que no tuvieras que pasar por esto.— dijo Ron con un tono que a Harry no le agrado nada.