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“Hablame”
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Fingiendo una sonrisa
mientras rompemos

Oh, yo nunca, nunca, nunca
quise que esto llegara tan lejos
Ya es tarde para salvarme,
así que ni lo intentes

Oh, tú nunca quisiste herirme,
pero lo estás haciendo difícil
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Nunca fue bueno guardando secretos, así que era todo un logro haber aguantado tantos años con ese sentimiento clavado en su pecho, enfermando su mente, y apoderándose de su ser. Todo eso en un perfecto silencio, cuidadosamente escondido bajo una carcaza de una imagen impecable que él mismo había creado. Le había costado tanto hacerse de una personalidad fuerte, que fue ofensivo lo ridículamente sencillo que resultó agritar sus esfuerzos.

Taehyung lo había confrontado una vez que se encerraron en la habitación y realmente no supo que responder, porque el enojo que había sentido hace un momento, ahora se había convertido en un palpitante dolor que lo hacía sentirse enfermo. ¿Francamente? Necesitaba un trago.

Cuando el silencio se extendió y comenzó a volverse pesado, Tae soltó un profundo suspiro, paso su mano por sus espesos cabellos negros, intentando poner en palabras la escena que habían vivido hace un momento, porque entendía que una pregunta mal interpretada, podía provocar un problema más grande con temas mucho más complejos.

-- No necesito ser un genio para saber que lo que te molesta gira entorno a Jin, lo sepa él o no...-- soltó por fin, sentándose en la orilla de la cama y con la mirada firme en Jungkook. Este se tensó visiblemente, y parecía que se pondría a la defensiva, sin embargo solo apretó los labios en una fina línea, sin ser capaz de sostener su mirada, eso frustraba a Tae. Un Jungkook callado era más difícil que uno explosivo y ruidoso. -- Jungkook... Tú... ¿Sientes algo por Jin?--

Ante esa pregunta, Jungkook levanto la mirada con una expresión molesta y asintió como si fuera lo más obvio del mundo. -- Claro que siento algo por él, es mi mejor amigo hace años, está a mi lado en las buenas y en las malas ¿Porque no sentiría algo por...?--

-- No evadas la pregunta Jungkook, sabes perfectamente que te estoy preguntando.-- dijo en un tono duro que le exigía sinceridad, claramente parecía que el menor no se lo tomó a bien.

-- No Kim, no te entiendo. Yo no quiero a Jin de ninguna otra manera, es asqueroso pensarlo. No soy un maricon. -- soltó de forma que intentaba sonar amenazante, y si Taehyung no lo conociera, quizá lo habría creído, pero no iba a soltar tan fácilmente el tema.

-- Que te guste Jin no te hace maricon. Lo que te hace maricon es sentir algo, esconderlo y enojarte con todo el mundo porque no tienes los huevos de enfrentarlo.--

Lo siguiente que Tae sintió fue su cabeza punzar y su labio palpitar dolorosamente. Jungkook lo había golpeado.

-- NO VUELVAS A DECIRLO ¿ENCENDISTE?--

Tae se limpió la sangre del labio antes de incorporarse y soltarle un puñetazo en el rostro a Jungkook. La nariz del menor comenzó a sangrar pero eso no lo detuvo para lanzarse contra él y tirarlo al suelo. Comenzaron a forcejear, Jeon era más pesado y tenía una fuerza que abeumaba, pero Tae era más calculador, no soltaba golpes al azar sino en puntos donde claramente sabía, el mejor resentiria. Aún así no era lo suficiente para ganarle y lo sabía, únicamente le hizo complicado a Jungkook sujetarlo a acertar un buen golpe.

Cuando Jungkook se detuvo, sus manos temblaban y estaban manchadas de sangre.

Cuando su mente entro en si, comenzó a entrar en pánico, Tae lo empujó lejos de él y se llevó una mano a la cien, donde un corte había manchado sus cabellos de sangre.

-- Taehyung... Tae yo... yo...--

Jungkook se alejó de él como un animalito herido dándose cuenta del daño que había causado, casi cayendo en un ataque de pánico.

-- ¿Ya estás feliz?-- preguntó Tae com la voz agitada y tensa, pero más controlada de lo que Jungkook esperaba.

-- No quise... Perdón... Lo siento... No...--

-- Si, si quisiste, querías hacer daño, lo ví en tus ojos.--

-- Es que tú... Jin y yo no...-- Las lágrimas comenzaron a derramarse, Jungkook se quebró, se hizo un obvillo contra la puerta, tal y como si intentará desaparecer.

-- Te gusta --

-- No lo digas... No... Por favor no... Eso lo hace real y no puedo... Por favor...--

-- Jungkook, mirá todo lo que haz hecho, mírate. Aunque no lo quieres decir, tus enojos, tus acciones, todo tu es una maldita confesión.--

-- Taehyung... Tengo miedo...--

Tae se acercó con dificultad y se dejó caer a un lado de Jungkook.

-- ¿Qué es lo que te asusta tanto?-- preguntó por fin, estaba agotado.

-- Admitir que me gusta es admitir que soy gay, que algo va mal con mi cabeza, que nuestra amistad no es tan sólida como creía... Que él nunca me verá igual... Qué quizá le de asco saber quién soy... Que si tú lo sabes otros también..., Y mi carrera, todo por lo que trabaje, todo eso se irá a la basura.--

-- Estás haciendo una bola de nieve tu solo, un problema a la vez.-- dijo Tae colocando una mano en el hombro de Jungkook.

-- No lo entiendes...--

-- Te estás complicado con cosas que aún no han pasado.--

-- La tiene a ella... Jin... y ella es tan...--

-- Sería bueno que terminarás tus frases, estoy aburriendome de tanta interrupción.-- dijo en tono burlón, provocando que Jungkook lo mirará mal.

--No creo que seas la persona adecuada para contarte esto.--

-- Claro que no, soy un total desastre, no puedo mantener una novia más de una semana, absolutamente no deberías confiar los problemas sentimentales en mi--

-- ¿Y porque me estás preguntando todo esto?--

-- Me gusta el chisme.-- dijo con un encogimiento de hombros.

-- ¡TAEHYUNG!--

-- Cariño, parece eres un idiota si te cres menos que ella, es decir, por favor, tu eres Jeon Jungkook, Golden maknae, el puto sueño húmedo de millones de fans, podrías follarte un chico al día sin repetir y aún así no acabar con los pretendientes, que se joda Jin, que se joda ella y que se jodan todos.--