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"En tus manos"
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No pienses en nada
No digas nada, ni siquiera una palabra
Sólo dame una sonrisa
Todavía no puedo creerlo
Todo esto parece como un sueño
No trates de desaparecer

¿Es verdad? ¿Es verdad?
Tú, tú
Eres tan hermosa, que tengo miedo
¿Es mentira? ¿Es mentira?
Tú, tú, tú

¿Te quedarás a mi lado?
¿Me lo prometes?
Si suelto tu mano, Podrías irte volando
Tengo miedo, miedo, miedo de éso

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Era un día como hace tiempo no lo tenía. Seok-Jin le había dedicado enteramente su atención, mirando películas y jugando videojuegos con él. Claro que también lo había estado molestando, como era su costumbre, siempre haciéndolo el blanco de sus bromas, por lo que está ocasión Jungkook quiso devolversela.

Después de recibir un sándwich con ajo y mostaza, Jungkook había puesto salsa picante en la bebida de Jin, quién se la cobro en un momento que kookie estaba distraído hablando con Tae, jalandole el pantalón y tirandole una jarra de agua adentro de la ropa interior. Eso fue suficiente para que el maknae se volviera atrevido y tomara todos los pijamas de Jin y los lanzará a la alberca. Pues bien, alguien debió haberle advertido que no lo hiciera.

-- ¡Kim Seok-Jin! -- gritó Jungkook desde su habitación.

Jimin negó con un gesto de la cabeza, esos dos habían estado descontrolados todo el día y tenían la casa hecha un asco.

-- ¿Y ahora que le habrá hecho? -- preguntó el rubio mientras daba un sorbo a su té helado.

-- Sonó molesto, así que seguramente se metió con sus cosas.-- dijo Tae con una sonrisa burlona.

-- Cien wons a que gana Jungkook.-- dijo Jimin mientras miraba hacía el pasillo.

-- Doscientos a que está vez gana Jin -- dijo Tae mientras se metía un puñado de palomitas a la boca.

En ese momento Jungkook apareció con las mejillas rojas, mientras terminaba de atarse la bata de baño.

-- ¿Donde carajos se metió Jin? -- preguntó Jungkook a Tae y Jimin quienes se limitaron a encogerse de hombros.

-- ¿Ahora que hizo? -- preguntó Jimin.

-- Terminaba de bañarme, pero cuando fui a cambiarme no encontré ninguno de mis bóxer en los cajones. Toda mi ropa interior desapareció.-- dijo molesto, mantenía los brazos cruzados y parecía realmente avergonzado.

Pese a todo, Tae comenzó a reír a carcajadas, llamando la atención de Jimin y una mirada asesina de Jungkook.

-- ¿Qué es tan gracioso?-- preguntó el pelinegro en tono amenazante.

-- Nada, es que bien le había dicho a Namjoon que Jin no hacía limpieza por qué fuera amable. De lejos se notaba que tramaba algo.-- Respondió Tae con un encogimiento de hombros.

-- ¿A qué te refie...?-- no termino la pregunta porque un gritó llamo su atención.

-- ¡¿QUIÉN ES EL GRACIOSO QUE METIÓ SUS CALZONES A LA CAJA DEL CEREAL?! --

Taehyung volvió a soltar una carcajada, está vez secundado por Jimin quién saco su cartera y tomo un par de billetes.

-- Aceptó la derrota.-- dijo casi ahogándose con su risa. -- Me hubiera gustado ver la expresión de Yoongi, aunque no se puede ser tan exigente.--

Jungkook sentía su rostro hervir y había salido corriendo directo a la cocina. Si Jin no tuviera un rostro tan bonito, bien le hubiera gustado romperselo de un puñetazo.
Apenas miró a Yoongi, supo que estaba en problemas. Había un tazón con leche en la encimera con un boxer lila adentro, mientras que todo el cereal estaba regado en el suelo.

-- Qué lindos calzones, kookie.-- dijo con un tono de voz que encendía todas sus alertas de precaución.

Está vez Jin se había lucido con su venganza y esto solo le hacía preguntarse a Jungkook ¿Dónde más habría escondido su ropa?
Quiso acercarse para tomar su ropa interior, pero entonces entraron a la cocina Taehyung y Jimin quienes parecían bastante entretenidos con la situación.

-- Tranquilo Yoongi, mi mamá mando un toper con su postre especial de canela, de ese que te gustó mucho.-- dijo Tae con una sonrisa mientras se acercaba a la nevera y sacaba un lindo toper rosa.

Por un momento el peliplateado se relajo y fue junto a Tae quién estaba tomando un par de platos para servir, sin embargo cuando abrió el toper...

-- ¡ESTÁN MUERTOS USTEDES DOS!--

No hizo falta preguntar que pasaba, Tae sostenía con el tenedor unos calzoncillos negros manchados del postre que con tanto celo había guardado.

-- ¡Fue Jin! -- dijo Jungkook antes de salir corriendo a su habitación.

Una reunión grupal, lo único que le faltaba.
Jin tenía cara de niño inocente que no entendía porque la seriedad de sus amigos, mientras que Jungkook lucía avergonzado y a punto de matar a alguien. Namjoon los había hecho sentarse en el sofá central, por lo que más que una conversación parecía un juicio.

-- Les juro que estoy tratando con todas mis fuerzas de no cometer homicidio. -- comenzó Nam, quién mantenía los brazos cruzados y un gesto serio.-- Durante el día hemos tenido que soportar, sandwiches voladores que se pegan al techo, bebidas pegajosas sobre el sofá, agua regada por todos lados, ropa cubriendo la alberca y calzones en la comida que todos nosotros consumimos. Sin contar con palomitas regadas por toda la casa y la basura de chocolates sobre las plantas y adornos de la casa.--

Ante lo último, Taehyung y Jimin se hicieron los disimulados, pero aquello no paso por alto de la atenta mirada del líder.

-- Pero Jin hyung empezó...-- dijo Jungkook a la defensiva.

-- ¿Jin también colocó shampoo a la crema batida? -- preguntó Hoseok con cara de pocos amigos.

Jungkook hizo una mueca mientras miraba de reojo a Jin. -- Ese fue un accidente...--

-- ¿Accidente? -- preguntó Jimin con sarcasmo -- ¿Cómo diablos puede llegar el shampoo adentro del recipiente de crema?--