Cada uno regresaba a sus sectas, algunos habían perdido mucho, otros no tanto. Pero sin duda la derrota de la secta Wen valía lo suficiente para que las próximas generaciones no vivieran bajo el mando de tan vil secta, hasta que otra secta se vuelva loca por el poder y tenga que ocurrir otra guerra donde las grandes sectas tengan que unirse para preservar la paz para los demás.
Todos se separaron con la promesa de verse de nuevo en un mes para discutir lo próximo que harían.
Huaisang había convencido a Meng Yao para que fueraa con él a Qinghe Nie y así tener todo en paz con el líder Nie por el momento.
Estuvieron hablando tranquilamente y sin que el mayor se diera cuenta el Nie puso un talismán silenciador en la puerta antes de cerrarla y así nadie pudiera escucharlos. Sin perder el tiempo en un ágil movimiento lanzo su abanico con la intención de cortarle la cabeza al mayor, sin contar que este al último momento se moviera evitando así su ejecución.
—no me equivoqué contigo Huaisang — lo miro con cautela, cualquier movimiento del Nie podría matarlo y lo sabía — una dulce mariposa puede ser más letal que una gran avispa — dijo con una sonrisa forzada
—mi faceta de estúpido siempre funciona bien — sonrió con superioridad — lástima que tú no creerás en ella — miro su abanico sin interés
—nadie puede ser lo suficientemente estúpido en este mundo — sus expresiones se volvieron serias — todos tenemos algo de maldad en nuestro corazón
—no tengo maldad, solo haré lo necesario para proteger a mi familia — refuto su afirmación
—¿familia? — dijo burlonamente — no tienes familia, da-ge solo te ve como una carga, pequeño Huaisang — dijo intentando desconcentrar al menor y así poder atacarlo
—en eso te equivocas mucho Meng Yao — se burló con descaro — da-ge no me ve como una carga, al contrario, me ve como una buena esposa — dijo sonriendo con victoria, él había visto la forma en el que el Jin veía al Nie mayor y sin duda era lo que más lo ponía celoso
—¿de qué hablas? — preguntó sin entender
—lo que escuchas, Da-ge me ve como su esposa, solo deberías escuchar lo que me hace en las noches — dijo sonriendo con malicia, era una buena venganza por estar mirando a su Da-ge de esa forma tan lujuriosa, su da-ge era solo suyo y nadie se lo va a quitar — realmente es bueno en la cama, como se mueve y la facilidad con la que hace que llegue al cielo — se detuvo a mirar al mayor y sonríe viendo las muecas que hace — cómo le encanta llenarme con su semen y como le gusta verme con sus marcas en el cuerpo — sonrió victorioso, sabiendo que el otro estaba furioso — solo mira cómo me dejó la última vez — dijo y separo sus túnicas dejando ver varios chupetones, marcas de mordidas por el pecho, cuello y clavículas del menor
—eres una maldita perr — decía pero incluso antes de terminar se detuvo ya que sintió como su cuello era cortado de su cuerpo y salió volando, dejando al Nie con una sonrisa por acabar con un enemigo de su familia, salió de ahí sin que nadie lo vea y se dispuso a ir a su cuarto donde se encontró a su da-ge
—¿porque tardaste tanto? — pregunto abrazando al menor y dejaba un beso en el cuello de este
—antes de matarlo tenía que dejarle unas cosas en claro — sonrió diabólicamente
—es por eso que tú túnica está abierta — preguntó arreglando la túnica mirando algunas de sus marcas
—tenía que mostrarle de quién soy — sonrió con inocencia
—eres muy celoso pequeño Huaisang — dijo burlándose
—claro que no — dijo con un puchero — solo quería ver su cara al enterarse de cómo me dejas cada noche — dijo pícaramente — fue divertido ver su cara de rabia, de saber que me haces tuyo — dijo acercándose al mayor — siempre odie como te miraba, cómo te sonreía y como tú no hacías nada
—siempre tuve ojos para ti, siempre fui tuyo, lo único que siempre me impidió tomarte fue que tú no me amaras — dijo mirándolo — pero decidí arriesgarme y resultó maravilloso, ahora puedo tenerte en mis brazos todas las noches — dijo para luego besarlo
Esa noche se pudieron haber escuchado los gritos y gemidos de ambos sino se hubieran asegurado de poner un talismán, no querían que todos supieran de su relación hasta después de revelarla cuando terminara todo este alboroto y poder adoptar al pequeño Yu Xao oficialmente como su hijo y heredero de Qinghe Nie.
En Yunmeng Jiang, tanto Wei Ying cómo Lan Zhan miraban al pequeño A-yuan. Cuando llegaron Wen Qing les había comunicado del nacimiento del pequeño Wen, le pidió que ellos lo criarán a final de cuentas igual sería criado cómo un Lan con un mejor futuro de los que ella podría darle.
Ambos aceptaron eso, asegurándole a la mujer que podría ver al niño cada vez que quisiera ya que seguía siendo su tía.
Esa noche el pequeño durmió tranquilo con el calor de sus padres a su alrededor y con la seguridad que nada le pasaría ya que sería cuidado por ambos.