Breathe.

Uno.

Jonnathan Phills, soldado del ejército, 27 años de edad, tez morena, cabello marrón y ojos color avellana, su estatura es de 1.85 mtrs.

«El ejército, lo peor que pude haber conocido, lo odio tanto... Las guerras y todo lo que tenga que ver con acabar con la paz mundial lo detesto... Lo mejor del caso, es que trabajo para el ejército...» pensamiento de Jonnathan Phills.

-¡Hora de despertar! -dice la dura voz del teniente Sheng.- ¡Dije que hora de despertar! ¿No entendiste, Phills?

En eso Jonnathan siente un cubo de agua helada que cae en toda su cara, despierto de golpe y escucha a todos los del lugar reír a carcajadas... Todos duermen en unos galerones inmensos... Por lo menos hay 150 personas en cada galerón.

«Maldita la hora en que no desperté» -piensa frustrado mientras se limpia su cara con su antebrazo.-

-¡Mira mi cama! ¡Está empapada! -le replica al teniente.-

-¿Piensas que me importa? La próxima vez despierta cuando yo diga, aquí quien da la ordenes soy yo. -dice él y se voltea para irse, cuando está en la puerta se voltea y le mira burlesco.- Y para tu suerte, hoy está lloviendo. -pega una carcajada y se va.-

Toma su uniforme, unas sandalias, ropa interior limpia y se dirige a las duchas que están a unos cien metros de donde él duerme, en otro lugar parecido a donde ellos dormían, solo que ahí estan todos los de la base militar, cuando llega nota que hay una fila inmensa.

«No sé que es peor, si estar en el ejército o estar en la cárcel, pero por mi experiencia y por lo que veo, es parecido.» -en eso la voz de un chico saca de los pensamientos a Jonnathan.-

-¿Quieres moverte, ‹mariposita›? -le dice mientras lo empuja, él se voltea enojado, iba a golpear al tipo pero, cuando se voltea ve que es su mejor amiga, Silvana Torres.

-¡Eres una estúpida! -le dice él mientras golpea a esa chica por el hombro.-

-Mucho cuidado, Phills, si sigo así pronto seré teniente. -dice ella orgullosa.-

-Oye, tu voz está cada vez peor de ronca. -le dice Jonnathan con preocupación.-

-Gripe de mierda... Lo único que hace es afectar más mi voz. -dice ella.-

-De verdad pensé que eras un chico.

-Da igual, soy como uno y lo sabes... -le dice.-

-Buen día, muñeca... -le dice el oficial Díaz a Silvana.-

-Buen día. -le dice ella seria.-

-Oye hermosa, ¿no necesitas ayuda con tu ducha hoy? -le dice Díaz, este tipo es aquel que toda mujer que lo pueda a ver le atraería pero él con solo abrir su boca haría que, igualmente, cualquier mujer le den nauseas... Él trató de tocarle el trasero a Silvana, ella con un rápido movimiento ya lo tenía en el piso y le estaba haciendo una llave.

-¿Cuándo te va a quedar claro que a mi no me gustan los bates? -le dice ella- Lo único que tú y yo tenemos en común es que a los dos nos gustan los agujeros. -dice ella mientras ríe.-

-¡Puta lesbiana! ¡Sueltame que me estás matando! -le dice él con demasiada dificultad.-

-Te salvas que estamos en el ejército, si no, ya no tuvieras pene, Díaz. -le dice Silvana y lo suelta.-

-P... Perra. -le dice él tomando aire.

-Tu madre sí a la hora que planeó traerte al mundo, bastardo. -le dice y le escupe en la cara.-

Todos los hombres que estaban ahí empezaron a reírse cruelmente del oficial Díaz.

«Esa perra no me va a dejar en ridículo, como lo acaba de hacer, esa ramera me las va a pagar.» pensó Díaz con mucha rabia... Jonnathan se dio una dicha rápida, se viste y sale...

-Te demoraste mucho, ‹mariposita›. -le dice ella riendo.-

-¿Este será mi nuevo apodo? -le dice él.-

-Tal vez, y hablando de nuevos... Dicen que en un tiempo llegarán nuevos enfermeros, ojalá estos si sirvan de algo.

-¿En serio? ¿Cómo los sabes?

-Soy una chica, lo sabemos todo...

-De seguro estuviste ligando a la comandante Fishers para que te dijera eso. -dijo Jonnathan.-

-Mira, mejor vete a darte una ducha, hueles a perro muerto. -le dijo Jonnathan riendo y la empujó a una ducha.-

Silvana salió, pero ella salió con su ropa puesta, ella obviamente se vestía dentro de las duchas ya que como era una de las únicas mujeres en esa base...

Se preguntarán, ¿por qué ella está en una base militar de hombres?

Su padre era un soldado de esa misma base militar, una vez en una expedición en Irlanda, conoció a la madre de Silvana... Ella fue producto de una violación, cuando Silvana nació ya su padre era jefe de toda la base, obligó a todos sus soldados a ir a Irlanda a buscar a su hija, se la quitó a la fuerza a los abuelos de Silvana, ya que, la madre había muerto en el parto de Silvana, cuando ella llegó a la base su padre la crío y pues, a los quince años descubrió que era lesbiana, tuvo una novia pero, el padre de la chica la sacó de la base militar y prohibió a la chica a hablarle, ella sufrió demasiado y pues, desde pequeña ella ha sido insensible, y a ella nunca le han dicho que es producto de una violación, pero, ella le tiene como repulsión a los hombres.




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