El día en que el reino cayó

Ese día inició como cualquier otro, pero terminó de un modo inolvidable para muchos.
El reino era un grupo de whatsapp, donde un puñado de jóvenes de entre 13 y 20 años se sentían libres del mundo. Ese espacio era suyo, y nadie podía controlarlos.
Al menos así había nacido, pero lo cierto es que con el tiempo el reino entró en decadencia, y quienes habían llegado con ánimos de sentirse libres terminaron encontrando una prisión aún más grande que aquella de la que pretendían escapar.    
Lentamente, el grupo se volvió toxico, y si bien cada tanto había caras nuevas que refrescaban un poco el ambiente, el núcleo enfermo del grupo se mantenía inamovible. Tanto así, que los nuevos nunca duraban mucho, y los viejos también se iban.  
El reino estaba deteriorado, pero su núcleo se resistía a desarmarse. Se aferraban unos a otros como a un chaleco salvavidas, sin saber que ellos mismos eran las espinas para el chaleco del otro.    
Sin embargo, lograban mantenerse a flote. Hasta que un día, algo que no tenían previsto ocurrió.
Todo comenzó con una discusión entre dos miembros que habían salido por un tiempo, uno de ellos intentaba hacerle entender al otro que los sentimientos negativos que albergaba no lo llevarían a ningún lado, salvo a lastimarse a sí mismo. Quería convencer al otro de que dejara de lado su estúpida actitud para poder seguir normalmente con su vida dentro del reino. El otro intentaba convencer al primero que debía dejar de hablar de eso, ya que no tenía ni idea de qué pensaba realmente o el motivo por el que hacía lo que hacía.
Uno de ellos sabía más del otro de lo que el otro pensaba, pero no voy a decir quien creo que tenía razón. Ambos tenían motivos para comportarse del modo en que lo hacían, o al menos eso creían.          
Durante la pelea se formaron bandos, todos comenzaron a discutir, la situación era muy tensa. Uno de esos dos miembros se fue, y con él salió otra persona, que consideraba que tenía razón.
La cosa pareció calmarse, hasta que de repente...     
Gente desconocida comenzó a entrar al grupo mediante un link. Entraron un montón de personas, insultaron a los miembros del grupo, cambiaron el nombre...      
En el caos, surgió una pelea de administradores, algo que no ayudó para nada a que la situación se resolviera con rapidez.    
Y así, el reino cayó, luego de casi tres años de mantenerse estable.
Porque aunque aquellos chalecos salvavidas estaban recubiertos de espinas que los hacían desangrarse a cada instante, no sabían mantenerse a flote por sí mismos. Preferían esa ilusión de salvavidas que afrontar sus problemas por sí solos.