Un copo de nueve cruza por enfrente de mi ventana. Es el primero de la estación, y rápidamente capta mi atención. Quizás sea porque es demasiado temprano para que nieve, o tal vez es que parece tan perfecto y solitario... quizás solo sea que estoy buscando hace rato una excusa para dejar lo que estaba haciendo. Es aburrido estudiar, aunque es necesario también, solo que la mayoría de las personas no lo entiende. Pienso en la nieve y vienen a mi muchos recuerdos, empezando por su aroma. Eso es otra cosa que la mayoría de la gente no nota, la nieve se siente en el aire incluso antes de caer, tiene un aroma específico que puede sentirse antes de que el primer copo de nieve se digne a caer. La nieve siempre ha sido asociada con la pureza, porque es blanca, pero para mí ha sido siempre la crueldad lo que más rememoro al pensar en la nieve. La crueldad del frío, la de la soledad, la de la belleza cristalina cayendo del cielo que ha matado a tanta gente. Eso es otra cosa que la mayoría de la gente ignora, no, lo saben, pero no les interesa, es solo un mito para la mayoría de ellos, no han conocido esa sensación jamás. Ese sentimiento es el aire helado, puede ser quedarse atrapado dentro del hielo, puede ser que te agarre una tormenta y mueras de frío, hay tantas cosas... pero la nieve es como el mar, inagotable, y la gente se cree temerosa por adentrarse más de la cuenta en el mar, o por aventurarse fuera de sus refugios en medio de una tormenta. Solo se conoce el aliento gélido de las montañas una vez, y no suele salirse con vida de ahí...Ni siquiera es necesario que sea invierno para que la nieve surta su cruel efecto, solo tienes que subir lo suficiente...
Unos segundos después, se ven caer muchos otros copos, sé que son todos diferentes, y supongo que mañana no tendré clases, la primera nevada del año marca el momento para celebrar la fiesta del principio, el aniversario del pueblo. Tengo que terminar de estudiar, aunque sea para poder disfrutar de la fiesta sin tener que volver temprano para terminar, pero la nieve no me deja, me trae tantos recuerdos...