Bueno finalmente ha vuelto la luz, pero qué silencio…, me pregunto inquisitivamente: ¿dónde estará Lisa?, seguro se ha sobresaltado con la breve falta de luz y quizá en estos momentos me está buscando, la verdad es que es muy raro que se haya ido la luz, de verdad el servicio eléctrico en Venezuela jamás falla…, bueno menos mal que ya volvió.
Noto con extrañeza que el baño luce muy diferente…Hum, sobre todo muy luminoso, pero bueno, la verdad tampoco me fijé muy bien en cada detalle del mismo, sólo necesito salir a buscar a Lisa a toda prisa.
Abro la puerta ejerciendo algo de fuerza con mis manos y para mi gran sorpresa… Me pregunto inquisitivamente muy sorprendido: ¿dónde estoy?, ¿qué ha sucedido aquí? y ¿dónde está todo el mundo?, este lugar definitivamente no es Weekends y el silencio lo delata, honestamente parece que estoy en otro lugar… coñ…, ¿qué es esto?
De pronto me veo inmerso en un complejo de pequeñas tiendas todas con coloridas decoraciones navideñas donde la imagen de Santa Claus destaca, definitivamente por un hecho inexplicable me encuentro en un centro comercial, veo algunas tiendas de comida, e incluso una de ¿electrodomésticos? que es la que más me ha llamado poderosamente la atención pues veo que la vitrina exhibe para la venta comercial televisores super delgados que parece que van a salir flotando por los aires, jamás en toda mi vida he visto unos así…, y también me llaman la atención unos aparatos pequeños que parecen ser unos mini televisores del tamaño de la palma de la mano que enseguida llaman mi atención, de hecho, a mi lado pasan unas personas vestidas con formalidad que brevemente me observan con cierta extrañeza y me fijo que las mismas llevan en una de sus manos los mini televisores llevándolos directamente a sus oídos, parecen hablar con ellos pero que raro es todo esto de verdad…
Caray, debe ser que me cayó fatal el ron que me tomé y por eso ahora estoy alucinando, o tal vez más bien me quedé dormido en algún rincón del baño de Weekends, eso es lo que me sucede, pero Dios mío todo parece tan real y si lo que vivo es auténtico entonces ¿dónde está Lisa?; animado por la curiosidad decido entrar en la tienda de ¿electrodomésticos?, otras personas que pasan vestidas algo diferentes, me observan con algo de rareza, en realidad no sé qué me miran la verdad, quizá mi alto peinado tipo punk?; bueno…, ya en el interior de la tienda contemplo unos artefactos incomprensibles y que yo nunca he visto en toda mi vida…, pero me fijo especialmente en esos mini televisores exhibidos los cuales muestran en las etiquetas de la estantería el nombre de: dispositivos móviles a continuación les siguen marcas que me son desconocidas y numeraciones… Hum, la verdad, son como unos televisores en miniatura, al acercarme a verlos con detenimiento me doy cuenta que jamás en mi vida he visto unas imágenes tan nítidas como en ellos y un sonido tan definido, ¡Woo, qué impresionantes son!, después de observarlos por un rato con detenimiento y asombro, por un breve momento enfoco mi vista hacia la ventana del establecimiento comercial y parece que es de día aún?…, pero si yo claramente recuerdo que llegué con Lisa en la noche y estacione en las adyacencias del establecimiento nocturno llamado Weekends bien dispuesto a rumbear, será que estoy soñando de verdad o quizá estoy ebrio?… ¡Ay no, ya me estoy asustando de verdad! Bueno voy a preguntarle a uno de los empleados que atiende esta tienda que parece salida del futuro para que me saque de la duda con respecto a: qué día es hoy.
—Amigo, perdone la molestia por favor…
—Buenos días, a su orden joven, ¿qué se le ofrece?
El señor como de unos cincuenta años se me queda observando con detenimiento, claro es un vejete, seguro que se ha fijado en mi peinado tipo punk tan a la moda que hoy luzco con orgullo, estos señores a cierta edad parecen desconfiar… Pero debo ser educado como me dice especialmente mi mamá, entonces le pregunto calmadamente.
—Amigo, perdone la molestia, me puede decir ¿qué día es hoy?
—Hoy es sábado, joven
—Pero, pero ¿de qué mes y año?
—Sábado 30 de diciembre del 2025
—¿Qué?
—¡Mentira, mentira, usted me está jodien…!
—Más respeto joven, sino ya mismo llamo a seguridad para que lo saquen de la tienda…
Como enloquecido giro todo mi cuerpo sobre mis pies, mirando todo a mi alrededor con extrañeza, de pronto una canción de lo más desentonada donde el cantante no parece seguir los acordes de la melodía resuena en toda la tienda a un muy alto volumen a través de unas cornetas diminutas, estos ritmos me son del todo desconocidos y de pronto de la pantalla de un delgadísimo televisor aparecen unas imágenes muy nítidas de jóvenes vestidos extrañamente que acompañan al cantante igualmente extrañamente trajeado…, entonces por primera vez me planteo con temor que quizá por un evento desconocido y enigmático del universo de verdad he venido a parar en el: ¡30 de diciembre pero del año 2025! y ya ha quedado muy atrás aquel 30 de diciembre de 1989, es que ya son demasiadas cosas fuera de lugar…, de pronto miro al vendedor de la tienda con unos ojos de loco que lo asustan en el acto y entonces intuyendo su intención de llamar a seguridad yo mismo salgo corriendo por mis propios pies de aquella tienda futurista que promete acabar con la poca cordura que aún me queda.
Una vez fuera de la tienda me doy unas cachetadas con la intención de despertar del ¿sueño?, la ¿borrachera?, pero sin éxito alguno… Luego me dispongo a vagar en solitario por el centro comercial lleno de múltiples incógnitas pero a la vez admirando variadas tiendas; los vidrios reflectivos me impactan sobremanera por su belleza y cierta luminosidad al reflejar la luz, así como observo gratamente sorprendido vitrinas con mercadería novedosa y desconocida, sí, definitivamente me convenzo que ya no estoy en el año 1989 sino en el año 2025, ¿cómo sucedió esto y porqué? es una gran incógnita…, pero, ¡Ay Dios mío! ¿y ahora que voy a hacer? Y ¿qué será de mí?